Cloudete Heartafilia

La maza de luz de filox.

Se despertó muy temprano en la mañana, se duchó y cambió, fue hacia el jardín a tomar sol antes de despertar al viejo, los rayos del sol al amanecer eran bastante cálidos, Cloudete se quedó contemplando el horizonte, a los pocos segundos el viejo entró en el jardín con una sarta de trastos, los colocó en el suelo, quitó la manta que los cubría, eran armas, de distintos tamaños, colores, formas, iban desde pequeñas dagas hasta grandes espadas, pero Cloudete no entendía para que quería un arma si ella iba a utilizar la magia, así que lógicamente preguntó.

-      - ¿Viejo, para qué se necesitan las armas?

-      - Dentro del mundo de la magia, hay ciertos objetos, que se encargan de acumularla, conducirla y expulsarla con mayor fuerza, un ejemplo claro fue el orbe que compraste. Bueno estas armas son especiales, fueron hechas con materiales mágicos, como escamas de dragón, huesos de demonios y alas de hada, son excelentes para el entrenamiento, ahora sí ten en cuenta que la lucha entre un mago y otro no necesariamente es a distancia, habrá momentos donde se tenga que pelear cuerpo a cuerpo, entonces como te defenderás, tienes que aprender a utilizar un arma y luego a enfocar magia en él y convertirte en una maga guerrera, lo que normalmente se utiliza en caso de magos de luz es el mazo de hada, mira es este – El mazo era de un color azul con tonos en blanco, tenía ciertas incrustaciones de marfil y una pluma de filox colgando (Un filox es un ave muy rara, que sólo se encuentra en el reino de Calisteria, veinte millas mar adentro desde el puerto de Urley, en las costas de Ur) – Ahora tendrás que aprender a pelear con él, pero para eso primero debemos comprobar de que esta arma es para ti, trata de levantarla del suelo utilizando una sola mano.

-      - Está bien lo aré – Cloudete levantó el mazo, era muy ligero, casi ni pesaba, parecía que sólo estaba cargando la pluma de filox – Viejo, es muy ligero, es fácil de manejar, esta arma si es para mí.

-       -Muy bien, ahora trata de golpearme con el mazo – Cloudete se apresuró a golpear al viejo, pero ni bien empezó a sentir el deseo de atacar al viejo, el peso del mazo aumentó demasiado, e hizo que la mano de Cloudete se precipitara a tierra – Como me lo imaginé, no eres capaz de dominar tus emociones, si no las puedes controlar, simplemente este mazo de luz se hará cien veces más pesado, es por eso que tienes que tener siempre controlada la situación, y nunca dejarte llevar por tus emociones, así que este mazo es de mucha ayuda para el entrenamiento de luz, este te dará control sobre la luz, esta es la segunda razón por la cual debes aprender a utilizar un arma.

-       -Claro ahora lo comprendo, en el momento que quise atacar, mis sentimientos dudaron, pensé que podría causarle daño y yo no quería eso, ahora me doy cuenta. ¿Qué es lo que tengo que hacer para dominar la maza?

-       -Lo primero es lograr suprimir tus emociones, tarea que no es fácil, para ello tienes que hacer algo mucho más difícil que encender una lámpara, tienes que lograr iluminar el mazo, la diferencia es que, mientras que en la lámpara sólo tienes que fijar tu energía en un punto y desatarla, en el mazo tienes que fijar la energía en todo el mazo, es decir poder centrar la energía en más de un punto a la vez y no sólo eso, también lograr transmitirla para que emane de la punta del mazo, los principios son los mismos, piensa en cosas que te den luz y trata de iluminar al mazo.

Cloudete lo intentó rápidamente, ella siempre era apresurada, no esperaba ni meditaba, era muy impulsiva, siempre haciendo lo primero que se le venía en mente, así que intentó enfocar la luz como en la lámpara para comprobar que era lo que podía pasar si sólo enfocaba la magia en un punto. A diferencia de la primera vez que emanó luz, esta vez no fue con tanta intensidad pero si con mayor rapidez, demostrando el control que había logrado sobre el elemento mágico, el resultado sólo fue un pequeño resplandor en el mango del mazo, entonces Cloudete prosiguió a sólo iluminar la tercera parte del cuerpo mazo, prosiguió así iluminando los otros dos terceras partes del cuerpo, al final Cloudete, midió la cantidad de magia necesaria para iluminar cada parte del mazo y lo que hizo fue soltar la luz necesaria y le enfocó en las cuatro partes del mazo y logró hacerlo brillar, con resplandor que semejaba los rayos del sol entrando por una ventana al amanecer, esta luz era cálida, y transmitía ternura, pero al mismo tiempo era tan poderosa que el aire se alocaba al entrar en contacto con el arma.

 Cloudete estaba logrando dominar el arma mágica, ya había completado la parte de concentrar la luz en el arma, y sentía como podía hacer que la luz fluya de un extremo a otro, con lo que había logrado la conducción de la luz y lo que le faltaba era la expulsión, Cloudete apuntó hacia el horizonte, por detrás del gran árbol y mandó de golpe toda la luz, desde el mango hasta la punta del mazo, en ese momento una gran explosión sacó volando a Cloudete, calló contra un muro y quedo tendida en el suelo, el viejo se apresuró y se acercó a Cloudete, se veía en su cara la preocupación, ella había concentrado demasiada energía y la había soltado de golpe, lo que provocó la explosión. El viejo la cargó, estaba inconsciente por el golpe recibido, así que el anciano la llevó en brazos a su habitación. Mientras que la conducía por los pasillos de la desgastada casa, iba pensando en el gran parecido que tenía con su hija, ambas controlaban las magias más poderosas y peligrosas, habían demorado casi el mismo tiempo en aprender a usarlas, y ahora, esta explosión con la maza, sucedió lo mismo con su hija con la diferencia que ella utilizaba un bastón, el viejo se iba preguntando ¿por qué hay tantas coincidencias? No me explico cómo esta joven, de un estrato social muchísimo más alto, a la cual nunca se la entrenó en la magia, tener las mismas cualidades que su hija, si ella llevó años de preparación antes de dominar la oscuridad, desde que tenía diez años, ocho años de preparación, enseñándole todo lo que sabía, y esta jovencita sin preparación aparente, logró todo de una manera sorprendente.

La noche pronto se hizo día y Cloudete se levantó con un fuerte dolor de  cabeza, producto del golpe y de la cantidad de energía liberada. Se fue a bañar, para relajarse un poco, se cambió y fue a ver al viejo, caminaba apoyándose de la pared, porque estaba adolorida, cuando llegó a la habitación del viejo tocó la puerta pero este no respondía, fue a buscarlo por toda la casa y no lo encontraba, al ver que no estaba fue a su recámara y se sentó en la cama, se puso a pensar sobre lo que había hecho mal, porque no pudo direccionar la energía fuera del mazo, tal vez no era para que desate todo la energía de golpe, sino poco a poco, o quizás no tenía que mover la energía de atrás hacia delante, tantas cosas que cruzaban por su cabeza en ese momento, hicieron que le doliera más la cabeza, así que se recostó y se quedó dormida al poco rato.