No, we're not friends [Camren]

27

Llegue a casa de Lauren a las 8:00 pm en punto. Vestida, maquillada y peinada (o algo así) para la fiesta de graduación.

Lauren y yo pasamos un buen rato en McDonald's después de la ceremonia. Pronto vi como se iba poniéndose de buenas y olvidando lo que le pasaba. Y es que eso es lo que deberíamos hacer: olvidar por un momento lo que pasa y sólo disfrutar. En vez de quedarnos abrazadas llorando por mi partida, deberíamos ir y vivir las experiencias que nos faltan. Como el baile de graduación, por ejemplo.

Le pregunté a Lauren si iría, pero ella dijo que no y se mantuvo firme en eso cuando le insistí mil veces que deberíamos ir. Pero pensé que si yo llegaba a su casa con este vestido, Lauren no podría negarse.

-¿Camila?- Preguntó Lauren cuando abrió la puerta. Traía puesta su pijama y pantuflas. Con su cabello despeinado y cara de recién levantada se veía muy abrazable.

-Hola.- Saludé.

-¿Qué haces aquí?

-¿No es obvio? Vengo a llevarte al baile.

-Camz, creí haber dicho que no iría las treinta veces que preguntaste.- Se cruzó de brazos.
-Oh, lo hiciste, pero igual pienso que deberíamos ir.

-Camila...

-Debo decir que me siento sumamente ofendida de que mi novia no haya mencionado lo linda que me veo en este vestido.

-Estoy segura de que ya lo sabes...- Me tomó por la cintura, acercandome a ella.- Te ves increíblemente hermosa.

-Vamos al bailee...- Pedí, sonriendo.

-Bueno, no puedo negarme a ti mientras uses ese vestido...-susurro en mi oído.- O a ti en cualquier situación.

-Hey, calmate, tigre.- Me aparte, sintiéndome acalorada de repente.

-¿Y si mejor nos quedamos aquí y hacemos...galletas?- Preguntó, mordiendose el labio.

-Nop.- Respondí, negando con la cabeza.- Si vamos al baile, podemos hacer...galletas... llegando.- Le guiñe un ojo.

-No lo sé...-Pude ver en su rostro que comenzaba a considerar la idea.

-Vamos.- Tomé sus manos y di unos cuantos brinquitos entusiastas.-¡Por favor, por favor por favoooor!

Lauren rodó los ojos divertida antes de decir:

-Está bien.

-¡Yey!- Aplaudí.- Vamos a que te cambies.- Tomé su mano y la conducí adentro de su casa.

-No, no. Espera.- Me frenó.

-¿Qué pasa?

-Quédate esperando aquí: debe ser una sorpresa.

-E e está bien.

Lauren plantó un beso corto en mis labios.

-No tardo.- Dijo y subió corriendo.

Me quedé parada a mitad de su sala sin saber qué hacer para matar el tiempo. Al parecer sus padres no estaban en la casa, así que me tomé la confianza de sentarme en el sillón y prender el televisor. Para mi suerte estaban pasando un buen capítulo de Friends.

Dos capítulos más habían pasado cuando escuché a Lauren bajando por las escaleras. Me preparé mentalmente.

Lauren traía puesto vestido negro largo con tirantes delgados. El color negro le quedaba perfecto, y con su piel blanca parecía vampiro. Ah, dejaría totalmente que me mordiera. Traía poco maquillaje: algo de delineador, base y labial rojo. Se veía demasiado preciosa.
-Dime ¿qué hice para tenerte?- Pregunte, mientras le tocaba con delicadeza las clavículas.