-¿Pero que..-No es propio de una dama maldecir- me interrumpe Nate poniéndome uno de sus largos dedos sobre mis labios con un tono burlón.
-Tampoco es propio de un caballero tocar a una dama sin su consentimiento- exclamo apartando su mano con las mejillas encendidas.
-yo soy siempre un caballero Luanna Fernández- susurra cerca de mi oreja, provocando un escalofrío por todo mi cuerpo.
-¿Quién ha venido Luanna?- pregunta Olivia a gritos desde la cocina.
-Ehmm..- poco satisfecha con mi falta de comunicación se acerca por sí misma a comprobar a nuestro visitante.
-¿Y tú quién eres?- suelta una vez que llega y le fulmina con la mirada.
-Soy Nate- responde con simpleza.
La expresión de desconfianza de mi amiga se multiplica por dos.-¿Lo conoces?- inquiere mirándome con una ceja enarcada y la mirada severa.
-Es "amigo" de Ashley, ah y de Ryan- dicho esto se escucha el repiqueteo de unos tacones en la madera y aparece un torbellino rubio que se abalanza sobre el chico.
-¡Has venido!- chilla antes de presionar con fuerza sus labios contra los de él, provocando el desagradable sonido de morder un melocotón.
Olivia y yo ahogamos un escalofrío y el ambiente se vuelve aún más tenso mientras la pareja se empiezan a liar como si no hubiera un mañana.
Mi amiga observa mi expresión y carraspea con fuerza.
-no sería muy cortés por mi parte dejarte plantada- responde finalmente Nate una vez que se separan.
-¿No os ibais?- suelta Olivia fulminándolos con la mirada desde el marco de la puerta.
-por supuesto
-¡Un placer!- grita Nate alejándose.
-¡Vete a la mierda!- chilla mi mejor amiga desde la puerta.
Puedo oír la risa del chico desde aquí, que antes de subirse al coche se gira y me dedica una mirada que soy incapaz de descifrar.
-Luanna Fernández ¿vas a tener el valor de explicarme que cojones acaba de pasar aquí?- inquiere Olivia bufando antes de darse la vuelta y entrar.
-¿Quién era?- pregunta Mia mientras saca las pizzas del horno y las coloca en un plato.
-un amigo de Ashley, se han ido- respondo ayudándola con la comida.
-es verdad, me dijo algo sobre eso- musita Mia
-tenemos pendiente una conversación Luanna- me recuerda Olivia con una mirada inquisitiva.
Aparto la vista y me vuelvo hacia mi otra amiga que ya nos espera tumbada en el suelo de su cuarto, aprovechando el descuido y comiéndose todos los trozos de pizza posibles. Me siento a su lado y rebusco entre los montones de DVD'S alguna película decente. Descubro la caratula de el hobbit y miro a las chicas con una mirada suplicante.
-Me niego- anuncia Olivia- Esas películas duran más de cuatro horas, y ya nos has hecho verla demasiadas veces.
-son tres- corrijo con la esperanza de aplacar su negatividad. Su mirada no demuestra que haya cambiado de opinión, y recurro a Mia como último recurso. Cuando esta menea la cabeza me dejo caer sobre la moqueta con teatralidad.
-Yo voto por el diario de Noah- propone Olivia. A las dos se le iluminan los ojos, y no se cómo, acabamos viendo un drama de amor.