One Shots I - JEMMA

Cinco Minutos Más

N/A:Les recomiendo escuchar la canción "Cinco Minutos Más de Lasso & Ha-Ash" para tener una mejor experiencia al leer este One Shot

En el departamento, el sol atravesaba entre las cortinas medio cerradas, la primera luz del día entraba suave, y caía justo sobre el rostro de la ojiazul

Era domingo por la mañana, un domingo sin pendientes, de esos que se sienten como un respiro, el lugar olía a noches de películas, una cena deliciosa, pláticas sin fin y risas contenidas. No había alarmas, ni responsabilidades asomándose por la puerta, solo la calma flotaba por el espacio

Qué lindo es
Mirarte cuando el sol te da en la cara
Tenerte cerca todas las mañanas
Pedirte que te quedes otra vez (quédate otra vez)

Jenna abrió los ojos con lentitud pues no había prisa, el sofá estaba hundido por el peso de ambas, aún cubiertas por la manta que compartieron la noche anterior, giró levemente su cabeza y ahí estaba ella

Emma dormía a su lado profundamente, con el cabello despeinado cayeron sobre su mejilla y una mano saliendo del sofá. Los rayos del sol entraban a través de la ventana y se posaban sobre su rostro, iluminándola con una suavidad que la dejó sin aliento  

La luz tenue le marcaba los pómulos, el borde de sus labios, y hacía brillar cada detalle como si alguien la hubiese dibujado con paciencia y amor. Jenna se quedó en silencio observándola, sintiendo ese nudo dulce que se formaba en su pecho cada vez que la miraba así

Pensó en decir algo, en acariciar su mejilla, en inventar un motivo para que ella la mirará, pero no se atrevió

Ya tengo que irme (no te vayas todavía)
Ya se me hace tarde (ni siquiera este día)
Hace frío (traigo abrigo, ya mi amigo está en camino)
Quédate mejor aquí conmigo

La castaña había aprendido a protegerse, sus muros no eran visibles, pero firmes. Y aunque algunas veces Jenna sentía que Emma también la buscaba con la mirada, al final siempre volvía a cerrar la puerta

La ojiazul se movió ligeramente frunciendo el ceño al sentir la luz en su rostro, parpadeó un par de veces, antes de abrir los ojos por completo, al hacerlo, la vio

Jenna la observaba con una media sonrisa y los ojos llenos de algo que sabía como nombrar. Estaba recargada sobre un codo, con el cabello alborotado y la manta aún cubriéndole las piernas

Emma:¿Qué? — murmuró con la voz ronca por haber despertado

Jenna:Nada… solo que así, con el sol en el rostro y el cabello todo despeinado… te ves más bonita que nunca — dijo con voz suave

Emma:Cállate, eres una exagerada — dijo con una sonrisa incrédula en su rostro

Jenna:No estoy exagerando Emma

Insistió la pelinegra acercándose un poco más a ella

Jenna:Si me hubieras visto dormida, estoy segura que te asustabas, tú en cambio, parecías una princesa

Emma:Jenna… — susurró con ese tono que siempre usaba cuándo quería detenerla

La pelinegra lo notó, siempre lo notaba

Emma:¿Qué hora es? — preguntó

Jenna miró el reloj en su celular sin moverse

Jenna:Casi las 8:30am pero tienes que irte tan temprano ¿O si?

Emma:Si… tengo cosas que hacer — respondió sentándose con cuidado

Jenna:Emma…

Emma:No todos podemos tener domingos, sin pendientes Jenn