Kill me or kill me not?

CAPÍTULO 5

Regresamos del hospital muy temprano, todavía no amanece, pero Johnny me carga en sus brazos. Nuestros padres nos siguen hasta la habitación de invitados. La policía ha cerrado mi dormitorio como una escena del crimen, encontraron a Tara muerta cerca del basurero, al lado de los vestidores de las porristas. Estaba perfectamente vestida, no estaba ebria, pero si estaba con heridas, graves heridas de hacha en todo el cuerpo.

Un escalofrío me recorre al ver la cama, solo puedo pensar en cómo Axe la mató para luego venir a verme. Fueron minutos que parecieron horas, y si Johnny no hubiera estado en el baño, todo se hubiera podido evitar, ¿cierto? O tal vez, Axe estaría riendo su muerte ahora mismo, justo como me lo imagino riéndose de la muerte de Tara.

Relamo mis labios acomodándome en la cama, Johnny me mira, asustado, limpiándome la mejilla con su pulgar. Aparto la cara, no sé porque, pero ese tacto, Axe usaba guantes, tenía las manos más grandes que las de Johnny, tenía mucho peso, se veía enorme y aterrador. Podría empezar por ahí.

Trago duro mirando a mis padres, se hacen a un lado dejando pasar a Johnny para que tome asiento de mi otro lado. Los Hoggart traen unas caras de pena, cosa que ignoro para centrarme en lo que me dijo el médico.

No tengo heridas, Axe no me dejó marcas, no hay heridas en ningún lado. La única que tengo es la que está en mi frente y eso es porque Axe tiró de mi tobillo y caí sobre la cómoda, pero es un hematoma, no está hinchado, pero seguro que se hinchara. Lo más extraño es que todo parecía que se trataba de un ataque de pánico, aunque nadie consigue explicarse como es que Axe puedo meter tanta sangre a mi habitación.

Hago una mueca estirándome, hay un malestar rondando en mis extremidades. La fuerza que use y solo soy capaz de pensar en ¿Por qué carajos no pude quitarle la máscara? ¿la trae pegada a la cara o qué? pareciera que es parte suya, pero eso no puede ser posible, eso no ocurriría nunca.

—No entiendo cómo pudo entrar en la casa —habla mi padre haciendo que lo mire —. Eso es imposible, teníamos todo cerrado, ¿y la sangre? Eran baldes.

—Parece ser que Tara no era su única víctima —el señor Hoggart exhala, apoyándose.

Lo miramos, asustados.

—¿A qué te refieres? —la tía Mae se abraza a sí misma, mirando a su esposo.

—Encontraron otros cuerpos en la calle aledaña, ¿recuerdan a los nietos de la señora Pradley?

—Drogadictos y ladrones —señala mi padre a regañadientes.

—Los cinco nietos, mató a los cinco —tío Sawyer me mira, luego mira a su esposa y a mis padres —. En una hora llegara el policía que os va a cuidar, caminara cerca de ustedes. Necesito que se comporten, estamos hablando de sus vidas. Y Johnny, si es posible, ven a casa, hijo.

—No estoy dejando a Em sola, solo me fui al baño —maldice en voz baja —. Fue demasiado rápido. La dejé unos segundos, no escuché nada.

—Olvídalo, no es culpa tuya —suspiro tomando su mano.

Johnny me mira con cariño, presiono su mano sujetándola con fuerza y sonrío viendo como juega con nuestros dedos. Nuestros padres siguen hablando sobre como Tara fue perseguida desde la casa de Oggy hasta la escuela, fue mucho camino por recorrer, no me explico cómo pudo haberlo hecho.

Pero eso ya no importa, Tara era una horrible persona, no se merecía que la partieran a la mitad con un hacha, pero no voy a llorar la muerte de alguien tan mala. Necesito buscar un modo de vencer a Axe, especialmente si sabe cómo aparecer cuando estoy sola. Tengo que encontrar un modo para quitarle esa mascara, perseguirlo y atacarlo hasta que pueda confesar.