† (8) ¿ s ᴏ ʀ ᴘ ʀ ᴇ s ᴀ ? †

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Comprender el porque sucedían o no las cosas y de que maneras, era un dilema universal sin solución.

El problema estaba en que la curiosidad por tener esas respuestas era latente, y el pensamiento humano era el de buscar una explicación así fuera la más absurda posible.

Eso fue lo que le pasó a Félix luego de quedar más que confundido al haberle pasado lo que le pasó. Aquel momento después de que su hermano regresara a su habitación para decirle lo que ya sabía, fue más importante y definitivo en lo que él creía de su cordura hasta ese momento.

Ni siquiera el hecho de saber que quizá había descubierto a una persona que desafiaba las leyes de lo natural hasta llegar a lo sobrenatural, había sido tan impactante como saber que podía predecir el futuro de alguna tenebrosa manera.

Cuando Chris volvió para repetirle todo, él se quedó en una especie de limbo al no entender el por qué ya había visto todo eso. Su hermano al verlo así se lo atribuyó al hecho del impacto de la noticia, para él, Félix y Sam parecían buenos amigos, además, cuando hacía falta que indagara más, realmente no lo hacia bien, así que se conformó con sus propias conclusiones.

Luego de esa noticia y de que Félix volviera en si, permitió a Christopher irse con la familia del chico a ver en que podía ayudar, mientras él se quedó en casa para hacer una exhaustiva búsqueda en internet sobre lo que posiblemente le había ocurrido.

Los principales articulos hablaban sobre cosas espirituales y del alma, la mayoría eran escritos largos sobre dones que a algunos elegidos les eran dados para un beneficio social. Casi todas esas páginas que visitó eran de temas religiosos o sectas, pero para él fue suficiente ver eso. Porque era una respuesta al final de cuentas.

Eran casi las diez de la noche cuando terminó de indagar cada lugar que pudo, convencido de que eso era todo, aunque tal vez habían quedado unos que otros cabos por ahí.

A esa hora recibió un mensaje de texto de Christopher:

»”Puedes irte a dormir por si no lo has hecho pensando en porque tu querido hermano no aparece”

»”Porque sé te preocupas taaanto”

»”No te desveles”

Eran mensajes cargados de la ironía propia de su hermano, pero Félix no reparó mucho en eso y solo le respondió con un “ok”, para luego dejar el teléfono a un lado y seguir investigando en los huecos más recónditos sobre su caso.

Solo que no pasó mucho antes de que se aburriera de buscar y encontrar respuestas iguales. Por eso se animó a escribirle a Jackson sobre lo que le había ocurrido, estaba seguro de que él no lo tildaria como un maniático.

Creó que me estoy volviendo loco o puedo predecir el futuro”«

Fue el mensaje justo y necesario para que en menos de un pestañeo, Jackson lo llamara.

Félix le contó todo lo que había pasado, no se guardó absolutamente nada, ni un detalle y esperó con paciencia la respuesta de Jackson.

—Creo que estas loco amigo —dijo él del otro lado de la línea.

—¿De verdad lo piensas? Lo último que quiero es que Chris lo diga, me enviaría de vuelta a casa con la excusa de que sería el mejor internado para dementes.

—No te preocupes por eso, nadie notará tu demencia... bueno, excepto todo el mundo si vas a ir contando por ahí tus hazañas.

Jackson soltó una carcajada que resonó muy fuerte por el micrófono del celular. Era un tipo que se reía de sus propios chistes malos, pero eso era algo imposible de remediar.

IMMORTAL¹ | ʜʏᴜɴʟɪxDonde viven las historias. Descúbrelo ahora