Capítulo 7

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Arya POV'S

Azoto la puerta de la entrada y mi papá ya me está esperando con los brazos cruzados.

- Tardaste demasiado - dice en tono serio.

- ¿Cuánto? ¿Veinte minutos? - respondo sin poder controlar el tono de mi voz.

- No me hables de esa forma - advierte.

- ¡¿Tenías que enviar a tus estúpidos asistentes a vigilarme?!

- ¡No te equivoques conmigo, Arya Crawford! - grita sobresaltándome - Soy tu padre y me vas a respetar te guste o no. Tu rebeldía tendrá un alto y si tú no pones de tu parte tendré que tomar medidas drásticas hasta lograr que te comportes como la señorita que eres - nunca les había hablado de esta manera a mis padres...

- No quiero a personas siguiéndome todo el tiempo... - susurro y él asiente con dureza.

- Arreglate. Tenemos un evento - asiento cabizbaja y camino directo a mi habitación.

Sé que si ellos quieren me quitan absolutamente todo y aun que me considero una mujer capaz de lograr lo que se propone me aterra que papá me lleve a un internado.

- ¿Arya? - la voz de mamá se escucha del otro lado de la puerta.

- Pasa, mamá - la puerta se abre y ella aparece con una enorme sonrisa.

- Te ves muy bonita - dice observando el lindo vestido negro. Intento formar una sonrisa pero sale una mueca -. Te escuche peleando con tu padre - aquí vamos. Se acerca a mí joyero y comienza a inspeccionar los accesorios.

- No confía en mí - susurro.

- Te hemos dado muchas oportunidades para que nos demuestres que podemos confiar en ti pero siempre terminas huyendo de casa para ir a esos lugares de mala muerte - ruedo los ojos -. No hagas eso, Arya - me observa. Sí, ella odia que ruede los ojos.

- No tienen que tener a personas siguiéndome todo el tiempo - ella coloca un collar sobre mi cuello y después lo quita para buscar otro.

- Hemos intentado millones de veces hablar contigo para que te alejes de esos asquerosos lugares pero te niegas a escuchar - parece que ha encontrado el collar indicado -. Tenemos que tomar medidas más severas - lo coloca sobre mi cuello y sonríe orgullosa.

- Obedeceré pero no quiero guardaespaldas - ella me observa y niega con la cabeza.

- Yo no los contrate - se inclina y besa mi mejilla -. Recuerda tu educación, pequeña - suelto un gruñido que la hace reír y se marcha.

karenpinedaaax

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