Capítulo 7

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Salimos de nuevo al comedor y ya hay menos personas que antes de irme.
- Annabeth- Una voz conocida dice mi nombre. Volteo y es Robert. El novio de Sarah
- Rob. Oh por Dios. ¿Qué haces aquí?- Lo abrazo sin más.
- Lo mismo digo, niña. ¿A dónde rayos fuiste? Se supone que tenias que irte conmigo para llevarte con Sarah...- Me dice y noto algo extraño en su tono de voz.
- Sarah está perdida ¿no?- Le digo con la voz temblorosa.
- Sí, perdieron comunicación con su bloque. Antes de entrar al GoldMade. -Me dice Robert.
La calle GoldMade era el lugar más hermoso y perfecto que un ser humano podía imaginar. Casas enormes y bonitas. Y sí. Ahí vivían los Gobernantes. Irónicamente llamado GoldMade; Hecho de oro. Ahora todo tiene sentido. Por qué nadie investiga acerca de nada. Por qué las ventas de la librería eran escasas. Y por qué no podíamos preguntar sobre el pasado. Nadie hablaba de él como si hubiere sido enterrado para no volverse a hablar de él.
- Anna- Me dice Tom, sacándome del trance.
- ¿Qué pasa?- Le digo perdida. Y cuando reacciono, ya no está Robert.
- Vamos- Me dice y me jala con cuidado.
Camino torpemente por mi pierna lastimada. Ahora me lleva a otro lado, eran dos puertas enormes de madera. Arriba tenía un letrero que no podía leer. Nuevamente las abre Tom.
- Bienvenida al centro del conocimiento del mundo- Me dice Tom- Bueno, exageré un poco, já.
Cuando entro, hay tantos estantes de libros que no puedo contarlos. Enormes, casi tocando el techo. Una tenue luz proveniente de la ventana alumbraba. Había pasillos y pasillos de libros. Jamás había visto tantos juntos. En la escuela nos dan una especie de libro, de 15 páginas para todo un año. Nos enseñan muy poco, realmente. La mayor parte de la enseñanza se centra en los oficios extra curriculares o en los deportes, teníamos más horas de deportes que de otra cosa, preparaban nuestro físico para la vida ruda afuera. Generalmente, los hombres trabajaban para el gobierno, esforzando su físico en la pesca, herrería, ganadería, etcétera. Para darnos un poco de lo que producían. Para sobrevivir. Las tiendas eran del gobierno. Ninguna persona podía vender sin autorización. Todos los ingresos son para el gobierno y ahora comprendo eso. Gobierno de Hipócritas. Me acerco a los estantes y leo "Historia" en un libro.
- ¿historia?- Le pregunto a Tom.
- La historia era una ciencia que estudiaba nuestro pasado, cómo fuimos evolucionando para llegar a esto y claramente no les convenía que supiéramos eso. Todos los libros están aquí. Bueno, todos los que ellos no quemaron o se llevaron en la dictadura. Abandonaron hace décadas esta Universidad y supongo que creyeron que no era importante destruirla. Vengo aquí cuando necesito saber algo. Y es increíble encontrar todo y resolver todo con un libro.- Me dice Tom, maravillado.
- Sí, en mi escuela no tenían esa denominación, era "cuaderno escrito", no libro- Le dije- Pero gracias a mi mamá aprendí mucho. Con la librería. - Ahora que todo toma sentido en mi mente, me percato de que nosotros desafiamos abiertamente al Gobierno.
- Tu madre tenía la librería. Y bien, aunque no tenia libros como estos, significaba una amenaza para el Gobierno. Y entonces.... Descubrieron que un grupo de personas sabía todo. Y comenzó la guerra.- Me explica Tom.
-¿Y por qué no nos han encontrado?- Le pregunto.
- Un trabajador del gobierno desobligado tuvo la orden de quemar y destruir esta Universidad, pero prefirió guardar el dinero y no destruir esto. La encontraron hace años. Y como está alejada de la ciudad, no saben que sigue en pie. Y utilizamos un tipo de camuflaje para que no nos encuentren.- Me dice Tom.
Nos quedamos en la librería leyendo un buen rato, lo sé porque la luz comienza a escasear.
Cada cosa que aclaro, me abruma. Tanta información hará explotar mi cabeza. Necesito asimilar todo. No es fácil encontrarse con esta realidad y saber que todo el tiempo el Gobierno fue un doble cara y nos enseñó lo que quiso.

Cuando la oscuridad nos alcanzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora