† (12) ¿ ᴜ ɴ ᴀ ᴄ ɪ ᴛ ᴀ ? †

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Pasó el domingo y llegó nuevamente el Lunes. Y Félix solo estuvo el triple de paranoico que de costumbre.

Todo porque no encontró imágenes o descripciones, mucho menos nombres o algún indicio de quien estaba detrás de esa cuenta vacía que le había escrito aquel mensaje.

Todo adquirió un color totalmente blanco, no era una persona que siguiera a nadie o tuviera seguidores, no era alguien conocido que quisiera hacer bromas de mal gusto para nada.

Y la última opción que quedaba era Hwang Hyunjin. Pero de alguna manera Félix sentía que quizá el hubiera actuado directamente al buscarlo o algo así, no andar jugando a las escondidas con algo tan tonto como eso.

La única manera de que Félix no pensara más en eso fue encontrarse con Jackson prácticamente masacrado en la Universidad. Al almuerzo lo vio tirado en una silla de la cafetería poniéndose hielo en un ojo y con morenotes que ensuciaban la que había sido una blanca y perfecta piel.

-¿Un oso esta vez? -le preguntó Félix al sentarse frente a él.

-Mi vida es como un reality show, Félix, pero sin el premio de un millón de dólares al final.

-Debe ser el karma -se burló él.

Jackson le puso mala cara.

-¿Insinuas que por no creer en tus alucinaciones me pasó esto? -preguntó algo ofendido.

-Te falta más empatía con pobres almas con la mía, es eso.

Jackson soltó un bufido mientras el agua se deslizaba por un costado de rostro hasta caer en su camiseta.

-¿Qué te pasó, realmente? -preguntó Félix serio.

-Solo diré que al menos ahora tengo algo más para reírme en el futuro... si es que llego a tener uno.

Félix rodó los ojos. Sabía perfectamente que Jackson no le iba a decir nada porque era demasiado orgulloso cómo para aceptar que le habían dado un paliza.

-¿Por lo menos lo dejaste peor que él a tí?

-Esta en el hospital.

Jackson quiso sonreír en señal de satisfacción, pero puso una mueca de dolor ya que seguramente le dolía hasta expresar su felicidad.

Félix no le preguntó nada por un momento mientras revisó un correo que le llegó de uno de sus profesores.

Cual fue su sorpresa cuando vió que era del mismo que les había encargado el collage, con quien se había visto esa mañana y quien estaba informando que recibiría ese trabajo el siguiente lunes.

-Mierda -susurró Félix por lo bajo antes de levantarse abruptamente de la silla.

-¿Mierda? -se sorprendió Jackson - ¿Desde cuando dices groserías de esa magnitud?

Pero Félix no respondió, simplemente salió corriendo hacia el salón de profesores, dejando a Jackson con la palabra en la boca. Tenía que suplicar por más tiempo, porque se suponía que le habían dado un mes y le quedaban tres semanas para eso. Si bien era cierto que ya tenía las fotos, terminar de editarlas con todo el trabajo que le quedaba y sus otros problemas, era una labor titánica.

Solo que su torpeza lo hizo chocarse de frente con alguien, dejándolo aturdido por un segundo antes de pedir disculpas.

-Perdón, no estaba miran... -se quedó a medias cuando vio se quien se trataba. Y por poco se hecha para atrás.

-Disculpas aceptadas -dijo Hyunjin.

A Félix casi se le sale el corazón de nuevo, pero no tuvo el valor de huir con antes. Más bien se sintió como un conejo atrapado en una jaula.

IMMORTAL¹ | ʜʏᴜɴʟɪxDonde viven las historias. Descúbrelo ahora