Guasimba's Family Temporada 7: ''¡Diamantes!''

PARTE I: Amiga o Enemiga

Uno de esos días, en los que Sophia y Diana se la pasaban juntas bebiendo y haciendo cualquier pendejada en la calle, una noche, hicieron una apuesta de quien aguantaba más la respiración en un cubo lleno de cerveza, quien ganara, al día siguiente la llevaría a un restaurante de alta gama donde iban a desayunar. Desafortunadamente, Diana perdió por el simple hecho de que Sophia se bebió completamente su cubo. Luego de unas discusiones a causa de las reglas del juego, terminaron dándose de golpes como casi siempre y luego se durmieron en el suelo.

Al día siguiente, Sophia aprovechó el mareo y el cansancio que tenía Diana encima donde le convenció de que había ganado la apuesta. Diana, quien se negaba un poco, terminó aceptando ya que no recordaba nada, al parecer no era tan veterana al momento de una borrachera como Sophia lo era, que a pesar de beberse un cubo completo de cerveza, puede recordar todo lo que hizo, eso ya era otro nivel.

Y tal y como lo dijo Sophia, Diana le llevó a desayunar a uno de los restaurantes más caros de Vinewood Boulevard donde se podían ver muchas personas con trajes y ropa normal, pero con ropa normal o sin ella, seguían viéndose de alta gama, donde estas dos parecían simples pobres delante de todas esas personas debido a que estaban en Shorts y camisetas de tirantes, cosa que nadie llevaba puesto allí.

-Hay que joderse... Mira todos esos soplapollas de las estrellas de Vinewood y Funcionarios... Lameculos sin honor ni orgullo, y vienen a comer aquí como si se sintieran gente importante...- Dijo Sophia mientras Diana leía el menú viendo que todos miraban a ambas extrañas.

-¿Qué te hace pensar que no son ya estrellas de Vinewood o funcionarios del gobierno?- Decía Diana mientras leía.

-Pues si fuese uno de ellos... Estaría siempre en mi casa, y habría que traerme la cerveza y la comida a la cama... Un Gimnasio enorme en mi propia casa, incluso una puta pista de Karts...- Decía Sophia recostandose de la mesa.

-¿Pero qué dices? Si tu eres ya uno de ellos... Robamos bancos, que no se te olvide, tenemos pasta hasta por el culo... Sin embargo, cierta persona la gasta en cosas para su negocio tan imprudente que tiene y siquiera piensa en su comodidad... Como una casa, un coche más chulo...- Decía Diana.

-Me suda el coño todo eso tía... Mi Dominator me mola un huevo y podría en ridículo tu estúpido Fletzer de carreras... A parte, vivo en un barrio genial...- Decía Sophia.

-¿Con solo 3 casas, un montón de arena y mucho calor?- Decía Diana dándole el menú a un camarero y le mostraba la orden.

-Bueno, para mí eso es tranquilidad pura...-Decía Sophia mientras le servían el desayuno a estas. -Madre mía, al menos aquí son más rápidos que cualquier restaurante...-

Estas empezaron a comer a gusto sus papas fritas con una Hamburguesa y jugo de naranja, algo muy ''Barato'' y poco apetitoso según en la zona que estaban, lo cual provocó que los demás los miraran aún peor, y aún empeoraron su vista cuando Sophia se colocó la servilleta por el cuello de su camiseta, como si fuese un bebé, algo que dejaba atontados a los demás clientes.

-Estas personas no pueden con tu manera de ser Sophia...- Decía Diana riendo.

-Cuando escriba un libro demostraré que a pesar del dinero y de lo hijo de puta que seas, siempre habrá alguien que seguirá siendo quien es... A pesar de todo... Odio las personas que desde que tienen dinero o algo de valor se vuelven arrogantes e hijos de puta... Si yo sin nada le doy una hostia a alguien, con la misma fuerza le daré una hostia a alguien teniendo dinero, no pagaré a alguien que la de por mí...- Decía Sophia con la boca llena.

-Amén...- Decía Diana riendo mientras bebía jugo.

Mientras estas disfrutaban de su desayuno ''Pobre'' y de las miradas extrañas de las personas, entró una chica vestida normalmente con el pelo morado y largo, la cual se sentó en una mesa para uno, y empezó a ver el menú: