¿Destino? (MyungYeol)

Capítulo 2.

Pov SungYeol.

Era impresionante lo pequeño que llega ser el mundo; mi primera clase del día martes y tenía que estar con aquel tipo que se creía defensor de la humanidad. Rodé mis ojos hacia fuera,  mi pupitre estaba justo pegado a lado de las ventanas así que ignoré totalmente su existencia así como supongo que él no notó mi presencia.  Sin embargo,  cuando creí que todo iría mejor resultó que tendría que estar en el mismo equipo que él en la clase de deporte 《Genial》 pensé. 

ㅡ ¿MyungSoo? ㅡ Escuché del tercer integrante en mi equipo.  Mientras me iba acercando escuché su nombre;  era un poco gracioso el notar que su aspecto se parecía al mío.

ㅡEquipo número cinco,  por cierto ¿Quién hará la hoja?  Debe ser a computadora y yo no tengo tiempo ㅡ Me adelanté a argumentar,  en realidad no tenía impresora,  ni siquiera tenía algún computador,  aparte de que no mentía sobre el escaso tiempo.  En cuanto escuché a YiFan ofrecerse dí mi nombre y solo me retiré de ahí,  en verdad no sabía por qué me molestaba ver a ese chico de la mañana. Mis clases restantes pasaron con rapidez,  y yo solo pedía que durarán más.

Mientras iba de regreso a la casa lancé un suspiró con pesadez,  incluso mordisqueaba mi labio inferior el cuál se encontraba herido por culpa de mi padrastro.  Debía sí o sí sacar a mamá de ese lugar llamado "hogar". Pero antes de todo ello debía encontrar un trabajo que me ofreciera lo suficiente para solventar los gastos de mamá y míos,  por lo menos los de ella. 

ㅡ ¿Aún no te decides? 

Bufé con cinismo al escuchar tan conocida  voz,  ni siquiera me molesté en voltear.

ㅡ ¿No entiendes, marica? Solo aléjate de mí. ㅡ Hablé sin titubear, y sin parar el paso. 

ㅡ Es una gran oferta. Tú sales conmigo,  y tu madre conserva el empleo.

ㅡ Tks ¿ crees que soy una ramera?  ㅡ me volteé con tranquilidad pero mi tono de voz se había elevado.  ㅡ Mi madre no tiene nada que ver en esto.  Solo déjala en paz, si eres un marica pues ve y busca a alguien que te sepa coger, esas cosas no me van. ㅡ Giré sobre mis talones dispuesto a irme mientras metía mis manos dentro de los bolsillos del pantalón, la estación de autobuses no estaba lejos ya,  pero una fuerza me detuvo; sentí que el chico me tomaba del brazo haciéndome girar,  y por un momento sentí que chocaría mi rostro con el suyo 《 Me va a besar》 fue lo primero que pensé así que sin dudar lo aventé con fuerza haciéndolo caer al suelo.  ㅡ Es la última vez que me tocas, bastardo.

ㅡ ¿Bastardo?  Pregúntale a tu querida madre quién es el " Bastardo"

Esta vez no supe a qué se refería,  en verdad me había hecho enojar bastante pero en mi posición no sería bueno que la escuela se enterara sobre alguna pelea mía, así que no dije más. Cuando elevé la mirada hacia el otro lado de la calle noté a un chico que me miraba con la misma rabia que yo tenía hacia SungJong, sin embargo,  no quería más peleas. No tenía el lujo de perder tiempo.  Afirmé mi mochila en mi hombro y caminé hacia la parada de autobuses.

Mi día en sí iba empezando. Cuando creía que podría llegar a descansar a casa,  todo era lo contrario; JiHee se encontraba en casa,  renegando de todo como siempre.

ㅡ ¿Mamá aún no llega? 

ㅡ Esa zorra no se ha aparecido desde la mañana.  ㅡ Mis puños se apretaron, me daba rabia tener que contenerme sólo porque no quería que ese estúpido trajera problemas,  más. 

Lo pasé de largo,  el hombre bebía nuevamente así que lo mejor era alejarme. Lancé mi mochila hacia la cama una vez que ingresé a mi habitación ¿cuándo sería el día que podríamos largarnos de aquí?  Desde pequeño me había hecho a la idea de que no volvería a llorar, que debía ser fuerte por mi madre,  y que cuando fuera adulto la sacaría de aquí.  Pero ahora, a mis diecisiete años, todo parecía haber sido un sueño de un niño de diez años. Tragué saliva sintiendo el típico nudo en mi garganta,  pero no me dejaría caer.  Saqué el periódico de mi mochila y comencé a marcar los trabajos más cercanos.  Lo bueno de llevar cuatro materias por día era que tenía casi toda la tarde libre.