Harry Potter : Another Chance (HP:Otra Oportunidad) - 2

Capítulo 277

"¿Se trata de lo que le pasó a tu hermano original? Lo siento, pero . . . ".

"¡No, claro que no!" Lo interrumpió Lyra.

"¿Por qué me debería importar ese mocoso desagradecido? Trató de matarme".

"Oh . . ." Harry no había previsto que a ella le importara tan poco eso.

"Entonces, ¿Qué pregunta tenías?".

"Para ser justos, tengo mil preguntas . . . pero . . . ¿Recuerdas aquel día, en el sótano, cuando mis amigos y yo nos colamos . . .?".

"Sí, lo recuerdo. Eso fue muy imprudente, uno de mis golems casi te mata", dijo Harry.

"Jeje, sí, ese día . . . ". Lyra parecía un poco avergonzada.

"Ese día te pregunté si realmente eras mi hermano . . . ".

"Y te dije que nunca dudaras de eso", añadió Harry.

"¿De verdad lo dijiste en serio o fue algo que dijiste . . .?"

"Por supuesto que lo decía en serio, Lyra. No soy el tipo de persona a la que le gusta manipular a los demás con mentiras, ya deberías saberlo". Harry bajó la mirada para mirarla a los ojos.

"Quizás provenga de una realidad diferente, pero sigo siendo Harry Potter, el hijo de Lily y James Potter. Y mientras me consideres tu hermano . . . eso es lo que seré".

Lyra saltó hacia él y le dio un fuerte abrazo.

"Tienes mil preguntas, ¿Eh? Bueno, si hay algo más que quieras preguntar mientras estamos aquí . . ."

" . . . ". Lyra negó con la cabeza. "Creo que . . . preferiría no preguntar . . . ". Quería preguntar sobre lo que les había pasado a sus padres y a las otras versiones de ella y Holly. Pero Harry nunca mencionó a ninguno de ellos, y ella tenía una buena idea de por qué.

"Volvamos entonces". Sintiendo que ya había visto suficiente, Harry la sacó de su mente.

Un minuto después, Lyra abrió los ojos.

"¿Cómo estuvo?" Preguntó Harry.

"Me siento un poco mareada . . . ". Respondió Lyra mientras sostenía su cabeza.

"Es un efecto secundario normal, pero no es eso lo que quise decir".

Lyra levantó la mirada para mirarlo directamente.

"Has aprendido lo que querías saber sobre mí, ¿Verdad?" Preguntó Harry.

"Supongo, quiero decir . . . eso explica muchas cosas. ¡No me extraña que puedas hacer todas esas cosas con tu magia!" Exclamó Lyra.

"Pasé por muchas cosas, sí". Asintió Harry.

"¡Y tú eres súper viejo!" Añadió Lyra.

"¿Perdón? . . . ". Harry levantó una ceja.

. . . . . . .

"Sólo quería agradecerte una vez más, Lily".

"Molly, ya te dije que eso no es necesario . . . James solo le dio una recomendación, nada más". Lily se sintió un poco abrumada. Molly Weasley ya le había agradecido una docena de veces y había enviado una gran cantidad de pasteles a su casa.

Tras enterarse de que Arthur había perdido su trabajo en el Ministerio, James habló con Lord Greengrass, y éste aceptó darle al hombre un buen puesto en uno de sus negocios en Francia.

Este nuevo trabajo le quitaba más tiempo libre ya que tenía que viajar a otro país, por lo que no podía estar en casa tanto como hubiera querido, pero además pagaba tres veces más que su trabajo anterior, por lo que la familia ahora estaba mucho más tranquila en cuanto al dinero.

"¡Y yo insisto! Hubiéramos estado en un gran problema sin tu ayuda. Traje otro pastel, uno de chocolate esta vez". Sacó una pequeña caja de madera de su bolso y esta aumentó varias veces su tamaño antes de que Molly finalmente la colocara sobre la mesa de la cocina y la abriera, revelando un pastel que se veía delicioso.

"¡Pastel!" Holly se emocionó y fue a buscar algunos platos.

Lily miró preocupada a su hija menor. Si las cosas seguían así, iba a engordar muchísimo.

"¿Está Lyra aquí?" Preguntó Ginny mientras estaba de pie junto a la mesa.

"Ella está en el patio trasero, creo que está con Harry", dijo Lily.

Ginny salió apresuradamente de la cocina. Era la primera vez que podía visitar la casa de los Potter desde el comienzo del verano, y ya había pasado un mes desde que terminaron las clases.

Abrió la puerta del gran jardín trasero y fue recibida por una agradable brisa.

Sus ojos recorrieron todo el verdor y encontraron a alguien sentado en el banco que estaba colocado debajo del manzano, cerca del centro del jardín.

A medida que se acercaba, Ginny se dio cuenta de que la persona en cuestión no era Lyra, sino Harry.

Estaba leyendo un libro mientras también escribía algo en un cuaderno.

Se quedó allí unos segundos, sin saber qué decir. Ginny se sintió un poco incómoda por interrumpirlo cuando parecía tan concentrado.

Pero entonces, Harry se giró para mirarla y la saludó con una sonrisa amable. "Ha pasado un tiempo. ¿Cómo has estado?"

Ginny devolvió el saludo con su mejor sonrisa.

"¿Estabas buscando a mi hermana? Creo que se estaba bañando, pero debería terminar pronto, teníamos una práctica programada".

"¿Prácticas? ¿Te refieres a las que hacíamos durante el año escolar?" Vio a Harry asentir brevemente.

"¿Te importa si me uno?"

"De ningún modo, por favor". Le ofreció un poco de espacio para sentarse y ella aceptó con gusto. "¿Qué le parece a tu padre su nuevo trabajo?"

"Bueno . . . creo que le gustaría pasar más tiempo cerca de casa, pero le gusta trabajar en esa tienda. Dice que hay varios hijos de muggles que saben muchas cosas interesantes. Quiero decir . . . interesantes para él".

Harry recordó la obsesión del hombre con cualquier cosa hecha por muggles, incluidos los patitos de goma.

"El mes que viene pasaremos algún tiempo en Francia . . ."

Harry notó que ella parecía molesta por algo.

"¿No estás esperando eso con ansias?"

"¡Oh, no es eso! Es solo que . . . ¡La final de la Copa de Quidditch es el 25 de agosto! Irlanda va a jugar contra Bulgaria, ¡y me lo voy a perder!" Exclamó Ginny.

"¿La Copa de Quidditch?" Eso le trajo algunos recuerdos a Harry. En su vida pasada, fue a ver el partido del que hablaba Ginny.

"Habrá mucha gente importante viendo ese partido . . ." Ahora tenía un mal presentimiento.