Aceptando Sentimientos

Descubrimientos, Celos y Cartas

Quiero quererte y solo puedo amarte, quiero olvidarte pero vives en mi mente, quiero no oírte pero gritas a mi corazón.. quiero alejarme pero estás en mi Corazón.

Hermione despertó sin deseos de levantarse, había llorado, se había mojado y para colmo apenas y había dormido, y como si eso no bastase, sentía como ciertos síntomas de la gripe se empezaban a manifestar, y eso no le gustaba.

Se levantó y se arreglo, sus ojos se veían gracias a Dios normales y no hinchados, su rostro de veía bien, se recogió su cabello, ya que cuando lo traía suelto por lo general terminaba arrancándoselo con la mochila y eso obviamente dolía.

Tomó sus cosas, y entonces la vio. Su capa.

La capa de Remus Lupin, que le había brindado la tarde anterior. Y recordó EL la había abrazado de un modo en el que nadie le había abrazado nunca, y aquel contacto, que el mismo había roto, había sido lo suficientemente poderoso como para que ella supiera que estaba en problemas.

Amor.

Desde siempre el amor esta en varias conversaciones, en libros, y claro en el mundo muggle, en las películas y series televisivas, si y como toda chica la palabra amor, tiene efectos que la ponen a suspirar con el anhelo de poder encontrarlo, y ser feliz con el .

Si, el amor, algo único, proveedor de miles de sensaciones, sin nombres, la razón por la cuales las personas volaban alto y alto, alejándose de la tierra, "la tierra segura", se dijo, pero con el amor, viene la decisión , la decisión de correr el riesgo o no, el riesgo de volar tan alto, como lo hizo Ícaro, el amor te da alas, o eso siempre dicen, y una vez que despegas y te dejas llevar, subes tan alto tan cerca del sol  y tus alas, como el amor son frágiles, y si uno no tiene cuidado estas se romperán, y la caída será demasiado larga .

Pero eso ya estaba contemplado en su mente, pero para poder volar debía estar segura, debía de revisar si aquellas alas le ayudarían, que resistirían las ardientes llamas del sol y que no se romperían, sino que debían ayudarla a regresar a tierra, tal vez no entera, pero si mas completa.

Sonrió débilmente, lo había decidido ya, se arriesgaría a levantar un pie fuera de la tierra segura, aspiró el aroma de la capa, olía tan bien, una mezcla sin duda de olores pero que daban en si una única esencia, esencia que tenía un nombre y un apellido, Remus Lupin.

La dobló cuidadosamente, y una vez cuando estuvo a punto de guardarla, abrazó la prenda, como si en un instante de aquella prenda brotaría el hombre al que amaba, pero no, no fue así, aspiró nuevamente aquella deleitadora fragancia y la guardo con cuidado.

Dirigiéndose rumbo al gran comedor, no había señal de sus amigos, así que disfrutaría de una tranquila caminata hacia el gran comedor, donde seguro los vería.

Theodore Nott. Theo Nott.

Un chico alto, rubio pero no en exceso, de ojos azules pálidos, y mirada tranquila, labios finos pero varoniles, su rostro perfectamente marcado, a tal grado de no ser solo un chico bonito, con cara de niño, tenía los rasgos, de un chico atractivo, que cuando fuera mayor, lo más seguro se convertiría en un hombre inmensamente atractivo, sin duda alguna.

De familia dinerada, un sangre pura, y perteneciente a Slytherin, la casa del verde y la plata.

Las chicas le llamaban el segundo mas sexy en todo Hogwarts, el primero era Draco Malfoy, el tercero Blaise Zabini, cuarto Harry Potter, y así seguía una lista, entre los más deseados del colegio.

Pero en estos momentos, el no era el típico Slytherin engreído que se la pasa molestando a todo el que no pertenecía a la misma casa que el ,no había decidido desistir ante la idea de volverse uno más del séquito de Lord Voldemort, el no estaba dispuesto a una vida esclavizada, con un sujeto que ni siquiera se tomaría la molestia de aprender los nombres de sus seguidores, si el debía de unirse a algún lugar sería a uno en donde su vida no tuviese una vida cobarde, en donde su rostro debiera estar escondido detrás de una máscara, eso no era nada noble.