My Wonderful Adventure with the Doctor.

"Los 50s" Parte I

Llevar las cuentas de los días desde que dejó Inglaterra había sido un trabajo duro, y si no se equivocaba, ese día era su cumpleaños número 15.
-¡Londres 1943!- exclamó el Doctor con emoción sobre la consola de la TARDIS.

Elizabeth sonrió de felicidad por volver a ver a su familia. Y pensó que para el momento al que se dirigía, la guerra ya hubiera terminado, y podría volver a ver a su padre. En ese instante se preguntaba que estaría haciendo su madre, donde se en encontraba su padre y si Gladstone le extrañaba tanto como lo hacía ella.

La TARDIS se sacudió como licuadora y el Doctor levantó una palanca. La nave había aterrizado. Subió las escaleras de la máquina del tiempo en búsqueda de un objeto, mientras que Elizabeth le ignoraba. El Señor del tiempo volvió con una pequeña caja entre las manos que su acompañante no pudo distinguir que era con exactitud. El Doctor se detuvo al lado de la chica y extendió su mano.

-Arriba, arriba. Hay mucho que hacer hoy. - dijo sonriendo. Elizabeth le miró confundida, pero aceptó su mano esperando encontrar la razón de tanta ansiedad. El Doctor le abrió la puerta.

-Después de ti. - dijo el Señor del Tiempo mientras alzaba el brazo.

Elly se abrió paso entre las puertas de la máquina del tiempo y se sorprendió al ver lo que había delante de ella.

La gente recorría con prisa de un lugar a otro la calle, música que no había escuchado antes y una mezcla de olores pestilentes que le revolvieron el estómago.

-Mmm...- dijo pensativo el Doctor. -Debemos de estar en los cincuentas. 1954 o 53. Estamos en Nueva York.- continuó, con la mayor tranquilidad, y puso pie afuera de la TARDIS.

-Pensé que íbamos a 1943.- dijo Elizabeth un poco desanimada.

-¿No gustas conocer como será tu cultura en 10 años? ¿Qué fue lo que la guerra les enseñó?

Elly miró a su alrededor y pensó que no podría ser tan malo después de todo.

...

El Señor del tiempo le había hecho cambiarse de vestuario, sus prendas de la década pasada, estaban fuera de moda y llamarían la atención. Ahora Elly llevaba una fanda bombacha con una playera fajada, que resaltaba su figura (discretamente). Elizabeth se miró al espejo y sintió que amaría este viaje.

Salieron pues de la TARDIS para dirigirse a un café no lejos de donde se había aparcado la nave.

-A propósito, feliz cumpleaños. - dijo el Señor del tiempo quien le entregó a Elly la pequeña caja que había sacado antes de algún misterioso lugar de la TARDIS.

-Gracias. - dijo deleitada. -¿Qué es esto?- preguntó mientras miraba por todos lados la pequeña caja, tratando de descubrir que era.

-Una cámara digital. Faltan al menos 20 años para que las desarrollen, inicialmente era para los astronautas pero muchas cosas eran para los astronautas que les vieron un mejor uso aquí en la Tierra. - contestó el Doctor con naturaleza. -Esta es del 2013. Ten cuidado en donde la usas.

Elly se distrajo un momento con el nuevo y peculiar aparato que sostenía entre sus manos. La única cámara fotográfica que había visto era una enorme.

-Más te vale leer primer el instructivo si no quieres romperla. - advirtió el Doctor.

-No me diste instructivo.

-Mira tu bolsillo derecho. - respondió el Señor del Tiempo.

-Esta falda no tiene bolsillos.

-Luego te consigo un instructivo, si es que no lo he tirada a una supernova.