Extra: El Legado Continúa

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La aldea de Konoha estaba en su máximo esplendor aquella mañana, con los rayos del sol acariciando los tejados y reflejándose en la gran roca que llevaba tallados los rostros de los Hokage que habían guiado la aldea a lo largo de los años. Hoy, una nueva cara estaba a punto de unirse a ellos.

La plaza frente al edificio del Hokage estaba abarrotada, con ninjas, aldeanos y visitantes reunidos para presenciar un momento histórico. El sexto Hokage, Kakashi Hatake, se encontraba de pie en el balcón, con su típica actitud relajada, pero en sus ojos se percibía un brillo especial.



Mientras tanto, en el hogar Uchiha-Hyuga-Hatake, la familia se preparaba para el gran evento. Hinata, ahora madre de cuatro, no podía ocultar el orgullo en su rostro mientras ajustaba la capa del uniforme de Sasuke, quien llevaba el símbolo del clan Uchiha en su espalda.

- "Papá se ve genial" - dijo la pequeña Hana, de cinco años, quien tenía el cabello oscuro como Sasuke y los ojos perlados como Hinata. Ella observaba a su padre con admiración mientras trataba de imitar la seriedad de su expresión.

A su lado, la traviesa Yukari, también de cinco años, con el cabello plateado como Kakashi y los ojos perlados de su madre, intentaba alcanzar la banda ninja de su hermano mayor para juguetear con ella.

- "¡No me molestes, Yukari!" - protestó Ren, ahora de catorce años, quien había heredado el temperamento juguetón de Kakashi. Sin embargo, su sonrisa siempre era suficiente para desarmar cualquier intento de regaño.

Kaoru, el hijo mayor de Sasuke, con ahora quince años, observaba a su familia con una leve sonrisa. Era un chico serio y dedicado, que había heredado el mismo sentido del deber y determinación de su padre. Sin embargo, en su mirada había un destello de calidez, claramente influenciado por el amor y la amabilidad de su madre.

- "Bien, chicos, es hora de irnos" - dijo Hinata con una sonrisa. Con un suave toque en el brazo de Sasuke, añadió en un susurro: - "Hoy es tu día. Estoy muy orgullosa de ti."

Sasuke asintió, permitiendo que una pequeña sonrisa se asomara en sus labios antes de volver a su expresión habitual. Tomó la mano de Hinata y juntos, con sus hijos siguiendo de cerca, se dirigieron hacia la ceremonia.









En la Plaza del Hokage

Cuando la familia llegó, la multitud estalló en vítores. Todos los ojos estaban puestos en el hombre que había protegido a Konoha desde las sombras durante tantos años y que ahora daría un paso al frente para liderar la aldea.

Kakashi levantó la mano para silenciar a la multitud y comenzó a hablar con su voz tranquila y característica.

- "Hoy, es un honor para mí ceder este puesto a alguien que ha demostrado ser un pilar fundamental para nuestra aldea" - dijo Kakashi, sus ojos relajados pero llenos de orgullo. - "Sasuke Uchiha no solo ha sido un protector incansable, sino también un hombre que ha demostrado que incluso en la oscuridad se puede encontrar la luz."

Sasuke avanzó hacia el centro del balcón, con la capa del Hokage ondeando detrás de él. Miró a Kakashi, quien le entregó la gorra tradicional del Hokage con una sonrisa.

- "Cuida bien de Konoha, Sasuke" - dijo Kakashi en un tono que solo sus más cercanos conocían: un tono de sincera confianza.

Sasuke asintió con un leve movimiento de cabeza, aceptando la responsabilidad que se le había confiado.

- "Prometo proteger esta aldea y a todos sus habitantes, tal como lo hicieron mis predecesores" - declaró Sasuke con voz firme. - "Hoy comienza una nueva era para Konoha."

La multitud vitoreó mientras Sasuke colocaba la gorra del Hokage sobre su cabeza, sus ojos compartiendo un breve pero significativo cruce con los de Kakashi.














Más tarde, en casa...

Tras la ceremonia, la familia regresó a su hogar para una celebración íntima. Mientras los aldeanos seguían celebrando en las calles, Sasuke y Kakashi se relajaban en el jardín, con Hinata preparando un banquete especial.

Ren y Kaoru estaban entrenando en el patio, mostrando las habilidades que habían perfeccionado a lo largo de los años. Hana y Yukari observaban con entusiasmo, imitando sus movimientos con sus pequeñas manos.

Hinata se acercó con una bandeja de té, sonriendo al ver a sus hijos tan felices.

- "Parece que Kaoru está mejorando su técnica de Taijutsu" - comentó Sasuke, observando a su hijo con atención.

Kakashi, con su típica sonrisa oculta tras la máscara, se recostó contra un árbol.

- "Y Ren... bueno, sigue siendo tan creativo como siempre para encontrar formas de distraerse" - bromeó.

Hinata se rió suavemente mientras se unía a ellos.

- "Han crecido tanto... pero me alegra ver que, a pesar de todo, siempre encuentran el camino de regreso a casa."

Sasuke, por primera vez en mucho tiempo, dejó que una sonrisa genuina se asomara en su rostro. Miró a su esposa, a sus hijos, y a su ex-sensei, sintiendo una paz que jamás pensó que sería posible para él.

Había encontrado su lugar, no solo como Hokage, sino también como esposo y padre. La aldea estaba en buenas manos, y el legado de Konoha seguiría adelante gracias al esfuerzo y la determinación de su nueva generación.















FIN♡.
















¡¿Con Quién Me Quedó?! ~ Rencarne En Hyuga Hinata Donde viven las historias. Descúbrelo ahora