Respirar, sentir, la noche nos ofrece tantas sensaciones, solo es cuestión de relajar la mente y dejarnos llevar, pero nuestros tabúes y lo cotidiano de la rutina nos impiden ver con claridad lo que queremos, el cuerpo sabe lo que quiere y lo que anhela, todos esos deseos que retenemos deberían sentirse libres de fluir, somos seres puramente sensoriales, vivimos de emociones y texturas, nadie debería juzgar nuestros ideales, pero vivimos en una sociedad que impone fronteras, que nos limita a lo que realmente somos, nos hacen y deshacen a su antojo, los impulsos se contraen y se esfuman.. Odia, ama, vive, satisface tus deseos, alimenta tu lujuria y hazte amigo de tus demonios, al final del día solo serás tu contra el mundo y nadie le importará lo que decidas hacer con tu vida
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Del rincón de mis pensamientos
Short StoryPequeñas reflexiones, historias cortas, fragmentos de una vida