Mi luz en la Oscuridad - Niam -

Capítulo 6

Co-escritora @edwardsjessie
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No. Se dijo a sí mismo. Niall era uno de ellos. Estaba metido hasta las cejas en aquella frikada de Jesús y Liam no tenía ninguna razón, ninguna, para pensar lo contrario. Aquel era terreno feliz para Niall, y lo mejor que podía hacer era dejarlo así.
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Dormir con Niall era otra historia. En primer lugar, Niall parecía tener un problema con el espacio personal una vez que empezaba a moverse y a dar vueltas. Liam había notado los nervios de Niall cuando se quedó callado. Los dos se habían preparado para ir a la cama, poniéndose para dormir el pantalón de pijama, sin camiseta, así que los dos chicos llevaban solo el pantalón, olvidándose de la sofocante parte superior del pijama, y descansando con el torso desnudo.

Niall le estaba dando la espalda, a pesar de que estaba despierto, y Liam se dio cuenta de que había herido los sentimientos del chico, como si a Niall realmente le importara lo que él pensaba. Aquello, era inquietante para Liam, pero no estaba seguro de qué hacer al respecto, así que lo dejó estar. Estaban tumbados, uno a lado del otro en la oscuridad, en el silencio de la casa y de la comunidad. Demasiado tranquilo para Liam.

Después de todo lo que había pasado aquel día, simplemente no podía dormirse. Se quedó quieto, y recibió un par de codazos y rodillazos por parte de un Niall dormido. No era que golpeara fuerte ni nada de eso, pero había mucho Niall con el que lidiar. Después, uno de los brazos de Niall cayó sobre su estómago, y antes de que este pudiera apartarlo, tiró de él. Contra Niall. Liam se retorció, pero Niall no le dejaba moverse, estaba fuera de servicio, igual que la luz, con la boca medio abierta emitiendo suaves suspiros sobre el hombro de Liam.

Liam giró su cabeza para mirar a su "hermano", viendo lo guapo que era Niall. Desde tan cerca, y en ese momento en que no podía esconderse detrás de su pelo, Niall era guapo. Sus pestañas castañas, se curvaban justo en la punta, sobre aquellos ojos que a Liam le recordaban el mar. Niall tenía una especie de indecisión que le daba un aire de incertidumbre y disconformidad, y que era como una máscara sobre la belleza que poseía. El carisma propio de Niall, era suficiente para hacer efecto en las mentes de los otros, y hacerles ver, en parte, lo que Niall veía de sí mismo. Era engañoso, extrañamente atractivo.

Liam no se podía creer que estuviera pasando, pero su miembro se estaba poniendo duro contra su muslo, hinchándose lentamente, caliente, mientras miraba al chico a su lado.

El sexo no era nuevo para Liam, había follado y le habían follado personas de ambos sexos. No siempre de buena gana, pero había habido veces en las que había deseado a alguien. Conocía el placer rápido que se podía conseguir, momentos robados de los que nunca nadie necesitaba hablar. Había aprendido lo mejor del sexo oral de su compañero de litera en su primer reformatorio. El otro chico era algo mayor que él, y habían llegado a un acuerdo mutuo de dar y recibir. Esa había sido probablemente la mejor relación de Liam con otra persona hasta la fecha.

Se encontró a sí mismo mirando a Niall, y pensando cosas que realmente no debería pensar. Como lo obviamente "no tocado" que estaba Niall. ¿Habría sido puesto en la misma cama con otro chico a modo de test de preparación? ¿Para ver cuánto tiempo podía aguantar sin ser infestado por los demonios? Demonios. Claro. Liam tenía las ideas muy claras para poder decirle a Niall quiénes eran los demonios allí. No le había costado darse cuenta en qué clase de locura estaba metido esa vez. Eran locos fanáticos. Peor de lo que había visto hasta aquel momento, seguro, pero no completamente ajeno al repertorio que tenía Liam de los peores sitios en los que podía acabar.

Quizá era demasiado pronto para pensar en romper la burbuja en la que vivía Niall, romper cualquier cosa de Niall. Si tan solo pudiera moverle, sin necesidad de una grúa, para no estar medio cubierto de calor muscular... Liam se quedó dormido mientras pensaba en cómo salir de debajo de Niall.

A la mañana siguiente, temprano, Liam se despertó con Niall sacudiéndole por un hombro, abrió sus ojos somnolientos y bostezó contra la almohada. - ¿Qué hora es?

