El sol de la tarde bañaba el patio de entrenamiento de la escuela de Tokio. Itadori, enérgico como siempre, practicaba sus movimientos de combate cuando escuchó pasos decididos detrás de él. Al volverse, vio a Nobara y Maki acercándose, ambas con expresiones decididas que le hicieron preguntarse si algo serio estaba ocurriendo.
Nobara: ¡Itadori! -Nobara levantó la voz, sus ojos brillando con intensidad-. Hoy entrenaremos juntos, ¿verdad?
Maki: En realidad, ya había quedado con él antes que tú, Nobara -dijo Maki en tono calmado, pero con una mirada afilada.
Itadori parpadeó, mirando a ambas chicas sin comprender del todo la situación. Se rascó la cabeza y, con una sonrisa nerviosa, intentó desviar la conversación.
Itadori: Eh... no sé si puedo entrenar con ambas al mismo tiempo, pero si quieren, podríamos dividir el tiempo. Primero entreno con una y luego con la otra, ¿qué les parece? -dijo, riendo, aunque su risa sonó incómoda.
Nobara cruzó los brazos y lanzó una mirada de reprobación a Maki.
Nobara: Parece que alguien está olvidando quién siempre ha estado allí para Itadori, apoyándolo desde el primer día. ¿O me equivoco, Maki?
Maki arqueó una ceja, manteniendo su tono sereno pero con una pizca de irritación en sus ojos.
Maki: No creo que esto se trate de quién llegó primero, Nobara. Si Itadori necesita a alguien que pueda desafiarlo y ayudarlo a mejorar, soy la persona indicada. Él y yo compartimos un nivel físico que es difícil de igualar -contestó, enfatizando sus palabras con una leve sonrisa de confianza.
Nobara se puso de pie, mirándola con firmeza.
Nobara: ¿Y qué? ¿Eso te convierte automáticamente en la mejor para entrenarlo? -preguntó con una mezcla de sarcasmo y desafío-. Puede que seas fuerte, pero eso no significa que entiendas a este bobo mejor que yo.
Itadori observaba la escena, visiblemente confundido. Sabía que tanto Nobara como Maki eran competitivas, pero no entendía por qué de repente parecían tan intensas en su discusión.
Itadori: Ehh... chicas... -comenzó a decir, intentando intervenir, pero Nobara lo interrumpió con una mirada decidida.
Nobara: Itadori, ¿quién prefieres que sea tu compañera de entrenamiento? -preguntó Nobara, mirándolo directamente a los ojos-. Ya sabes que siempre he estado contigo, y además, somos amigos. Tú y yo hacemos un gran equipo, ¿verdad?
Maki soltó una pequeña risa, cruzando los brazos.
Maki: ¿De verdad vas a ponerlo en esa posición, Nobara? -preguntó, manteniendo la calma pero con una expresión desafiante-. Itadori no es alguien a quien puedas presionar para que elija. Y, sinceramente, si lo dejamos decidir con base en quién realmente le ayuda a mejorar... bueno, la respuesta es obvia, ¿verdad?
Itadori levantó las manos, tratando de calmar la situación.
Itadori: ¡Por favor, no se peleen! -exclamó, sintiendo el calor de la presión en su pecho-. Las dos son excelentes compañeras de entrenamiento, y realmente no quiero elegir entre ustedes.
Nobara le lanzó una mirada severa a Maki, como si estuviera decidida a no dejar que esta ganara.
Nobara: Itadori, esto no es solo sobre entrenamiento. Tú sabes que yo siempre he estado allí, y no voy a dejar que alguien venga de repente y actúe como si tuviera algún derecho especial sobre ti -dijo, con un tono en el que Yuji detectó algo más que simple camaradería.
Maki frunció el ceño y dio un paso adelante, enfrentando a Nobara.
Maki: Y tú estás actuando como si Itadori fuera alguna especie de... propiedad tuya, ¿no crees? Él es libre de pasar el tiempo con quien desee. No eres la única que se preocupa por él, Nobara.
