**20** "Confesión a ustedes"

208 19 3
                                    

"J&M:

Esto va a ser muy difícil de explicar en persona pero antes de que ustedes nacieran, tenían una hermana... Nunca la conocieron porque injustamente nos la quitaron de los brazos...

Yo estuve en coma por ocho meses hace trece años y nunca me enteré de que estaba embarazada. El doctor le había dicho a su padre que había perdido a la nena y no sabíamos como asimilarlo después de que yo ya había despertado y también el hecho de si quería regresar con su papá porque teníamos problemas en ese entonces...

Apenas hace una semana, una amiga que conocí en el estudio, que es doctora, le platiqué de nuestro pasado y respondió que eso era imposible. Llegué emocionada con Rubén pero a la vez enojada con el mundo que nos quitaron a nuestra hija. Investigamos con lo que nos había dado el doctor sobre los padres adoptivos y gracias a Dios que ellos seguían viviendo en Madrid.

Los visitamos en una casa enorme, hasta eso eran buena gente con nosotros. Rubén y yo les explicamos todo lo que había pasado y del enorme error que cometieron mis padres al cederles a nuestra hija sin consentimiento, en ese entonces, de Rubius. Se veían confundidos pero creo que nos habían entendido.

No queríamos decirles nada hasta conocer a la nueva familia de su hermana. Era hermosa, su nombre era Marlene y era igual de alta que ustedes con su cabello quebrado rubio y los ojos que heredó de su padre. Era muy feliz, no quisimos decirle la verdad. Esta gente en realidad era muy buena para ella y la han cuidado bien desde su nacimiento pero aún así, nos duele no tenerla a nuestro lado, junto a ustedes.

La conocimos durante tres días, los visitábamos en las mañanas mientras ustedes iban a la escuela hasta que llegó el día menos esperado.

La familia Hamilton nos habían invitado a almorzar pues, íbamos a platicar de como decirles a ustedes que todos eran hermanos. Jackie, la mamá, contestó el teléfono a la mitad de nuestra visita y regresó muy estrenada. Edgar la tratos de calmar y sus únicas palabras fueron:

"Tenemos que ir al hospital" -ya odio con mi vida aquella frase

Rubén y yo no entendíamos que era lo que pasaba pero los acompañamos. Corrimos por los pasillos al ritmo de ellos y la vimos ahí recostada en la cama pero ya.... Dios...

La noticia era impactante para todos. Siempre pienso que un segundo hace la puta diferencia. Su cara era pálida más de lo que ya estaba, su cabello perdió ese hermoso brillo que era de familia, sus labios y mejillas no eran del rosado que la acompañaba. "Lo siento" fue lo que dijo un doctor diferente al que conocíamos..

Joder, ¿acaso Dios nos odia tanto? ¿Qué es lo quieres decirnos? Abracé a Rubius tratando de no echarme a llorar como siempre, tenía que ser fuerte. La muerte de un hijo es algo que uno como padre no debería presenciar... A pesar de que no la conocimos personalmente, no es era doloroso aceptar que ya habíamos perdido a una hija para siempre. Nosotros teníamos la esperanza de juntarnos todos de vez en cuando como familia (eso incluía a los Hamilton) pero Dios se burla de nuestros planes.

Probablemente Marlene cumplió con su misión y tuvo que dejarnos: hacer felices a sus padres que no pudieron tener a un hijo... Ella sin querer dio un paso en un mal segundo y murió de mi peor miedo desde siempre...

Ahora está en un lugar mejor pero nos ha dolido a todos que se haya ido. A nosotros, que nos dejó cuando la encontramos... Nuestra hija perdida...

Las pérdidas son difíciles de superar, sólo el tiempo cicatrizará nuestras heridas...

_________...."

Recuerdos en... ¿Pañales?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora