Mírame

Capítulo 19

La cena se hace mas larga de lo que puedo soportar, ver a Stephen masticar cada bocado me pone de los nervios, ¿ es que no puede dejar de ser guapo ni comiendo?. Suspiro y me termino mi cena, llevo el plato hasta el fregadero y le echo agua, Stephen me sigue con cada movimiento que hago y eso hace que me ponga aun mas cardíaca.

- Iré arriba a cambiarme.- Él solo asiente mirándome mientras termina su cena. Subo las escaleras despacio, cuando llego al pasillo recuerdo cuando estuve aquí la vez que me emborrache, sonrío y voy hasta la habitación frente a la de Stephen donde supongo que estarán todas mis cosas, entro pero no veo nada, voy a la de al lado y tampoco, suspiro apoyada contra el marco de la puerta.

- ¿ Qué buscas?.- Me sobresalto al escuchar la voz de Stephen, me toco el pecho asustada y me doy la vuelta para mirarlo.

- Mis cosas.- Él me mira a los ojos con su típica cara de seriedad.

- Están en mi habitación.- Lo miro frunciendo el ceño pero no me da tiempo a responder cuando me coge en brazos y me lleva hasta allí, cierra la puerta de un punta pie y me deja sentada en la cama, va hasta su vestidor y lo abre, allí veo todas mis cosas ya colocadas al lado de las suyas. Él me mira buscando me aprobación pero yo no soy capaz de articular ninguna.- Puedes darte un baño y luego acostarte.- Lo miro sin poder creer lo que dice.

- ¿ Por qué están todas mis cosas aquí?.- Stephen se acerca y se agacha frente a mi.

- Quiero que duermas conmigo, quiero protegerte incluso cuando no te haga falta.- Lo miro a los ojos y él me acaricia el ovalo de la cara. Después de unos minutos asiento, tengo muchas ganas de quedarme con él y pensarlo no es una opción. Stephen me sonríe abiertamente y yo me levanto para buscar mi ropa y darme una ducha, él sigue mis movimientos otra vez y yo me vuelvo a poner nerviosa, después de buscar entre mis pijamas decido que prefiero una camiseta de Stephen, agarro una azul y blanca y me voy al baño con la ropa.

Me ducho con agua caliente y disfruto de poder hacerlo yo sola, me visto con la camiseta de Stephen y me pongo mis bragas y mi pantalón de Bob Esponja, me peino con los dedos y salgo del baño. Miro a Stephen que sigue en el mismo lugar en la cama pero esta vez acostado boca arriba. Carraspeo para llamar su atención y él se levanta como un resorte para mirarme, me mira con sorpresa y noto como los músculos de su cuerpo de tensan, quizás no le ha gustado que me pusiera su ropa.

- Me puedo cambiar y ponerme una mía si quieres.- Él me mira aun sorprendido y niega con la cabeza mientras se acerca a mi.

- Estas preciosa y me encanta como te queda mi camiseta.- Coloca sus manos en mi cintura y yo tengo que doblar el cuello para mirarlo a la cara.- Es solo que no se si podré aguantar tenerte en mi cama vestida así Victoria.- Me sonrojo y él me sonríe de lado.

Stephen me hace caminar hasta la cama de espaldas, cuando siento la cama en la parte posterior de mis piernas me acuesto con Stephen encima, él se apoya en los codos para no lastimarme pero estoy segura que si ahora mismo me hiciera daño no sería capaz de mover ni un musculo. Stephen me besa como si su vida fuera en ello y yo lo recibo gustosa, mi cuerpo comienza a responder a sus caricias y él lo sabe, noto su bulto en la interior de mis muslos y se me corta la respiración, el beso de Stephen aumenta su fuerza y yo me acoplo a él y gimo sin poder evitarlo, Stephen se separa rápidamente de mi y yo siento el frío que me deja la falta de su cuerpo.

- No Victoria, hoy no.- Nos miramos y él se revuelve el pelo.- Te podría hacer daño.- Asiento y él va al baño.

Me quedo tirada en la cama suspirando para encontrar el aire que me falta, me roso los labios y sonrío como una tonta. Stephen me esta enseñando cosas que no sabía que podía sentir y creo que eso me encanta.

Espero hasta que Stephen salga del baño pero no dejo de escuchar el agua caer, suspiro y me recuesto en el lado derecho de la cama y el sueño me va ganando poco a poco.

Paso la noche soñando con las caricias de Stephen, me despierto poco a poco cuando siento un calor infernal, intento separarme de esa fuente de calor pero entre mas lo intento mas se acerca. Abro los ojos fastidiada y me sorprendo al ver a Stephen abrazándome. Sonrío divertida y me intento separar, me sorprendo al ver que cada vez que me intento separar me abraza mas fuerte.

- Deja de removerte Victoria, intento dormir.- Su voz suena ronca y yo me sorprendo que este despierto.

- Me das mucho calor Stephen, he soñado que una tostadora me engullía por tu culpa.- Él abro un ojo y me sonríe divertido.- Necesito ir al baño Stephen, suéltame.- Stephen suspira fastidiado pero me hace caso, me levanto y casi corro al baño.

- No corras o te lastimarás Victoria.

- ¡ Vale abuelo!.- Escucho su risa desde el baño. Vacío mi vejiga y después de asearme salgo del baño recogiéndome el pelo en un moño alto. Stephen que esta apoyado en su costado me mira desde la cama.

- Estas preciosa.- Sonrío y le saco la lengua, él me la saca a mi y comenzamos una pelea de regañizas.

Después de estar diez minutos haciendo cualquier tipo de cara paramos cuando Stephen corre hacia mi y me coge en brazos para llevarme a desayunar. Stephen baja las escaleras mientras yo le toco los pirsing.

- Quédate quieta Victoria, me haces cosquillas.- Me deja en la isla de la cocina y yo me cruzo de brazos cuando suena el timbre, Stephen me hace una señal para que me quede quieta y va a abrir. Mientras camina miro los músculos de su espalda. Cada día que pasa estoy mas segura que este hombre es perfecto.