𝖳𝗁𝖾 𝖯𝖾𝗇𝗍𝗁𝗈𝗎𝗌𝖾: 𝖶𝖺𝗋 𝗂𝗇 𝖫𝗂𝖿𝖾 - 𝗚𝗢𝗗𝗗𝗘𝗦𝗦 𝗟𝗘𝗩𝗘𝗟 ✔︎

Episodio 25

No quiero volver a verte

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Desperté a el otro día con algo de dolor de cabeza, miro hacía mi lado derecho encontraba con el rostro dormido de Angel. Literalmente, parece un ángel, se veía tan pacifica allí dormida, quería protegerla para toda la vida.

Me ha gustado desde que éramos muy pequeños y en estos cortos meses que hemos estado juntos puedo decir con sinceridad que la amo, es la mujer de mi vida, ella es quien me hace feliz, quien me enseña cosas nuevas, es la mujer con la cual quiero casarme y tener hijos, pero parece que mi fantasía esta siendo interrumpida.

Se que ha mi madre no le agradaba Angel en lo absoluto, realmente a ella no le agradaba nadie, pero era un caso diferente con Angel. Ella había defendido a Min Seol Ah y también había ayudado a Rona, no solo eso le molestaba, a pesar de que el canto no fuera su pasión principal
Angel tenía una poderosa voz y se que eso provocaba nervios en mi hermana.

Además, ella quería controlarme, quería tratarme como a un perro como lo hacía con papá. Al principio no me deje pero cuando me amenazo con dañar a Angel no tuve otra opción, ella era mi punto débil y jamás dejaría que nadie la dañara, incluso prefería morir antes de que yo pudiera hacerle daño.

Extiendo mi mano derecha y acaricio su suave rostro, su piel siempre ha sido muy suave. Mi mano se dirige a su cabello, este es negro, sedoso y es un ondulado, hacía una gran contraste con sus ojos azules. Mis manos toman las de ella y la acerco a mi para poder darle un beso, un ultimo beso antes de irme.

Me levanto de la cama lo más rápido que puedo para que no se despierte, entro en la ducha y me baño para después empezar a alistar mi maleta. No quiero dejarla, mi corazón se partirá en pedacitos, pero prefiero eso a verla sufriendo o tal vez... muerta.

Angel abre los ojos al no sentir el cuerpo de Suho allí, pasa las manos por su rostro buscando algún indicio del chico, pero nada. Con algo de miedo se levanta de la cama y sale de la habitación, solo para encontrar a Suho en sentado en el sofa y viendo el teléfono.

Una sonrisa se forma en su rostro al verlo, tomo asiento en el mueble y estiro sus brazos para poder abrazarlo, pero este se alejo. La chica quedo extrañada por su acción.

— ¿Por que hiciste eso? Tu nunca lo haces. – pregunta observando el rostro de este.

— No quiero que me sigas abrazando, ni tocando, ni besándo — dice el chico parándose del mueble — estamos terminando.

La peli negra no podía creer lo que estaba escuchando, ¿por que? ¿Por que tan de repente?

— ¿Por que... estas terminando conmigo? – preguntó ella aferrándose a su camisa — ¿que hice mal?

Suho no quería, no quería decir nada, quería decirle que todo era una broma y que jamás terminarían, pero ya le había prometido algo a su madre y tenía que cumplirlo. No quería mirar a Angel porque sabía que se delataría, así que miro hacía el balcón de la casa.

— Todo — dice el — no quiero estar mas junto a ti, no te amo. No quiero volver a verte, estoy harto de tu presencia, ¿entiendes?

Suho sintió como su corazón en mil pedazos cuando volteo sus ojos hacía la chica, esta tenía una mirada de decepción y tristeza, sus bellos ojos azules estaban llenos de lagrimas mientras las manos de ella que se aferraba a su camisa, lo sueltan.

Sin importarle que este siga allí cubre su rostro con las manos y empieza a llorar desconsoladamente, Suho también derramo algunas lagrimas. Angel intenta calmarse aunque es casi imposible, otra vez se aferra a el,  envolviendo sus brazos al rededor de de su torso.

— L-lo siento, lamento no ser lo que tu esperabas — dijo ella — por favor Suho, dame otra explicación.

— No hay más explicaciones — responde el, quitando sus brazos bruscamente — la decisión esta tomada, Adios.

Antes de que este puede cruzar la puerta Angel se interpone en su camino, la chica lo abraza fuerte mientras enreda las piernas al rededor de su torso.

— ¿Que haces? Angel déjame, te estoy diciendo que estamos terminando – dice bajando las piernas de esta y alejando sus brazos.

— P-por favor no Suho, no me termines ahora, sabes que eres el único apoyo en este momento. Si hice algo mal dímelo y lo resolveré, pero no me dejes, por favor.

Suho no quería ser débil, no quería ante las lagrimas que caían de los ojos de Angel. Pero tenia que seguir, debía protegerla de lo que sea que su madre estaba planeando hacerle.

— No, estoy cansado de ti. Además, ¿como crees que me veo siendo novio de la hija de una asesina? Termínanos.

Salió de esa casa sin decir nada más, Angel se recostó en el suelo a llorar mientras Suho lo hacía en el elevador. Eran dos jóvenes que se vieron obligados a interrumpir su amor.