Capítulo 7: Un Lugar Seguro

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El apartamento estaba tranquilo, solo los sonidos ocasionales de pasos y murmullos de los chicos resonaban en el aire mientras todos se relajaban después de un largo día. RM estaba leyendo un libro, Jin y Taehyung jugaban videojuegos, y el resto de los chicos estaba repartido entre el comedor y el salón. Sin embargo, esa calma fue rota cuando la puerta principal se abrió de golpe y Jungkook entró apresuradamente con TN en brazos.
Ella estaba profundamente dormida, con su respiración suave pero temblorosa, como si aún estuviera lidiando con el residuo del pánico que la había abrumado hace apenas unos momentos.
—Jungkook, ¿qué pasa? —preguntó Namjoon, levantándose del sofá al ver la seriedad en la cara de su amigo. Los demás también se incorporaron, preocupados al ver la figura inerte de TN en los brazos de Jungkook.
—Mi prima… —comenzó Jungkook, con voz grave mientras colocaba a TN con cuidado en el sofá—. Tuvo un ataque de pánico.
Todos lo miraron con asombro y preocupación. Sabían que Jungkook era muy protector con su familia, pero raramente lo habían visto tan agitado.
—¿Qué pasó? —preguntó Jimin mientras se acercaba a TN para ver si estaba bien.
—Se encontró con alguien… su ex —dijo Jungkook, tomando una respiración profunda para calmarse—. Ella lo vio cerca de su casa y entró en pánico. No podía quedarse allí, así que la traje aquí.
—¿Es el mismo tipo del que nos hablaste antes? —preguntó Taehyung, cruzando los brazos con el ceño fruncido.
Jungkook asintió, su rostro endureciéndose al recordar las cosas que TN le había contado sobre su ex, Seojun, y cómo la había tratado.
—Sí, ese mismo —respondió con una mezcla de rabia y preocupación en su voz—. No voy a dejar que le haga daño otra vez.
—Pobre TN —murmuró Hoseok, mientras los chicos se acercaban al sofá donde ella yacía dormida. Su rostro todavía estaba pálido, pero parecía más tranquila bajo el techo seguro del apartamento de BTS.
Namjoon se arrodilló junto a ella y la observó con preocupación. Aunque no la conocía tanto como Jungkook, ya había comenzado a sentir una conexión especial con ella desde su primer encuentro en la biblioteca. Verla así, vulnerable y asustada, le hizo sentir una punzada en el pecho.
—¿Sabes si se quedará aquí esta noche? —preguntó Suga, su voz baja pero atenta.
—Sí, lo hará —respondió Jungkook mientras miraba alrededor, buscando una solución—. Voy a arreglar mi cuarto para que se quede allí. No quiero que vuelva sola a su casa hasta que estemos seguros de que está a salvo.
—Nos aseguraremos de que esté bien aquí —dijo Jin con su habitual tono protector—. Todos la cuidaremos.
Jungkook asintió, agradecido por el apoyo de sus amigos. Sabía que TN estaba en buenas manos con ellos, pero aún no podía quitarse de la cabeza la idea de que su ex podría estar rondando cerca, acechándola.
—Voy a preparar el cuarto. Cuídenla, ¿vale? —dijo Jungkook mientras se dirigía a su habitación para empezar a organizar el espacio para su prima.
Los demás chicos se quedaron alrededor del sofá, observando a TN con preocupación. RM no podía evitar sentirse un poco impotente. Había algo en la vulnerabilidad de TN que lo hacía querer protegerla, pero también sabía que era un proceso delicado. Lo último que quería era que ella se sintiera invadida.
—¿Deberíamos despertarla? —preguntó Jimin en voz baja, como si temiera romper la paz temporal que había logrado.
—No, déjala descansar —respondió Namjoon, sacudiendo la cabeza—. Ha tenido un día difícil.
Hoseok tomó una manta que estaba en uno de los sillones y la colocó suavemente sobre TN, asegurándose de que estuviera cómoda. TN murmuró algo en sueños, pero no se despertó. Su respiración se había estabilizado un poco más, aunque su rostro todavía mostraba signos del pánico reciente.
Mientras los chicos cuidaban de TN, Namjoon no podía dejar de pensar en lo que Jungkook había dicho. ¿Qué tipo de persona era ese ex que la había llevado a este punto? La idea de que alguien pudiera haber hecho daño a TN, una persona que apenas estaba comenzando a conocer, le provocaba una inquietud que no podía ignorar.
—Cuando despierte, podemos preguntarle si quiere hablar —dijo Taehyung, rompiendo el silencio—. Pero sin presionarla.
Todos estuvieron de acuerdo. Sabían que el proceso de lidiar con un trauma no era algo que se resolviera en una noche, pero lo más importante era que TN supiera que no estaba sola.
Jungkook regresó unos minutos después, asegurando que su cuarto estaba listo para TN. Se quedó parado un momento, observando a su prima dormir, y soltó un suspiro aliviado al ver que al menos por ahora estaba a salvo. Sabía que ella había sido fuerte por mucho tiempo, pero también entendía que había límites para lo que una persona podía soportar sola.
—Gracias, chicos —dijo Jungkook finalmente—. Sé que ella también lo apreciará cuando despierte.
Namjoon le dio una palmadita en el hombro.
—Es familia, Jungkook. Vamos a hacer lo que sea necesario para que esté bien.
Los demás chicos asintieron, dejando en claro que estaban dispuestos a ayudar a TN en lo que fuera. Mientras la noche avanzaba, la preocupación de todos por TN permanecía, pero también sentían una calma extraña al saber que ella estaba con ellos, en un lugar seguro.

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