Ambas intercambiaron miradas desafiantes, y Itadori, sintiendo que la situación estaba escalando demasiado rápido, intentó interceder una vez más.
Itadori: Chicas... de verdad, no quiero que esto se vuelva una pelea -dijo con tono conciliador-. Los tres somos amigos, y no hay razón para que...
Nobara no le dejó terminar.
Nobara: ¿Por qué no lo entiendes? -exclamó, con los ojos llenos de una mezcla de frustración y algo que él no lograba identificar por completo.. Maki y yo... tenemos diferentes formas de ver nuestra relación contigo, ¿entiendes? Esto es más que solo entrenamiento.
Itadori ladeó la cabeza, perplejo. Sus pensamientos iban en direcciones opuestas, tratando de encontrar algún sentido a las palabras de Nobara.
Itadori: ¿Más que entrenamiento? -repitió, confundido-. Pero... ¿no somos compañeros y amigos? ¿Por qué tendría que ser más complicado?
Maki se cruzó de brazos, mirando a Nobara con una expresión desafiante.
Maki: Eso es exactamente lo que Itadori piensa, Nobara. Quizá deberías respetar cómo se siente y dejar de intentar forzarlo a ver las cosas a tu manera.
La tensión en el aire era casi tangible, y Itadori se sintió atrapado entre ambas, sin saber cómo mediar en la situación. Nobara parecía frustrada, y Maki también reflejaba un grado de incomodidad que él nunca había visto en ellas. Finalmente, Nobara tomó una decisión.
Nobara: Está bien, Itadori, perdóname si fui demasiado insistente -dijo, aunque el resentimiento en su mirada hacia Maki era evidente-. Pero solo quiero que sepas que siempre he estado a tu lado y voy a seguir estándolo, sin importar lo que pase.
Itadori asintió, sin saber cómo responder realmente. Una parte de él sentía que debía decir algo, pero no lograba encontrar las palabras adecuadas.
Maki, notando el gesto de Nobara, decidió hacer una última intervención.
Maki: Lo mismo va para mí, Itadori. Si alguna vez necesitas un apoyo o alguien con quien contar, estaré ahí. Pero no pienso entrar en juegos de competencia infantil. Tú sabes lo que valgo, y creo que eso debería ser suficiente.
Itadori miró a ambas, agradecido pero a la vez desconcertado. ¿Por qué parecía que, de alguna manera, cada una de ellas estaba tratando de establecer algo más allá de una simple amistad?
Finalmente, después de un largo silencio, suspiró.
Itadori: Chicas, de verdad aprecio lo que me dicen... pero no sé si entiendo bien. Creo que soy bastante... lento para este tipo de cosas -admitió con una risa nerviosa.
Nobara suspiró y le lanzó una pequeña sonrisa.
Nobara: Tal vez algún día lo entiendas, Itadori -dijo, sacudiendo la cabeza y relajándose un poco-. Mientras tanto, supongo que podemos dejar de pelear y... simplemente entrenar juntos, como amigos.
Maki asintió, aunque el brillo competitivo en sus ojos aún permanecía.
Maki: Estoy de acuerdo. Tal vez sea mejor que no sobrecarguemos a Itadori con tantas palabras.
Itadori suspiró de alivio, feliz de que ambas parecían haber llegado a un acuerdo temporal. Aunque aún no entendía del todo lo que había pasado, una cosa era clara: tanto Nobara como Maki eran importantes para él, y no quería perder la amistad de ninguna de las dos.
Ambas chicas intercambiaron una última mirada desafiante antes de dar media vuelta y regresar a sus posiciones de entrenamiento, y aunque la paz había regresado, Itadori no podía quitarse de la mente la sensación de que había algo en juego que aún no lograba comprender.
(N/A: Gracias por leer y no se olviden de dejar su estrellita :3)
ESTÁS LEYENDO
El hechicero mas fuerte. (Itadori x harem)
Fanfiction-Capitulos todos los dias- Luego de la derrota de Sukuna y la muerte de Gojo, Yuji Itadori toma el manto como el hechicero mas fuerte y asume el rol de director de la escuela de hechiceros de Tokio.