SIGNALS - l.s (sin editar)

Capitulo 1

Amanecía un nuevo lunes en la ciudad de Doncaster, la rutina comenzaba una vez mas en aquel invierno.

Louis Tomlinson, un muchacho de 18 años caminaba directo a la preparatoria con un humor digno de querer evitar, estaba realmente indignado aquella mañana.

 ¿Cómo podía ser posible que su madre le quitara el auto por desaprobar geografía? ¡Ugh!, todo era mierda, la preparatoria, los profesores, geografía, su madre y hasta él mismo. Nada valía la pena. 

Odiaba interactuar con muchas personas, no soportaba la gente que aparentaba que todo iba bien ¿Cómo hacían para pensar siempre positivo? ¿acaso nunca perdían sus ánimos? ¿Por qué todos sonreían sin razón alguna? él odiaba todo eso, él prefería vivir con su mal humor, su cara sin expresiones y las estúpidas bromas que hacia con su mejor amigo Zayn. Su mejor amigo, si, su único amigo. Él siempre lo aguantaba, él valía la pena y lo aguantaba con su malhumor, por eso lo quería, Zayn no lo juzgaba. Zayn, sus hermanas y su madre, que a pesar de haberle quitado el auto, eran las únicas personas que valían la pena, las únicas que merecían una sonrisa de él. Louis odiaba todo de él así como odiaba a todos. El castaño no creía en el amor, eso era patético ¿Cómo dos personas podían prometerse amor? al final siempre terminan con el corazón roto y ese tipo de cosas.

Él no sabia demostrar sentimientos a otras personas que no sean las mencionadas anteriormente, él era él y no le importaba tu opinión, la de ellos, la de nadie.

La campana sonó mientras él seguía guardando los libros en su casillero, odiaba los lunes, los lunes arruinaban su vida porque eso significaba que la rutina comenzaba, lo que implicaba ver gente que no aguantaba. La preparatoria no era su lugar favorito en el mundo, para nada que lo era. Siempre los mismos compañeros, los mismos profesores, las mismas materias, los mismos idiotas.

Próxima clase: geografía ¡GENIAL! odiaba geografía, por eso reprobó, ahora se sentía obligado a prestar atención para volver a tener su auto. ¡Ugh!, maldita geografía.

El salón ya estaba casi lleno, en cualquiera de los siguientes minutos el profesor llegaría. Louis se encontraba hablando con Zayn ánimadamente sobre la tarde de videojuegos que habían compartido el sábado en su casa. Zayn era tan igual pero a la vez tan diferente con él, el moreno comprendía todos los pensamientos de su mejor amigo, pero aun así él a veces le llevaba la contraria. Intentaba disfrutar al máximo su vida ¿de que valía tener 18 años y ser un aburrido? pero Louis era su mejor amigo y ellos juntos se divertían. Porque Louis no era las 24 horas del día un amargado, Louis era la persona mas grandiosa del planeta, pero solo frente a él y su familia, nadie mas. Para Louis nadie necesitaba saber como era él ¿que les importaba? mejor aparentar malhumor y que no lo molesten. O eso creía Zayn, él sabia que detrás de esa fachada de malhumor había un chico "normal, con ánimos normales" pero solo esperaría a la persona indicada que acabara con la amargura de Louis.

El profesor ingreso al salón con su casual "buenos días" mientras solo algunos alumnos correspondieron el cordial saludo. A los 18 años las personas que asisten a una preparatoria creen que son "rebeldes" y por ende hacen cosas idiotas para que crean que lo son, o eso pensaba Louis y le fastidiaba saber que todo lo que hacían sus compañeros era para conseguir una chica o por la idiotez de "ser popular" a la mierda eso, los populares son idiotas.

La clase comenzó mientras Louis intentaba prestar atención a cada palabra de su viejo profesor pero luego de diez minutos su mente ya estaba en otro mundo, pensando en vaya a saber que. Su mirada viajaba por todo el salón intentando encontrar algo divertido para admirar o no se, lo que fuese que lo sacara de aquella estúpida clase del lunes. Todo era tan patético, todos con la vista enfrente escuchando "atentamente" al profesor y algunos, solo algunos charlando entre si o con su celular en mano. 

Pero algo capto su atención en el primer segundo que lo vio, era una manta de rulos que cubrían el rostro de aquel chico, no podía ver el rostro de él, pero sus rulos eran demasiados llamativos como para captar su atención. Era la primera vez que veía aquel chico, seguramente era nuevo porque esos rulos no se los hubiese olvidado si los hubiese visto antes. El rizado parecía entretenido trazando líneas en su cuaderno, al parecer tampoco estaba prestando atención a la clase, tampoco se percato de una mirada azul quemándole la nuca, él solo estaba ahí, trazando líneas sin sentido y a Louis le llamo la atención.

Zayn dormía a su lado apoyado sobre el banco y cada tanto uno que otro sonido salía de su garganta, lo que Louis aprovechaba de grabarlo para reírse de él durante la semana. Pero ese lunes Louis no lo grabo porque estaba muy ocupado observando aquellos rizos desparramados. ¡Ugh! era odioso admirar rizos ¿era patético no? intento despegar los ojos de allí pero después de unos minutos su mirada ya se posaba en los rizos nuevamente, los cuales no dejaban de hacer picar sus manos por la suavidad que parecían tener.

El receso llego y aquel rizado salio a paso apresurado del salón, pero nadie lo miraba, parecía estar solo, no hablaba con nadie pero Louis no se preocupo, "seguro es un nerd mas" pensó mientras decidía no contarle de aquello a Zayn, ni siquiera era importante haber pasado toda una clase de geografía observando un chico de rulos ¿no?

El timbre que anunciaba el finalizado de clases de aquel lunes sonó y Louis había pasado toda su mañana pensando en el chico de rizos que no volvió a ver. Camino hacia su casa, como debería hacerlo ya que no tenia su auto mientras las primeras cuatro cuadras se quejo por ello, ni siquiera podía irse con Zayn ya que vivía en dirección contraria. Caminaba con pesadez mientras escuchaba música con sus auriculares y pensaba en cosas sin sentido como normalmente lo hacia. De vez en cuando recordaba el chico de rizos pero automáticamente cambiaba ese pensamiento, no quería pensar tanto en alguien, era ridículo.

Unas cuadras antes de llegar a su casa vio aquel chico de rizos cruzar la calle, por fin pudo ver su rostro, era de una tez demasiado blanca y sus labios eran rojos y carnosos, sus ojos iban achinados por la luz del sol. Lo observo mientras seguía su camino, pero el chico de rizos ni siquiera lo noto, solo iba caminando mirando hacia frente.

Lo vio entrar en una casa de rejas, la casa parecía acogedora pero bastante linda, de esas casas típicas de familias chicas. El rizado cruzo las rejas y al momentos de cerrarlas vio al ojiazul al otro lado de la calle que lo observaba, pero solo esa conexión en sus miradas duro segundos, ya que le rizado giro sobre sus talones y entro rápidamente a su casa.

Fue extraño aquella reacción del chico, pero quizás pensó que él lo estaba siguiendo o algo así.

Al entrar a su casa se encontró con un par de gemelas que lo esperaban con sus brazos abiertos para un abrazo de oso, como le llamaban ellas. Obviamente Louis les devolvió el abrazo, él veía por los ojos de sus hermanas, ellas eran lo mas importante de su vida, aunque las que seguían de él estaban en plena adolescencia con sus hormonas alteradas, pero las amaba igual.

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twitter: larryxdangerous

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