Mia y solo mia

Capitulo XII

  -¿Colton - Miré su ancha espalda fijamente mientras mi mente procesaba el hecho de que estuviera delante mía, vestido con unos pantalones sueltos y una camiseta mojada por el sudor  que marcaba cada curva de su pecho. Se dio la vuelta lentamente, escaneándome de arriba a bajo. No pude evitar echarme un vistazo también. Llevaba una sencilla camiseta de tirantes gris y unos pantalones cortos de deporte. No iba vestida para impresionar. Iba vestida para hacer deporte. 

Tras evaluarme a mi misma, y después de que Colton lo hiciera, conecté mis ojos con los suyos. Me miraba con sorpresa e ira, por lo que no pude evitar empequeñecerme ante su mirada. Mi acción hizo que todo rastro de ira desapareciera de sus verdes ojos. 

Se acercó  con paso lento y cuando llegó a mi murmuró mi nombre mientras me daba un suave beso en la mejilla.

-¿Que haces aquí?- Le pregunté al tiempo que me sonrojaba por el tacto de sus labios sobre mi piel. Puso un poco de distancia entre nosotros, enarcando una ceja. Ojala yo pudiera enarcar una ceja. Solté un suspiro en mi mente por eso.

-Quemar energía. Y tu, ¿que haces? ¿Entrenarte para poder levantar el peso más pesado? -Le dirigí una mala mirada, aunque por dentro me reía, ya que sabía que tenía razón. No era lo que se decía la chica mas fuerte, pero oye, si me pasaba algo, siempre tendría piernas para correr. O un gas pimienta en el bolso. Realmente, también apesto corriendo.

-Estoy empezando, no puedes pretender que me convierta en Hulk de un día para otro.

-Nunca dije que lo pretendiera. Ahora, si me disculpas, tengo asuntos pendientes que resolver -Me guiñó un ojo mientras se daba la vuelta y se encaminaba a los vestuarios, tronándose los nudillos. Lo seguí con los ojos hasta que desapareció de mi campo de visión. En cuanto lo hice, salí de mi ensimismamiento y miré la hora, decidiendo que ya era hora de ponerse en marcha para volver a casa. 

Recogí del suelo el móvil y la botella de agua. Con paso lento, me dirigí hacia los vestuarios femeninos, mientras revisaba las nuevas notificaciones de mi teléfono. Volvía a tener un mensaje de un número desconocido. Era el mismo número que me escribió días atrás.

   Flashback :

        

               Desconocido: Estoy deseando verte otra vez. La ultima vez que te vi estabas preciosa Y, se que tu también quieres verme, soy irresistible. Ten un buen domingo guapa, nos veremos                      pronto ;).

        Me quedé sorprendida por el mensaje. Nunca había recibido uno de este tipo. Le escribí un simple: ¿Quien eres?.

   Fin Flashback.

Miré el mensaje en mi bandeja de entrada, y pinché en el con curiosidad.

  Desconocido: Jo :'(. Me has olvidado. Yo que pensaba que rescatar a chicas con amigas borrachas unía a la gente.

Una sonrisa se formó en mi cara al tiempo que pensaba en una respuesta. No sabía como Dylan había conseguido mi número de teléfono.

  

    Yo: La unión entre dos personas se forma cuando intercambian números de teléfono. No cuando los consiguen clandestinamente. Acosador :P

    Dylan:  Clandestinamente o no, ahora tengo tu número de teléfono ;)

     Yo: Llamaré a la policia. Acosador con contactos clandestinos.

     Dylan: No me delates. ¿Como podremos ser amigos si estoy en la carcel?

     Yo: Pues no seremos amigos