capítulo 2

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-joder William, apurate!!!!!-chille.
-tranquila, acaso no sabes que la paciencia es una virtud.
-pero yo no quiero tu paciencia en este momento, sólo quiero llegar antes de que me pongan un parte por llegar tarde en mi primer día.
-ahs, no se por que te desesperas, en primer lugar si te hubieses levantado mas temprano esto no estaría pasando.

El tenía razón, siempre lo hacia, pero yo era demasiado orgullosa como para admitirlo, haci que sólo le dije.
- pero si es tu culpa-bufe- además yo no fui el que chillo como una nena cuando mojaron mi ropa, ni mucho menos me demoró media hora buscando que prenda  ponerme- había ganado, lo sabía y lo confirme cuando el se quedo callado, sin decir nada con lo que pudiese criticarme.
-dios mío!!!, hasta un abuelo te ganaría conduciendo- ups, realmente no hubiese querido decir eso, pero ya estaba hecho- will yo..- grave error, ya que de un momento a otro explotó.
-si tanto te arto, por que no conduces tu!!!.
-pues por tres ra...-me callé ya que practicamente me estaba asesinando con la mirada, mire al parabrisas ya ibamos a llegar sólo faltaba una cuadra, pero el no  parecia notarlo, me aterraba que su enojo no cesará y que ya no volviera a hablarme, no podía mas bien no quería perderlo, era mi único amigo y quería que siguiera siendo así por muchos años más, quería aliviar su enojo y también la tensión, asi que hice lo primero que se me ocurrió, llena de valentía agarré el volante y lo giré, rápidamente el tomo el control del auto y luego de unos metros más aparcó en el estacionamiento de la universidad ya que milagrosamente habíamos llegado, aunque eso ya no me importaba.

- pero que demonios Elizabeth!!!- doble ups, al parecer lo enoje más, corrección, el estaba furioso.
-mm y...yo pues-aclare mi garganta y hice lo que mejor sabía hacer, puse mi cara de póker- tu dijistes que si quería podía conducir.
-suspiró -sólo era un decir, Eli, casi atropellamos a alguien, no se si lo sabes.
-créeme soy conciente de lo que pudo pasar, pero al final nadie salió herido-levanté un hombro restandole importancia, el agrando los ojos y yo salí lo mas rápido que pude del auto, no quería más peleas por hoy.
-Elizabeth!!! Aún no hemos terminado de hablar.
-yo no habló con mundanos- le respondí mientras me alejaba de él, no pasó mucho cuando se colocó a mi lado, estaba sonriendo, siempre era lo mismo, peleabamos y luego nos estabamos riendo como unos desquiciados.
-si, como no, lo dice la señorita.  "soy una nephilim, y amo a Jesi"-chillo haciendo una muy mala interpretación de mi voz.
-es Jace, anormal- le corregí, mientras le pegaba un zape, no era alta pero mi 1.70 m era suficiente como para llegarle al cuello.
-sabía que me engañabas- dramatizo, parecía una nena por lo que decidí jugar un poco con él, así que lo jale del cuello mientras pasaba mis manos por su cabello y acercaba peligrosamente sus labios a los míos.
-tranquilo bebé, tu eres y serás el primer y el ultimo amor de mi vida- lo escuché tragar ruidosamente y por primera vez en mis dos años de amistad con el, lo vi sonrojarse, me iva a reír cuando lo atrape viendo mis labios y casi me desmayo, sabía que el ambiente había cambiado y antes de que se diera cuenta de mi sonrojo lo solté.
- será mejor que entremos- hablé rápidamente, mientras empezaba a caminar hacia las puertas de la universidad.
- no vuelvas a hacerlo- dijo serio
- que cosa- tenía una breve corazonada, pero quería confirmar.
-no juegues conmigo ni tampoco vuelvas a comportarte de esa manera tan fría frente a los demás.
-will..
-No- me cortó- no nos cambiamos de ciudad por nada, deberías ser un poco más social Eli, además es nuestro primer año en la Universidad, si tan sólo ....
- ya hablamos de esto Will, yo estoy bien así- justo cuando empezaba a ir a la dirección por mi horario, me agarró de la mano y me volteo.
- escuchame, ya me cansé de esto, de que alejes a los demás, crees que me gustaba que las personas hablaran mal de ti, que se burlaran mientras yo los escuchaba, no sabes cuantas veces quise mandar todo a la mierda y golpear a todas las personas que te dañaban, gritarles que se le alejaran de ti- suspiro- decirles que no te criticaran si no te conocían, por que tu Eli- acarició mi mejilla- eres una gran persona y deberías dejar que el mundo se diera cuenta de eso.

Estaba jodida, nunca podía negarle nada, no se como lo lograba pero al final el me convencía, el siempre ganaba, pero el no se daba cuenta del miedo que me daba cambiar,      "de mostrarme al mundo", yo estaba bien, me había acostumbrado a este modo de vida, era feliz así, pero para el no era suficiente, nunca lo era, no entiendía el por que quería cambiar, es que acaso ya no me consideraba digna de ser su amiga.
- por que- lo dije tan bajo pero a la vez lo suficientemente fuerte como para que me escuchara.
- Eli, yo..- lo sabía iva a dejarme, nunca debí de aceptarlo como mi amigo.
- tranquilo, si querías romper nuestra amistad solo debiste decirlo y no fingir preocupacion por mí- lo dije tan fríamente que me asuste, pero ya no importaba y antes de que el pudiese destruir mi corazón un poco más, corrí, corrí mientras me adentraba en los pasillos de mi nueva universidad.

Alguna vez has tenido ese sentimiento que te dice que despues de todo lo malo algo bueno tiene que pasar, pues yo no lo tenía y lo confirme cuando en un intento de alejarme unos cien metros de mi exmejor amigo tropecé y choque contra algo duro, maldito sea el karma y ese muro que se interpuso en mi camino, es que no podía tener un poco de paz.

-acaso no te vas a levantar.
-que?- perdida, esa era la palabra exacta que definía como me encontraba en ese momento.
-te lo repito-suspiró- vas a seguir tirada en el suelo, dejando que todo el mundo te miré como una anormal.
-es que lo soy, no soy un simple mundano- ni siquiera supe por que dije eso, pero ya estaba hecho, fue ahí cuando levante la mirada y sentí que todo el aire se iva de mis pulmones, perfecto, esa palabra lo reducía todo, llámame patética o lo que tu quieras, pero el con su 1.87 m aproximadamente, su cabello negro, ojos grises, gruesas cejas y labios carnosos, era el sueño de toda chica, tan diferente pero a la vez tan parecido a William, tan sólo pensar en el mi corazón se oprimia.
-tierra llamando a chica anormal.
- acaso no piensas ayudarme o vas a seguir ahí tieso como una tabla- dije lo más fría que pude, pareció funcionar ya que todo rastro de diversión desapareció de su cara, tenía que ser fría no iva a dejar que nadie más se aprovechara de mí.
-sabes que, deberías dejar de fantasear, levantarte y seguir adelante ya que nada es lo que parece- dijo serio y se alejo.
-pero que demonios!!!, oye tu vuelve aquí!!!-grité, no me importó que los alumnos volvieran a mirarme, al final sus miradas y comentarios me resbalan, no volteó, por lo que me levanté maldiciendo, su frase no tenía sentido pero estaba segura que muy pronto lo iva a tener.

Uhhh un chico nuevo, se volveran a encontrar estas dos almas llenas de frialdad, comenten.
Foto del chico misterioso en multimedia

Ivi

for the first timeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora