Capítulo 13: Está roto.
Suigetsu tropezó y cayó al suelo. Naruto y Sasuke comenzaron a burlarse ruidosamente de él, sus mejillas se coloraron y se levantó con la poca dignidad que le quedaba.
— Eres un idiota.— comentó Naruto despreocupadamente, antes de revólver con cariño el cabello blanco de su amigo. Continuaron caminado entre risas y bromas, y hubieran seguido así.
—¡Naruto! — chillo una voz femenina claramente emocionada. Los tres chicos voltearon a ver de quien era aquella voz. Todos con sentimientos diferentes; Naruto confundido, Suigetsu neutral y Sasuke nervioso. Un escalofrío le recorrió la espalda. El conocía esa voz. Al igual que Naruto.
— Sakura, hola. — comentó el rubio mientras admiraba la extraordinaria tensión que se formaba. No tenía idea de que estaba pasando.
— Sasuke . . . — escupió el nombre como si el sólo decirlo la pudiera matar. Su mirada lanzaba cuchillos a Sasuke. El estaba realmente pálido- más de lo normal- y parecía que su mundo acababa de chocar contra el suelo, y del impacto se rompió.
— ¿Se conocen? — al ver que no había respuesta de Sasuke, el decidió hablar. Suigetsu también se rehusaba a decir palabra alguna.
— No sabía que te juntarás con este tipo de persona, Naruto. — enarco su ceja con un aire de superioridad que irritó a todos.
— ¿Qué pasa aquí? — cuestionó de una vez por todas, harto de las infantiles actitudes de todos.
— Naruto, ella es Sakura. — y sin necesidad de que dijera más, lo entendió todo. Ella era la chica de la que tanto hablaba Sasu. Ella le rompió el corazón. Y a pesar de no saber la situación, instantáneamente decidió que estaba en el lado de su amigo.
—¡Olvidé un trabajo! — mintió e hizo la mejor cara de susto que pudo haber hecho jamás. — Lo siento, Sakura pero habláremos luego. Ese trabajo es realmente importante así que . . . perdón. — murmuró antes de tomar por la muñeca a Sasuke y prácticamente arrastrarlo con el para que caminara. Suigetsu entendió y empujó disimuladamente su amigo. Pudieron llegar hasta la cafetería, porque diablos que Sasu no era una ligera pluma de ave.
—¿Estás bien?— interrogó preocupado Suigetsu. Sasuke sólo pudo mirarlo de reojo y asentir con su cabeza. Mil emociónes estaban en su pecho y sentía como se le iban en el aire antes de que pudiera siquiera respirarlo.
— ¿Qué ha pasado allá? ¿Qué paso con ella? Mierda, Sasuke, di algo que me estas preocupando a más no poder. — golpeo suavemente la mesa tratando de transmitir su impotencia a sus dos amigos. Sasuke se incorporó en la silla y abrió la boca:
— Ella me rompió. — alcanzó a decir con prolongadas pausas. Frunció el ceño y estuvo a punto de hablar cuando Suigetsu lo empujó fuera del local.
—¿Qué verga, Sui? Déjame entrar — demandó mordiéndose la lengua para no decir algo más.
— No lo entiendes. Este es un tema muy delicado para él. Él estaba realmente interesado en ella, ya sabes. . . la amaba. Pero ella lo destruyó.(y ese era mi propósito en esta historia, bajar su orgullo y superioridad de sasuke)
— ¿De qué manera?
— Un día llegó una chica muy linda al instituto, pero era bastante reservada y bla bla. La cosa es que el empezó a juntarse demasiado con ella y según me contó tenía muchísimos problemas de verdad, jamás me dijo cuales eran pero bueno, el hizo todo por arreglarla. Y de repente lo logró. Ella lucia radiante y era popular y todos la amaban, a ella y Sasuke. Pero ocurrió que un día el padre de Sau falleció y él la necesitaba que lo arreglara como él lo hizo con ella. Pero no paso. Sakura decidió a última hora que él no era lo que ella quería y tomó su maleta y se largo tal y como llegó. Ahora él esta realmente mal. Y sigue roto . . .— se encogió de hombros mientras miraba por el rodillo del ojo a Sasuke balanceándose nerviosamente en la silla de la cafetería. Naruto sabía que había algo más porque nadie puede quedar tan traumado con su ex amor. No sabía que era, pero si sabía que iba a descubrió, que haría todo lo posible por arreglar a Sasuke. Sin importar que tuviera que hacer, lo daría todo por él. Naruto se desangraba por dentro y nadie lo sabía realmente, y aunque lo único que Naruto pudiera hacer por Sasuke era arreglarlo, por él.
— Yo lo arreglaré. — sentenció formalmente mientras empuñaba a Suigetsu lejos de la puerta y volvía a entrar a la cafetería. Se sentó frente de Sasuke y le regalo una sonrisa que no fue correspondida.
Suigetsu los miraba aún fuera de la cafetería, como esos ojos azules preocupados miraban cada detalle del rostro pálido de su mejor amigo, y esos ojos onix con la mirada pérdida.
ESTÁS LEYENDO
𝐇𝐨𝐦𝐨𝐟𝐨𝐛𝐢𝐚 → ɴᴀʀᴜꜱᴀꜱᴜ
Romance"Tenía sentimientos ya establecidos, siguiendo una norma y en un conteo lineal sobre quién, como y cuando enamorarme. Pero . . . Termine estropeando todo lo que creía correcto y no me arrepiento. Advertencia: esto es terrible tóxico, jeje. Lo mejor...