Inscripciones abiertas

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Nuevamente nos encontramos en la oficina de la dirección, adentro se encontraban la directora Rivers junto con su asistente Oliver atendiendo a uno de sus maestros.

-Es por eso que ofrezco la idea de realizar un concurso de talentos- dijo la maestra Bernardo sentada en la silla con una pose de pensamiento, juntando los dedos como un vendedor profesional.

-Me fascina la idea Srta Bernardo- aplaudió la directora Rivers unos aplausos chiquitos- Pienso que un concurso de talentos puede alentar la creatividad en los estudiantes.

-Mmmm pienso que es posible- dijo Oliver viendo su tabla- Entonces este concurso de talentos se llevará a cabo en el teatro de la escuela, y usted la organizará. ¿Está de acuerda maestra Bernardo?

-¡Más que de acuerdo!- dijo ella poniéndose de pie con una mano en el pecho y la otra estirándose al cielo.

...

Caminando por los pasillos Benny estaba perdido en sus pensamientos, conocer a los hermanos de Luan fue una experiencia interesante que lo dejó pensando, el timbre suena y tiene que volver a clases, pero en su trayecto ve a Luan, ella no lo notó y caminó a una considerable distancia hacia su clase. Benny pensó en saludarla, pero entonces los recuerdos de Vietnam en la casa Loud resuenan en su cabeza, y da la vuelta, completamente sudoroso y con su corazón latiendo a mil.

-¿Pero qué me está pasando?- dijo Benny en su asiento agarrando su cabello- ¡Antes no tenía ningún problema en formar una conversación con ella, pero ahora no puedo dejar de sudar al acercarme!

-Viejo, asco- dijo Doni reclinado en su asiento con los pies descansando en un asiento desocupado.

-Lo siento.

-Amigo, entiendo lo que sientes, he visto películas, pero en serio. ¿Luan?

-Sí ¿Qué es lo extraño?

-Bueno... ¿Qué le viste?

-Oh bueno, me gusta su sentido del humor, sus bromas son graciosas, ese color amarillo le queda bien, y su cabello color avellana- Benny empezó a divagar- Y sus frenillos...

-Okay! ¡Debo detenerte ahí antes de que me digas cosas perturbadoras! Ahorraré mis comentarios ya que no soy quien para juzgar tus gustos. Lo que deberías hacer es... hablarle. No hay más ciencia.

-¡Pero me pongo nervioso! Sabes, la semana pasada fui a devolverle su mochila, me topé con sus hermanos, y conocí más sobre ella.

-Wow, sobreviviste a la casa Loud, felicidades.

-Entonces conocí más sobre ella, sabe magia, tiene un negocio de fiestas, ¡Un canal de videos graciosos! Yo, solo tengo una marioneta- dijo con pesar alzando una muñeca de hilos frente a Doni.

-O-Okay, esconde esa cosa espeluznante- dijo bajando a la marioneta lentamente al suelo.

Tuvieron que interrumpir su conversación debido a que el profesor llegó con una pila de hojas intimidante estampándolas contra el escritorio. Al terminar las clases Doni y Benny caminaron reanudando su charla.

-Necesito una forma de impresionar a Luan- dijo Benny pensando con un dedo en su barbilla.

-¿Algo como eso?

Ambos voltearon a ver a un grupo de chicos rodeando los anuncios de la escuela. Se acercaron para ver mejor y vieron un volante enorme con dos máscaras de teatro y un anunciado que decía "Concurso de Talentos de la Secundaria Royal Woods" y abajo una hoja de inscripciones. Varios ya estaban dejando sus nombres.

-¡Eso es!- dijo Benny- ¡Me inscribiré al concurso de talentos!

-Mmm, me tienta, me tienta, hagámoslo- dijo Doni inscribiéndose también, a su lado pasó un chico quien puso su nombre también- ¿Vas a participar también Tim?- dijo con un gesto desconcertado.

-Sí, siento que mi alma no estará tranquila hasta que exprese mis oscuros sentimientos.

-Espeluznante, vamos a comer.

...

Luan había acabado sus clases y se dirigió a su casillero para dejar sus cosas, e irse a comer.

-¿Qué tal tu día linda?- dijo el Sr. Cocos una vez el casillero abierto.

-Nada extraordinario. Eh estado buscando a mi amigo.

-¿Un amigo?

-Sí, ¿No te hablé de él?

-Pues recordaría el momento en el que mi niña consiguió un nuevo amigo, seamos sinceros, yo soy genial pero ya te hacía falta un amigo humano.

-Gracias por el apoyo Sr. Cocos- Dijo con sarcasmo.

-De nada, diviértete con tu amigo, yo seguiré escribiendo mis memorias en mi mente.

Luan se despidió de su muñeco dejándolo en el casillero. Caminó tranquilamente a su siguiente clase cuando un volante voló hacia debajo de sus pies. Luan lo recogió intrigándose por lo que decía, entonces una chica de piel clara, cabello pelirrojo recogido con una cola de caballo, con un vestido púrpura, zapatillas negras con medias blancas y una pulsera púrpura en su muñeca izquierda.

-Hey, lo siento, estaba repartiendo los volantes y unos se me cayeron.

-Oh, toma.

-Gracias.

-¿Es un concurso de talentos?

-Así es, los competidores ensayarán en el teatro al terminar las clases toda la semana ¿Puedes creerlo?

-Oh vaya, pues quizás me inscriba- dijo Luan sacudiendo su brazo.

-¡Genial! Aquí tengo una lista para que pongas tu nombre.

-Gracias- dijo Luan poniendo su nombre.

-Hey ¿Eres Luan verdad?

-Eh sí...

-Hey Stefy, ¿Dónde estabas te he estado buscando? Todavía hay que entregar los volantes- llegó una chica de cabello castaño corto, de piel más bronceada que la de Stefy, usaba un calentador blanco con franjas azules a los costados, usando zapatos negros con blanco y dentro de su chaqueta ocultaba un collar.

-Lo siento Annie, solo hablaba con Luan.

-Nos espera la directora, apresúrate- dijo prácticamente jalando a su amiga de la manga.

-¡Ya voy! ¡Mucho gusto!- dijo la tal Stefy despidiéndose de Luan.

-Adiós- dijo Luan algo desconcertada, no recordaba haber visto a esa chica antes.

...

-Eh maestra Bernardo- Oliver caminaba junto a la profesora rumbo al teatro de la escuela notándose preocupado.

-¡Maestra Bernardo! Terminamos de repartir los volantes- dijeron las dos chicas encargadas.

-¡Excelente, gracias por su ayuda, espero verlas pronto en el concurso!

-Por favor maestra Bernardo, debemos hablar.

-¿Qué le preocupa Señor Oliver?- dijo Bernardo entrando al teatro.

-Me preocupa la inversión que puso para el premio.

-No se preocupe por eso, he puesto de mis ahorros para conseguir el mejor trofeo para el mejor concursante.

-Aún así, el costo se eleva de manera preocupante.

-Usted tranquilícese- dijo Bernardo de forma serena- Tengo todo planeado.

Bernardo entonces recibió un paquete de un repartidor dejándolo en su oficina, esta lo abre y se ve un enorme trofeo dorado con dos máscaras de teatro. Fuera de la oficina antes de que se cerrara la puerta Stacy había logrado ver el trofeo camino a su salón.

LUANDonde viven las historias. Descúbrelo ahora