¨Sombras de lo que eramos¨

Capitulo 3 : ¿Como puedo amarte y Odiarte?

Narro yo:
Cinco ya había ido a buscar el dueño del ojo, sin embargo no obtuvo más que rechazos ante la información, por eso le fue a pedir ayuda a Klaus, Mientras Klaus hablaba con Cinco, Diego llegó corriendo con una noticia emocionante

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La habitación está llena de tensión mientras Isabel se sienta en el sillón, confundida y con la mirada desafiante. Cinco, Diego, Klaus, Allison y Luther están alrededor, pero la atmósfera es pesada, especialmente entre Cinco e Isabel.

—¿Isabel? —pregunta Diego, su voz seria—. ¿Te sientes bien?

Isabel lo mira, pero su atención pronto se vuelve hacia Cinco, sus ojos llenos de resentimiento.

—¿Bien? ¿Cómo podría estar bien después de lo que Reginald me hizo? —su tono es ácido—. Y tú... ¿dónde estabas cuando te necesitaba?

Cinco se siente incómodo, pero sabe que tiene que mantener la calma.

—No es el momento para reproches, Isabel. —responde, tratando de contener la frustración—. Lo importante es que estás aquí ahora.

Klaus, con su característico humor, intenta aligerar la atmósfera.

—Vamos, Isabel. No puedes seguir enojada con Cinco para siempre. Después de todo, él es el que tiene el peor corte de pelo de todos. —sonríe, intentando romper la tensión.

Isabel arquea una ceja, pero la rabia en su mirada no disminuye.

—No se trata de su corte de pelo, Klaus. Se trata de que me dejó. Él fue quien abandonó a todos.

—Oye, no seas tan dura. Es solo un corte de pelo, ¡no una traición! —Klaus ríe, pero la tensión persiste.

Cinco siente el peso de la culpa y el resentimiento, sabiendo que no hay palabras que puedan arreglar lo que ocurrió entre ellos.

—Mira, lo que pasó en el pasado no cambia el hecho de que tenemos que enfocarnos en el presente. Reginald sigue siendo una amenaza.

Luther asiente, tratando de encontrar un enfoque más práctico.

—No podemos preocuparnos por el pasado ahora. Reginald ha estado haciendo cosas que podrían perjudicarnos a todos.

Isabel se cruza de brazos, manteniendo la distancia emocional.

—¿Y qué si nos ha perjudicado? No parece que a los Umbrella les importe un carajo salvar el mundo a menos que les beneficie de alguna manera.

Klaus asiente con una sonrisa sarcástica.

—Ella tiene un buen punto. A menos que haya un gran cheque de por medio, no creo que estén muy motivados.

Diego, observando la dinámica, se siente frustrado.

—Eso no es lo que importa ahora. Isabel, necesitamos saber qué recuerdas. ¿Qué más puedes contarnos sobre lo que hizo Reginald?

Isabel se muerde el labio, claramente en conflicto.

—Recuerdo que él estaba obsesionado con mis habilidades. Quería... quería extraer algo de mí. Pero no tengo idea de lo que estaba planeando. —su voz tiembla un poco—. Solo sé que me sentía atrapada y... vulnerable.

Klaus hace una mueca.

—Vaya, ¿qué tal un fin de semana de spa en la academia? Eso podría haberlo aligerado.

Allison, aunque sonríe por la broma de Klaus, vuelve al tema serio.

—Necesitamos encontrar información sobre lo que Reginald ha estado haciendo. Si lo que dice Isabel es cierto, podría haber un riesgo inminente.