𝐷𝐶 𝑂𝑛𝑒 𝑆ℎ𝑜𝑡𝑠

𝑑𝑜𝑛'𝑡 𝑏𝑙𝑎𝑚𝑒 𝑚𝑒

A Jason no le gusta compartir a menos que sea contigo. ¿Stephanie le pregunta si puede compartir las galletas que compró? No, son suyas. ¿Tim le pregunta si puede tomar prestado su control? Solo usa el tuyo. ¿Damian toma prestado su equipo? Absolutamente no.

Se ponía especialmente celoso si te llevabas bien con los miembros de su familia. La forma en que te reías y disfrutabas de tu tiempo con ellos lo hacía sentir muy mezquino. No sabe por qué era así, pero siempre odiaba que interactuaras con ellos. Siempre intentaba encontrar razones para alejarte de ellos, ya sea para "entrenarte" para una misión o para ir de patrulla.

Resopló mientras se reclinaba en el sofá. Sus ojos no te apartaban de tu conversación con Damian. Sabía que no debía estar celoso por algo tan pequeño. Después de todo, era su hermano pequeño, ¿por qué estaba tan preocupado por él? Quiero decir, es mucho mejor que un niño. Cuando Damian se fue, finalmente te diste cuenta de lo que le pasaba a tu novio.

-¿Qué pasa? -preguntaste. Él te miró, con los brazos cruzados sobre el pecho. Resopló y evitó el contacto visual mientras hablaba. -No estoy celoso. -Te reíste entre dientes-. No te pregunté si estabas celoso.

Te sentaste en el suelo con él y le tomaste la cara con las manos, apretándola un poco. -Ven aquí. Dime qué te pasa -dijiste, burlándote un poco de él. Hizo más pucheros cuando le aplastaste las mejillas. Trató de parecer molesto y disgustado, pero era difícil no sentirse feliz contigo. -No pasa nada. -Miró hacia otro lado, murmurando-. Es una estupidez.

Lo miraste suavemente a los ojos. "Vamos, cuéntamelo".

"¿Mn? ¿Por qué no?", preguntaste.

"Porque son molestos y desagradables. ¿Por qué te llevas tan bien con ellos?"

Le acariciaste la cara. "Oye, no hay necesidad de estar celoso. Simplemente disfruto de su compañía, eso es todo. No significa que disfrute menos de la tuya", le aseguraste. "No estoy celoso", murmuró, burlándose. "Simplemente no sé por qué te gustan tanto, me está molestando". Solo te reíste suavemente. "Oh, ven aquí tú".

Le agarraste la cara y le diste un beso fuerte en la mejilla. Él resopla, su rostro se sonrojó mientras se negaba a mirarte. "Me estás avergonzando", dijo mientras se inclinaba ante tu toque de todos modos. Le diste otro beso en el mismo lugar. "Ese es el punto".

No pudo evitar la pequeña sonrisa que se dibujó en sus labios mientras continuabas depositando besos en su mejilla. Sintió una sensación cálida que se extendía por su pecho.

Stephanie entra con ustedes dos, su mirada se oscurece mientras los mira con el ceño fruncido. "¡Qué asco, consíganse una habitación!", exclama. Jason mira a Stephanie con enojo tan pronto como la ve allí de pie. "¿Por qué no aprendes a tocar la puerta, rubia?"