- Son las cinco de la mañana. Te he dejado dormir un poco más, pero ya tienes que vestirte y desayunar. Madre no sabía si querías café o no, pero te ha guardado un poco. ¿Cómo quieres los huevos?

De toda la charla de Niall, que decía demasiadas cosas, Liam solo oyó "cinco de la mañana", y echando un vistazo a Niall, soltó un gruñido. - La escuela no empieza hasta las ocho, incluso yo lo sé.

Niall le lanzó a Liam la camiseta de la noche anterior. - Sí, la escuela empieza a las ocho. Salimos para la escuela a las siete y cuarto, porque está en Sheffield, pero antes tenemos que desayunar, hacer las tareas y luego tenemos que ducharnos y volver a vestirnos. Vamos, no querrás perderte el desayuno, madre es una buena cocinera.

- Madre puede morderme el...

Niall se rio del susurro y dejó a Liam vestirse, mientras le hablaba por encima del hombro. - ¿Qué tal eres con los pollos?

Niall tenía que estar bromeando. ¿Pollos vivos de verdad? ¿No en forma de McNugget? Liam se percató de lo en serio que hablaba Niall, cuando al llegar a la entrada de la escuela en Sheffield, sus manos estaban marcadas por los picotazos. Niall ni siquiera le había dejado soltarles un guantazo a los pollos, le había dicho que tenía que ser suave. Como si él hubiera empezado aquello. Aprender cómo se ordeña una vaca, no era forma de empezar el día, pero al menos las vacas no eran tan malas como los pollos.

Liam miró la nueva escuela con un suspiro, y entró con Niall, sintiendo las miradas de inmediato. El instituto Sheffield era tan interesante como el pequeño pueblo que lo rodeaba. Una versión reducida de la vida que los estudiantes podían esperar después de graduarse. Liam estaba acostumbrado a ser el chico nuevo, pero no el chico nuevo vestido como si hubiera llegado en un carromato. Genial. Liam mantuvo el ceño fruncido, y devolvió la mirada a todo el que le miraba a él. Aquello no disuadía a los que acostumbraban a reírse de los demás, pero al menos mantenía a distancia al resto de los alumnos, de momento.

Niall susurró a su lado - De alguna manera, no es tan malo haciéndolo contigo. Estar aquí, quiero decir. Normalmente soy yo solo, porque Monserrat y Clayton se graduaron el año pasado. Te acostumbraras a esto, a las miradas, solo mantén la cabeza a agachada y no digas nada.

- ¿Qué no diga nada? - La expresión de Liam hizo que Niall se riera y le diera una palmada en la espalda, y el simple hecho de tocarle así, pareció ponerle nervioso. Liam, iba a decirle que no estuviera tan tenso, cuando Niall sacó un papel doblado.

- Tenemos algunas clases juntos, pero estás solo en Ciencias y en Arte, en la última sala. Niall le dio a Liam un horario impreso. - Todos tus libros están en tu bolsa, y también cuadernos, lapiceros y bolígrafos. ¿Quieres compartir taquilla conmigo, o vamos a secretaría para que te asignen una?

Viendo que Niall se esforzaba tanto por hacerle más fáciles las cosas, Liam se sintió como un asno por haber sido tan brusco con él el día anterior. Tratar mal a Niall era como una toxina para el alma. Escondió su pensamiento fijando su atención en el horario, viendo la disposición de las clases, y que el colegio por lo visto tenía tres plantas. - La compartiré contigo. Gracias. Por... ya sabes, por todo.

- De nada. Somos hermanos, ¿Qué otra cosa podría hacer? - Niall sonrió, mostrando un rastro de esperanza.

- Claro. - Liam podía ceder un poco si eso hacía feliz a Niall. - Está bien, parece que luego tenemos literatura juntos. Te veré otra vez aquí después de que haiga terminado con ciencias.

- Haya. Se dice haya terminado.

- Chúpamela.

- ¡Liam!- Niall todavía seguía riendo cuando se separaron para ir cada uno a su clase.

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Hola hola... Pues me volvio tocar actualizar porque dani a estado un poco ocupado ... Pero aqui estoy para seguir con esta genial historia.

Espero poder leer sus lindos comentarios acerca de su opinion de la historia.

Lots of love xoxo Jessie