Jugando con fuego

Capitulo 16: Paul

Abrí la puerta sin preguntar y ahí estaba el, desaliñado y con barba, la verdad es que no me había fijado de eso. Como me voy a fijar si nunca lo miré?

No se ve muy bien que digamos, pero a mi que me importa eso? Nada verdad?

-Que haces aquí?

-Alex me dijo que te viniera a decir que baje para que juguemos los tres como antes.

-Dile que no.

-Baja ven por favor.

-No yo estoy muy bien aquí. Vete y no vuelvas a subir o bueno si vas a tener que subir porque vas a dormir aquí pero no vengas mas a mi habitación.

-No seas así Niki, ven baja.

-No.

-Sabes algo me has hecho tanta falta.

-No seas mentiroso, a ti no te hace falta nadie, porque cada noche duermes con una diferente.

-No hables de lo que no sabes.

-Que mas tengo que saber? Jajajaja creo que la ultima vez me enteré de mas cosas de las que pensé.

-Niki por favor, no me trates así como si yo no fuera nada.

-Es que no eres nada.

-Me estas matando, algún día entenderás y te darás cuenta de que yo no mentí. Ya veras.

-Ahora te haces la víctima esto es lo ultimo y sabes que vete no quiero verte ni hablar contigo. Mi hermano debe de estar esperándote.

-Ok como quieras. Y perdóname por molestarte.

Le cerré la puerta en la cara, si seguía viéndolo así me iba a rendir a sus pies y eso nunca, es que ustedes tenían que verlo, con cara triste y hasta demacrado nunca lo había visto así, será que peleó con su prometida? Y a fin de cuentas que me importa? Dios ese hombre te mueve el mundo y verlo así me parte en dos, se le ve muy triste de verdad que si o seré yo que lo veo así? Ay Dios que complicado.

Estoy intrigada porque el como que quiere decirme algo pero yo no lo dejo, que te va a decir Nicolle? mas mentiras así que no caigas, sigue así. Ley de hielo.

Aunque que ustedes piensan, Debería de escuchar lo que dice o no? No, no y no.

Voy a bajar a la cocina por un té de tilo a ver si me duermo, porque así no puedo seguir, ya pasan de las 12 am y yo sin nada de sueño, el cuerpo necesita descansar.

Ya en la cocina preparo la tetera y mientras espero que el té se haga decido dar una vuelta por la sala de juegos, si, si ya se que me gusta torturarme pero que le voy hacer.

Me asomo despacio para que no se den cuenta que estoy fisgoneando y ahí los veo, como aquellos niños de hace algún tiempo pegados al juego ese, recuerdo cuando Alex y yo jugábamos a mi nunca me gustó eso pero lo hacia para compartir con mi hermano y luego cuando nos mudamos aquí era lo único que hacíamos porque el siempre andaba para todos lados con Paul y ya se creía hombre y por eso no jugábamos como antes.

Si me divertía mucho y mas cuando yo le ganaba no se porque pero era o soy buena en eso aunque sigue sin gustarme no le encuentro el sentido pero eso es parte de tener hermano y no hermana.

Y de repente zas nuestras  miradas se cruzan, oh cielos ahí esta con esos ojos hermosos pero tristes y algo sorprendidos también, mierda ahí esta otra vez, siento que lee mis pensamientos es que este hombre todavía me adivina o al menos eso siento, viéndolo así no puedo pensar en nada mas que no sea su cuerpo y mi cuerpo entrando en calor y devorándose como solo ellos saben.