Agridulce [Fanfic YAOI+18 ShuxYuma]

Primera cita

El moreno alto se dirigió a casa del rubio, al llegar se paró en la verja. 

- ¡SHU! 

Gritó, nadie respondió y grito un par de veces mas aquel nombre, de mientras dentro de la casa un peli negro con gafas miraba des de una de las múltiples ventanas. 

- M... ¿que hara ese Mukami aquí?

Mientras en la sala estavan Shu y dos de sus hermanos, uno peli blanco y otro peli morado. 

- Nee Teddy ¿Oyes eso? - Dijo dirijiendose al oso de peluche que tenia en sus manos.

- Shu, alguien te busca. 

El rubio despertó vagamente quitandose un auricular para escuchar mejor. 

- Se me olvidó... Quedé con Yuma... 

- ¿Se te olvidó? Shu, eres increïble -dijo el peli blanco en un tono enfadado- ¡encima un Mukami!

- Relajate Subaru... 

- Tsk... - Subaru se fué dando un portazo. 

- No deverias andar mucho con ellos Shu... -dijo el peli morado, mientras Shu se dirijía hacía la puerta. 

- Es mi vida, cuida de la tuya - dijo serenamente y salió de la mansión. Fuera le esperaba el alto sentado en la fuente mirando hacía la puerta. 

- Ya era hora. 

- Lo siento, estava... con cosas... 

Des de una ventana seguía el pelinegro observando. 

- Ya veo que la amistad es irrompible he... Veamos cuanto dura esta vez. 

Mientras, ambos fueron hacia un parque cercano, estuvieron un rato de paseo hasta que Shu se cansó y se sento en el primer banco que encontró, ambos se sentaron. 

- A noche recordé la fiesta que me llevastes, me gustaría haber compartido mas momentos asi contigo - dijo Yuma entusiasmado. 

- A mi igual, fuistes alguien importante.

- ¿En serio? -dijo algo sonrojado. 

- Si... fué agradable estar contigo. 

Yuma le abrazó fuerte y este correspondió con algúna lagrima, se separaron y Yuma secó las lagrimas de Shu. 

- He, ¿Estas bien? 

- Si... solo que... me dolio tu perdida digamos, y volver a estar contigo... me emociona. 

- Supongo que me alegra oir eso, pero no llores, me tienes aquí de nuevo, y esta vez no me ire - le dedicó una sonrisa cálida, y Shu le correspondió con una sonrisita. 

- Creo que deveríamos volver, amanecerá pronto. 

- Ho, claro. 

Ambos se levantarón para ir hacia sus casas, cuando llegaron donde ambos caminos se separaban Shu coge a Yuma del brazo. 

- Gracias. 

- ¿Por? 

- Por lo de hoy, me ha gustado, podriamos... ¿Podriamos quedar otro día? 

- ¡Claro! - Dijo Yuma con alegría. 

- Genial 

Shu se hacercó a el y le beso la mejilla para despedirse y este le correspondió besandolo también en la mejilla. 

- Nos vemos - dijo el alto con alegría. 

- Nos vemos... 

Ambos se dirijierón cada uno a sus respectivas casas, dando fín a aquella salida, que podría a ver sido el inicio de algo mas que una simple amistad.