Por ti

Reconquista

¿ Y ? ¿ Que tiene ? Que se joda el viejo choto ese, porque mejor no se fija en otras cosas, ante' de llamarte fisura. Habla sin saber, como sino no' conociera. - voceó el menor algo histérico.

Enzo el dio la razón al menor, por más que tratasen iban a ser visto como unos pobres fisuras.

Desde ese momento el trío de amigos comenzaron a volver muy unidos. Más cuando alguno pasaba por algo difícil.

A la madre de Enzo, le alegró demasiado que su hijo ya hecho amigos, quizá no sean los mejores, pero siempre estaban el moreno, y más lo estuvieron cuando este fue abandonado por su padre.

Su madre estaba embarazada cuando eso pasó, un día su marido se marchó sin dar alguna explicación. Enzo le chocó un poco, después de todo él había pasado parte de su vida junto a su padre, lo que le preocupo fue saber que su futuro hermano o hermana crecieron sin ninguna figura paterna.

Sin embargo, el no podía hacer nada al respecto, a los 4 meses había nacido su hermanito, Joaquín.

Era muy chico, había nacido prematuro, pesaba apenas 2 kilos, la primera en cargar a su hermano fue Lourdes, su hermana mayor. Él también lo hizo y cuando lo tuvo por primera vez en sus brazos, siento algo muy hermoso.

Como si una coincidencia se tratara, Enzo sale de aquellos recuerdos, por su celular no dejaba de sonar y al ver quien lo llamaba, quedó muy sorprendido.

Su madre, Carla, le estaba llamando. Se quedó viendo el número por un rato y de inmediato contestó. Hace unos meses que no iba a ver a su mamá.

Hola, ma. - musitó el moreno algo nervioso, por lo que fuera decirle su madre.

Hola, Enzo !

¿ Todo bien, vieja ? -

Si, querido y vos, ¿ todo bien allá ? ¿ cómo está Matías ? - pregunto la mujer algo nostálgica.

Sisi, bien y Mati, también todo bien con el, ahora él está fuera de casa, así no podrá saludarte. - respondió Enzo mientras sonría por charlar con su madre.

No pasa nada, me alegro de que se encuentren bien los dos. -

Si yo igual. Ma, perdón que te pregunte esto, pero ¿ por qué razón me llamaste, paso algo ? - pregunto Enzo muy nervioso.

Hijo, te soy sincera, yo dude en llamarte por esto, pero es que simplemente ya no se que hacer. -

Qué pasó ?

Es Joaquín, Enzo, el se manda cagada tras cagada, ya lo expulsaron de dos colegios, yo ya no se que hacer. Hablé con él, pero siempre es lo mismo, le pido que deje esas conductas y él me dice " esta es la última, ma" y al día siguiente ya anda haciendo lío. - mencionó la mujer muy tediosa.

Últimamente Joaquín se había vuelto muy problemático, más de lo que fue Enzo en su adolescencia.

¿ Que mierda hizo para que lo expulsaran ?a ver, ma ¿ vos que queres que haga ? No te entiendo. - cuestionó el moreno muy desorientado.

Enzo, lo único que te pido es que ! Lo ayudes a comportarse ! Dios, quiero que se vaya a vivir con vos por un tiempo, y que lo eduques, quiero que se sepa comportar, no quiero que termino como... - exclamo la mayor muy histérica, sin medir sus palabras, pero Enzo no la deja terminar.