Jugando con fuego

Capitulo 4: Reencuentro con el pasado

Mientras bajaba por las escaleras, iba escuchando esa voz que me parece tan familiar pero es imposible a pasado muchísimo tiempo debo estar alucinando o aún estoy dormida. Oh my god!!, es él, es él, mi corazón empezó a latir como nunca antes es como si fuera un caballo desbocado, me va a dar un infarto al miocardio, esta más guapo que antes mucho más guapo, se ve impresiónate con esos vaqueros y ese t-shirt ajustado que le marca los abdominales, sin querer mi mirada fue directo hasta su entre pierna mmm se ve muy dotado, sacudí mi cabeza para salir de esos pensamientos, seguí observándolo, vi sus brazos bien formados, mira esa mandíbula, esos labios rojos, esos ojos color miel, tiene una mirada muy penetrante siento que esta leyendo mis pensamientos, salí de mi trance al escuchar la voz de mi hermano Alex haciendo ademán para que me acerque, lo hice entonces me dijo:

-mira quien llego, es Paul.

cuando me dirigía a saludarlo con un abrazo el me empujo.

-Hey no te me acerques niñita se me puede pegar tu bobada o ya no sigues siendo la bobita de siempre?.

-Alex quien es este idiota? Y porque me habla con tanta confianza? Yo solo lo iba a saludar por cortesía.

-Niki pero el es Paul no te acuerdas de el? Mi mejor amigo del hightschool.

-Pero como pretendes que me acuerde si tu tenias a muchos amigos, yo creo que la escuela entera y no estoy exagerando.

Mientras hablaba con mi hermano haciéndome la que no lo conocía vi que no me quitaba la mirada de encima.

-Niki es verdad que ya no te acuerdas del que te decía niñata? El que te molestaba mucho? No puede ser que encima de todo tengas mala memoria.

-Lo siento, como dices que se llama?

-Paul.

-A si Paul, pero no logro recordar es que han pasado muchos años y como te darás cuenta ya crecí y ustedes por igual.

-No te preocupes que yo te haré que recuerdes.

-No creo que tengas la oportunidad, soy una mujer muy ocupada, ahora si me disculpan me voy a desayunar.

Es increíble después de tantos años de tranquilidad llega el y regresa a mi todas esas sensaciones que creo se habían muerto con el tiempo ¿que es lo que me esta pasando?

Creí que nunca más lo volvería a ver y de pronto aquí esta, el destino o no se que jugándome esta jugada tan cruel.

-Discúlpame por ese saludo que te di, lo cierto es que esa fue mi primera reacción, no lo medité.

-Rayos, que susto, eres imbécil o que? Me quieres matar? Como se te ocurre llegar tan silencioso y luego hablarme por la espalda? Definitivamente llegaste hoy y ya no te soporto.

-Eso no era no que pensabas hace unos buenos años atrás, además no seas mal agradecida te estoy pidiendo disculpas o sea yo pidiendo disculpas a una mujer, agradece.

-Pero que es lo que te has creído? Ese ego tan grande que tienes no te deja pensar, pero verdad que no tienes neuronas.

-Así que no tengo neuronas? Y soy el empresario más joven e influyente de los últimos tiempos según la revista Forbes. Si sabes cual es esa revista?

Mis orejas se encendieron como si fueran dos hornos, quise decirle hasta del mal que se iba a morir pero la parte más ecuánime de mi cerebro me dijo que me calmara.

-La verdad no, yo no soy de las mujeres que se pasan el día leyendo revistas para ponerse al día con todos los chismes, a mi no me interesa la vida de los demás y más si son del entorno en que crecí, yo me ocupo única y exclusivamente de mi vida que es la que me interesa lo demás sale sobrando.