¿Tu? No eres un chico #1

Prólogo

-¡Por fin!- Dije dando un gran salto mientras me abalanzaba sobre Paulet.- Las vacaciones por fin llegaron- Canto mientras me muevo como loca, el día más esperado ha llegado, el día por el que vale la pena sufrir cada una de esas mañanas en clase de Pre-calculo.

-¡Verano! Vacaciones- Canta Paulet junto a mi, todos alrededor nos miran raro ¿Soy un alíen y no lo sé?. Caminamos y cantamos cualquier cosa que nos viene a la cabeza, tenemos un gran repertorio.

-Let it go, Let it go- Volteó a mirar a Paulet y veo una lágrima. Recordé el día que vimos Frozen en el cine y empezó a llorar como vil magdalena. Caminabamos a casa cantando hasta que una viejita se para y nos mira raro.

-Niñas, las drogas son malas- Dice mientras niega y sigue caminando. Paulet y yo nos volteamos a ver una a la otra y cuando vimos que la anciana estaba lo suficientemente lejos para no escucharnos nos empezamos a reír como las dos focas retrasadas que somos.

-Nosotras no parecemos drogadas- Digo a la defensiva para después reírme como foca retrasada al igual que Paulet pero de un segundo a otro dejamos de reír y nos volteamos a ver seriamente.

-¿Estas drogada?- Decimos al unísono para después volver a reír y seguir caminando hasta llegar a la puerta de mi casa, volteó a ver a Paulet que está llorando y se abalanza sobre mí para abrazarme.

-No llores, Beyotch- Digo devolviéndole el abrazo- Nos volveremos a ver después de vacaciones- Digo con una sonrisa tierna.

-Sí, lo sé- Dice sollozando- Si necesitas cualquier cosa llámame, te voy a extrañar, Zorra- Dice volviendo a abrazarme.

-Yo igual, Beyotch- Digo alejándome de ella.

-Adiós- Dice mientras se aleja- ¡Come mucha nutella!- Grita mientras camina. Entro a mi casa y como auto reflejo tomo una almohada, si es que mis instintos estan funcionando correctamente y mi hermano esta aquí es posible que...

-Te atrape- Dice Lucas mientras siento que algo frío recorre mi cuerpo.

-¡¿Qué diablos te pasa Lucas?!- Grito mientras me abrazo a mí misma ¡El agua tenia hielo!

-¿No has visto el reto que está en internet?- Pregunta con una sonrisa inocente.

-¡Es un reto, idiota, se supone es opcional y lo tengo que hacer yo!- Grito mirándolo fijamente- ¡Me vengare, y te vas ha arrepentir!- Amenazo mientras camino hacia mi cuarto.

-¡No!- Escucho que grita mi hermano, tomo una ducha y después me pongo mis converses, una camisa floja, un pantalón y mi gorra negra deteniendo todo mi cabello, pocos minutos después Lucas entra a mi cuarto.

-¿Pensaste lo que te dije, Mad?- Pregunta Lucas mientras me ve con extraña seriedad.

-Si- Digo con una mueca mientras me siento en la cama y hago una seña para que se siente a mi lado.

-¿Y bien?- Dice sentándose del otro lado de la cama.

-Creo... Que lo mejor es que me vaya a vivir contigo, mi madre ya tiene muchos problemas- Digo con una mueca- Y sabes que nuestro progenitor no me dará el dinero para que viva con ella- Digo mientras me tiro completamente sobre la cama.

Mi padre es un empresario con mucho dinero que al saber que mi madre quedo embarazada se largó, pero regreso cuando Lucas tenía un año y se acostó con mi madre lo que provoco que naciera yo, desde entonces manda una cantidad de dinero bastante grande para Lucas y para mí, pero cuando mi hermano cumplió quince años el empezó a manejar el dinero ya que mi madre tenía problemas con la bebida y nuestro progenitor dejo claro que no daría dinero para que mi madre se quedara toda su vida en la cantina así que le compro un departamento a Lucas y se supone tenía que irme a vivir con él, pero me negué y me quede con mi madre, mi progenitor dijo que si me quedaba con mi madre no recibiría ni un peso hasta que me mudara y lo cumplió.

-Sabes cuales fueron las condiciones que dio Xavier- Dice Lucas con una mueca mientras me abraza- No te arrepentirás - Continua mientras me sonríe tiernamente.

-Bien ¿y cuando me puedo ir?- Pregunto devolviéndole la sonrisa que parecía más una mueca.

-Hoy mismo- Contesta el, a lo que yo abro los ojos exageradamente.

-Pero no tendré tiempo de arreglar nada- contesto.

-Nos iremos en la noche, ten todo preparado- Dice ignorandome mientras sale de mi cuarto y me guiña un ojo ¡Maldito!. Empiezo a tomar todas mis prendas y cuando tengo todas mis maletas empacadas, llega mi madre con una botella en la mano ¡Diablos! Volvió a tomar solo spero y Lucas no se haya ido aún.

-Hola, amor- Dice mi madre acercándose a mí mientras un olor nausabundo alcohol inunda la habitación.- ¿Qué son esas maletas?- Pregunta mi madre con el ceño fruncido mientras apunta mi equipaje.

-Me iré a vivir con Lucas - Digo con una mueca de asco gracias al olor del alcohol.

-¿Con el permiso de quién?- Grita mi madre mientras se desequilibra un poco y yo rápidamente la alcanzo para ayudarla a pararse.

-Con la autorización de mi progenitor- Digo con una mueca mientras la siento en la cama, mi madre perdió nuestra custodia cuando la encontraron ahogada en alcohol y a consecuencia se la dieron a mi progenitor, él no está muy interesado en criarnos pero nos mantiene, nos dio su apellido y no das total libertad, yo sigo siendo menor de edad, tengo diecisiete por lo cual mi progenitor sigue teniendo mi custodia, mi hermano tiene dieciocho lo que lo hace mayor de edad e independiente.

-¿Tú también me vas a dejar, verdad?- Pregunta mi madre llorando mientras agacha la cabeza, mi madre puede ser un alcohólica pero no es mala, siempre intento darnos lo mejor.

-No, vendré seguido- Digo mientras le quito botella de tequila de la mano.

-¡Estaré sola!- Grita mientras me mira con odio- ¡Eres igual a el!- Dice apuntando a mi hermano que acababa de entrar al cuarto. Mi madre y mi hermano no tienen la mejor relación, mi hermano siempre quiso que mi madre entrara a rehabilitación pero ella se negaba y como él era menor de edad no podía hacer nada, pero lo que acabo con su relación fue cuando mi madre llegó tan borracha que por impulso dio una cachetada a mi hermano y le dijo que era igual a su padre, al día siguiente mi hermano se había ido a su nuevo departamento.

-Déjate de dramatismos, Elena - Dice Lucas mientras toma mis maletas y se marcha por la puerta por donde entro hace unos segundos. Volteo a ver a mi madre que yace llorando en el suelo.

-No quiero que me dejes- Dice mi madre con la voz quebrada.

-Mamá tienes demasiados gastos ya no puedes cuidar de mí y lo entiendo, vendré seguido lo prometo ¿Está bien?- Digo viéndola tiernamente, ella asiente y de un momento a otro se queda dormida. Salgo de mi casa para dirigirme a mi nuevo hogar con mi hermano. ¿Qué tan malo puede ser?