Hoy es el día de san valentín y un chico se esta armando de valor para expresar sus sentimientos, esta sudando a cantaros y sus manos tiemblan demasiado.
-Hola ¿como estas?.... no así no, piensa, este es un día que debo de aprovechar al máximo-murmuro Fernando mientras apretaba sus puños temblorosos.
El tiempo era perfecto, el viento soplaba y era cálido como el abrazo de una madre, las aves cantaban, pasaban una que otra persona por aquel lugar, no podría ser un día mas hermoso.
-Dios, esto es imposible mi mente no deja de dar vueltas y mis tontas manos... odio que tiemblen así-murmuro de nuevo Fernando ocultando su rostro lleno de furia.
El viento cambio repentinamente, su calidez disminuyo, algo malo estaba por suceder.
-No seas tan gallina y dile lo que sientes, total y al cabo ella no te corresponderá-dijo una chica que se encontraba detrás de Fernando.
El chico al oír eso volteo lleno de miedo e intriga.
-¿Q..quien e..eres t...tu?-Tartamudeo Fernando lleno de miedo al mirar hacia atrás pues lo que veía era una chica de cabello negro con una blusa roja y unos pantalones cortos que llevaba puesto en sus pies unas hermosas sandalias rosas.
El viento se detuvo, el ambiente se sentía incomodo.
-Oh, perdón por no presentarme, soy la diosa encargada del destino, puedes llamarme Desi y es un placer conocerte-dijo Desi mientras golpeaba suavemente la cabeza de Fernando.
Al saber tal cosa Fernando quedo impactado, pero aun así pensaba que eso era una mentira y no tardo en volver a la normalidad.
-Muy buena broma pero soy demasiado inteligente para caer en eso-dijo Fernando mientras sonreía temblorosamente.
Desi lo miro fijamente y se comenzó a reír.
-No me crees, pues te lo demostrare-dijo Desi mientras acercaba su cara al rostro de Fernando.
En ese mismo instante la auto-proclamada diosa del destino beso a Fernando.
-Eh uh ah-balbuceo Fernando mientras se sonrojaba.
De tal sorpresa Fernando bajo la cabeza y se quedo así.
-Levanta la cabeza, si no lo haces no podrás ver mi poder de diosa-dijo Desi mientras ponía su mano en el mentón de Fernando.
Fernando un poco tranquilo levanto la cabeza.
-¿Q..que esta pasando? todas las personas que veo tiene un hilo rojo en sus meñiques-dijo Fernando sorprendido por lo que sus ojos miraban.
En ese momento se pellizco con fuerza en todas partes, pues el no creía que lo que le estaba sucediendo fuera realidad.
-Ahora si me crees lo que te digo humano-dijo Desi en tono burlón mientras se sentaba en una banca cercana y apuntaba en dirección a Fernando.
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Fastidioso destino
Romantiek¿Alguna vez has escuchado sobre el hilo rojo del destino? Bueno es algo que une a todas las personas, ese hilo se puede estirar, doblar o incluso torcer pero nunca se romperá. En esta historia veremos como un chico se enfrenta al destino para poder...
