Al salir , Rynn cerró la puerta del frente y le hechó llave . cerrándose el chaquetón verde militar hasta su cuello, miró al cielo , aunque el mundo estaba tan húmedo como una acuarela gris , la lluvia había cesado. Con una mano hizo tintinear las llaves y con la otra comprobó que Gordon estuviera ahí, sacó a su ratón del bolsillo para que pudiera respirar el aire frío, la naríz sonrosada se estremeció.
—inspira profundamente —le dijo— eso hace que uno se sienta limpio y purificado...
En ese momento lo vió. A través de los negros troncos de los árboles : el Bentley rojo color hígado de la Sra Hallet.
A un par de kilómetros de su casa oyó el aullido insistente de una bocina y el estrépito de la musica Rock. Cuando el ruido se acercó y un coche pasó a toda prisa por la ecrucijada , vió a los jóvenes pasajeros. Habían ganado el partido. Eran felices , gritaban y estaban juntos , sin que nada les preocupase en el mundo. ninguno de ellos conocía a la chica que estaba sola en el camino tapizado de hojas húmedas , pero la saludaron alegremente.
Rynn alzó la mano , como para devolver el gesto, la bocina y la música se perdieron en la tarde húmeda. Esos chiquillos felices que iban en el coche ¿se habrán sentido sentido alguna vez solos? , ¿por que iban a sentirse asi ? tenían familia, tenían amigos. Si uno de ellos estuviera mortalmente asustado , siempre tenía alguien a quien acudir, con quien hablar. Si uno de ellos tuviera que mover un coche, se lo podía pedir a un hermano o a una hermana, o mandarle un mensaje a un amigo... a cualquiera de sus amigos.
Pero ¿ a quién podría llamar ? . Rynn aún con su chaquetón puesto, estaba junto al mostrador de la cocina; había hallado el número de la estación de servicio en las páginas amarillas de la guía telefónica , marcó y después de unos segundos alguién atendió. —un vecino se comprometió a llevarlo —explicó—.Mi padre espera en la estación de trenes. Usted sabe que nunca se puede conseguir un taxi cuando uno lo necesita. No , ya se lo he dicho , el conductor no tiene que ser mecánico. Puede ser cualquiera de su estación que sepa conducir.¿ Lo harán tan pronto como sea posible? muchas gracias.
—las llaves? la voz de Rynn traicionó su pánico.
—están en el coche —dijo—. Estaré esperando.
Colgó y se quedó, todavía helada, junto al mostrador de la cocina. Con repentina fuerza , la agarró por el borde y sacó la alfombra trenzada , arrastrándola por el suelo desnudo. Tiró la pesada alfombra a un lado, dejando libre la trampa, sus dedos lucharon con el pestillo, hasta que cedió.
Durante largo rato la niña estaba arrodillada sin moverse , luchando, reuniendo todo el valor que necesitaba para alzar la trampa.
Otra vez , fue sólo esa fuerza súbita que quiebra el miedo con la acción, lo que le permitió echar atrás, inspiró profundamente , contuvo el aliento y bajó presurosa los escalones de piedra.
En menos de un minuto , como buceador que sale a la superficie , jadeando en busca de aire , corrió escalones arriba, con las llaves en la mano , aún jadeante barrió los trozos de periódico amontonados en los bordes de la trampa y los arrojó mariposeando en el sótano. Estaba bajando la trampa cuando oyó llamar a la puerta del frente.
Se le detuvo el corazón
No era un puñetazo , ni una llamada estrepitosa, era un golpecito.
Desesperada, corrió el pestillo y colocó la alfombra trenzada sobre la trampa.
Otro golpecito . Rynn se puso rígida.
—¡un momento!—
Volvió a arrastrar la mesa por el piso de roble asta la alfombra , tratando de evitar que chirriara. Mientras la movía , tintiniaron los tarros dentro de la caja.
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La niña y el mago © #PGP2017
FanfictionEsta es la historia de amor y suspenso , denle una oportunidad sé que les encantará espero que la disfruten . Un agregado importante es Joe Jonas como el protagonista y a Christina Ricci como la niña misteriosa así que disfrútenla.