Capitulo 13

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Quería avisar, de que parte de este capitulo es tiempo atrás. Esta marcado con diferentes letras. también quiero decir que contiene material adulto.


Seth se mordió el labio inferior y se dio una vuelta por la habitación bajo la atenta mirada de su amiga. Ella estaba impaciente porque Seth le diera una respuesta-Ari-susurró mirando al poster de una catarata que estaba colgado de una puerta del armario-Claro que he pensado en ello pero no lo he pensado mientras he estado en forma lupina y no lo hare. No soy estúpido-se giró para mirarla a la cara-pero no has hecho bien recordándomelo. Es difícil no pensar en una cosa justo después de que te hablen de ella.

-Lo se Seth es que...si Embry se entera...o Diego ¡Dios!-exclamo poniéndose las manos en la cabeza.

-¡Sabia que esto pasaría!-se asomó por la ventana para coger aire-Sabia que te arrepentirías ¡Te avise!-estaba comenzando a enfadarse. Y no quería hacerlo, debía controlarse-dije que no era buena idea.

-Seth-dijo seria-no me arrepiento de nada-aseguró.

-¿Lo prometes?-se había girado para mirarla a los ojos.

-Te prometo que jamás me he arrepentido de lo que ocurrió. Lo único que pasa es que me preocupa que Diego se entere.

-Y Embry-añadió con tono ácido.

-Si...y Embry, no quiero que lo pase mal.

-Entiendo-mustio el pequeño de los Clearwater-tranquila, no pensare en ello pero no me lo recuerdes ¿vale? Ya llevaba bastante sin pensarlo ahora será complicado sacármelo de la cabeza.

-Me da igual que pienses en ello mientras no estés en forma de lobo.

- Así que con...Embry no te preocupa el tema de la distancia-murmuro para sí mismo pero lo suficientemente alto como para que Ariadna lo escuchara.

-¡Seth no seas injusto! ¡Todo ha cambiado y lo sabes!-exclamo algo enfadada-no saques ese tema.

-Lo has sacado tú al decirme que controle mis pensamientos-replico Seth -también tengo derecho a comentar lo que quiero.-Ariadna no tuvo respuesta para eso.

-Supongo que tienes razón Seth. Nunca quise perder tu amistad.-Se le resbalo una lagrima por la mejilla. Seth apenado se la limpio con la mano y aprovecho para acariciarle la mejilla-lo siento es que...no importa. Será mejor que me vaya Ari.

-Puedes quedarte lo sabes.

-No creo que sea buena idea, ya tienes novio, o algo así. Después de todo es tu amor verdadero-eso último lo dijo con algo de molestia-te veré otro día Ari. Y no te preocupes, nuestro secreto seguirá siendo nuestro.-Tras decir eso se lanzó por la venta y comenzó a correr por el bosque. Quiso entrar en fase pero no podía arriesgarse porque una corriente de imágenes comenzó a pasar por su mente. Si había alguien en fase las vería sin duda, decidió caminar por el bosque en forma humana hasta que tuviera su mente controlada y serena.

Ariadna se tumbó en la cama y comenzó a llorar, no pudo evitar recordar y eso la hizo entristecer. Comenzó a llorar desesperada, no podía poner fin a su llanto. Tenía las emociones a flor de piel.

Dos años atrás.

Corría el mes de agosto por lo que la playa de La Push se encontraba atestada de gente, dos amigos se encontraban en una de las profundas pozas marinas que se formaban con la baja mar-es una suerte que pocos conozcan este sitio-comentó Ariadna-odio cuando la playa está tan llena.

-Es verano ¿Qué esperabas?-Seth dio otro salto desde una roca hacia el lado más profundo de la poza.

-Ten cuidado Seth, hay rocas muy peligrosas, ahora mismo estoy tocando una con mi pie.-Seth estaba a punto de agarrarla y darle un susto pero una voz lo interrumpió.

Lobos... Embry y AriadnaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora