Capitulo 23

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*narra Guillermo*

Apenas me sumerjo en el agua un gran frio me invade de forma chocante, cambiando la temperatura de mi cuerpo de forma repentina. Esa agua no estaba helada sino lo siguiente. Aunque me había alejado un poco de la orilla así me gustaba, pero una voz gritando me saca de mi pequeño trance. Es Vegetta y está pidiendo ayuda, cuando logro divisarlo tuve que llamar su nombre a gritos, así me podría notar

—¡¡WILLY!! ¡¡WILLY!! –no sabía si se tratase de una broma y más le vale que no, rápidamente llegué hacia él, tratando de calmar sus nervios y angustia

—Tranquilo, Tranquilo. Que no estamos lejos de la orilla

—Willy está demasiado helado –se nota que está temblando mucho, su cara se tornaba palida y sus labios perdían color —Fue una mala idea

—Una terrible idea –llevándolo conmigo hacia la orilla para así salir de esa agua helada.

Para suerte Samuel había encendido una fogata antes de ingresar al agua. Ns daba calor y era algo que necesitábamos, sobre todo Samuel quien ya se le notaba que estaba mejor. Con una toalla cada uno sobre nuestros hombros para secarnos mientras reíamos por lo que acaba de pasar.

—¡Eh! El socorrista salvando vidas. No agradezcas

–Tampoco te lo flipes chiqui. Pero gracias de todos modos -siguiéndolo un silencio algo incómodo, como si quisiese decir algo y se lo interrumpiese así mismo -Que linda la luna ¿no?

-Pues sí, una hermosa luna llena...

Me había propuesto una meta y era que de esta noche no pasaría sin antes confesarle a Samuel mis sentimientos. Pero madre mía que fácil no lo es, para nada. Un momento estas decidido y mandar todo a la mierda, y al otro estas pensándotelo mil veces más. Me maldigo por haberme enamo...

—¿Que tienes Willy? -mi cara de sorpresa ante esa simple pregunta me delataba. Ni con mil escusas escaparía –Estas pálido chico

—Ehm... Nada, todo bien -"No Guille esa no es la respuesta". Ya está bien de tanta cobardía. Si quedo como pringa'o quedé así y listo —Vegetta necesitamos hablar, seriamente

—Pues si tan serio es... Cuéntame –ahora sí. Con calma y respirando hondo

—¿Tu me quieres? -vaya pregunta tan idiota... "Solo respira"

—¡Hombre! Claro compañero –"Respira y mantén la calma"

—Pero me refiero... ¿Cómo me quieres? –siento mi corazón que desea escapar de mi pecho y salir volando. "manten la calma" —¿cómo amigo? ¿Compañero? ¿O algo más?

—Guille... –"mantén la puta CALMA" - No sé qué decir.

A la mierda la calma, la paciencia y la cordura. Debía hacerle saber lo que siento que siento mi corazón podría reventar. Uniendo mis labios con los suyos de una forma imprevista y sorpresiva. No importaba si me lo correspondía o no, pero ya hasta ese momento las palabras no harían falta. Podría estar básicamente explotando por dentro debido a ese beso, a esos labios que no esperaba en mi vida besar. Por más raro que fuese sentía que algo faltaba, no se sentía como "el beso" que siempre dicen. Si no más bien como solo dos labios juntos

—¿Willy que haces? –no esperaba esa respuesta, tal vez le había disgustado pero esa sonrisa no desaparecía de su rostro. Cosa que provocaba en mí más intriga

—¿Pues qué crees? Besarte

—Pero chiqui que así no es. –no entiendo nada. ¿Cómo que hasta existen reglas para besar? Es que yo flip... ¿¡Que está haciendo!? –El primer beso si quieres que sea especial tú mismo debes sentirlo

Un Radical CambioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora