Capitulo. 7

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Minato estaba llegando a su casa después de un largo día además de tener hambre, fue a la cocina que para su suerte estaba como siempre vacía.

Eso le parecia para ya que Kushina siempre tenía todo listo, subió al segundo piso e ir a su habitación y cuando estaba llegando empezó a escuchar sollozos.

Sin pensar entro a la habitación solo para ver a su esposa en el suelo abrazando sus piernas y llorando a mares.

Minato: Que pasa.

Poniéndose a su lado con preocupación.

Kushina:Snifff......snifff.....soy.....snifff....una mala madre.

Minato: Eres una buena madre no digas eso.

Kushina: Si lo soy, hoy vi a Naruto por primera vez.

Minato: Que paso.

Kushina: El me odia nos odia a todos por lo que le hicimos.

Minato: Yo....

Kushina: Tiene muchas cicatrices y quemaduras en sus brazos, quizás su cuerpo estaba igual.

Minato: Que.

Teniendo una expresión de asombro.

Kushina: Yo lo vi el me dijo que los civiles lo torturaron muchos días ya que querían a alguien para desquitarse por lo del ataque del Kyubi.

Minato: Yo no se que decir.

Kushina: Durante ese tiempo solo nos concentramos en que los sellos de Menma y Mito estuvieran estables y dejamos de lado a Naruto.
No merezco estar viva soy una mala madre.

Soltando más lagrimas, Minato solo la pudo abrazar ya que le resultaba difícil de creer todo lo que escucho.

Pasaron unas horas hasta que logró hacer dormir a su esposa. Al hacerlo salio de la habitación y regreso a la oficina.

Se recostó en la silla para luego ver un cajón y sacar una botella de sake.

Minato: Kakashi puedes hacerme un favor.

De la nada un hombre cabello gris apareció frente a el.

Kakashi: Que necesita de mi.

Minato: Puedes investigar lo que paso hace 13 años por favor.

Kakashi: Que necesita en especifico.

Minato: Quiero saber si es verdad todo lo que me dijo Kushina, investiga todo hasta el más mínimo detalle por favor.

Kakashi: Hai Hokage-sama.

Llendose del lugar dejando al hombre rubio lamentándose todo el mal que le hizo a su hijo.

Por la mañana Naruto se estaba despertando con el cabello alboroto como toda mañana, tomo un baño y luego fue a la cocina para hacer su desayuno como de constumbre.

Naruto un prodigio sin motivos. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora