Mia y solo mia

Capítulo VII

-Preciosa, ¿sabes que espiar no está bien visto?

Me sobresalté al escuchar aquella voz tan cerca de mi oido, susurrandome. Giré con rapidez la cara y rocé mi nariz contra la del desconocido. En ese momento la imagen de Colton apareció en mi mente, pero la deseché con rapidez, no quería que me arruinara la noche. Me había prometido a mi misma no pensar en él, quería divertirme y no hiba a permitir que su pensamiento me estropeara mi plan.

En ese momento el desconocido me miraba con curiosidad. Estaba muy cerca de mi, lo suficientemente cerca para que pudiera verme reflejada en sus ojos. Di dos pasos atrás, poniendo entre nosotros una distancia produncial. Lo miré con detenimiento, y el hizo lo mismo, nos evaluamos con la mirada. El desconocido era un chico, más alto que yo, seguramente mediría 1,75m (5,74 pies). Tenía que mirar hacia arriba, yo era mucho más bajita que él. Tenía el pelo rubio oscuro y ojos negros. Iba vestido con unos pantalones negros, que se ceñian a sus caderas y una camiseta roja que marcaba susdefinidos brazos.

- Y.. ¿Cómo se llama la mirona? - Me preguntó con un brillo de diversión en los ojos. 

-Lia, ¿y tu? -Le contesté desconfiada. 

-¿Por qué les estabas espiando, mirona? -Fruncí el ceño. No era una mirona, ni siquieras les estaba mirando, estaba en mi mundo, y no tenía porque darle explicaciones a este tipo. Le miré fijamente a los ojos mientras le mandaba una mirada fulminante, a lo que él me respondió con una sonrisa que dejaba ver sus dientes blancos. Le divertía que me enfadara. 

- No has contestado a mi pregunta, ¿cómo te llamas? - Le demandé. 

-Lo siento, preciosa, pero mi madre no me deja hablar con extraños. - Se esbozó en su rostro una sonrisa de oreja a oreja. No iba a ser su diversión aquella noche. Me di la vuelta y empecé a caminar de vuelta a la casa. No sabía quien era, ni siquiera le conocía, pero ya me sacaba de quicio. Sé que podía parecer que estaba mirando a esa pareja mientras se daban el lote, pero no era el caso. Y él no era nadie para interrumpir mis pensamientos y pedirme explicaciones, y encima vacilandome de esa forma. 

Entré en la casa cabreada y busqué por las habitaciones a Sara, perfiero no contar lo que vi en ellas. No sabía la de cosas que se podían hacer con una escobilla de baño. Cuando por fin la encontré estaba en la cocina, bebiendo un líquido azul de un vaso que le acababa de dar un chico con tatuajes en el cuello, en cuanto me vio se tiró a mis brazos y me abrazó con fuerza.

- Lliaaaa - Me dijo mientras se reía. - ¿Quee tal te lo estaaas pasando? Yo geniaal. Saam, me ha hechado un polvo maagnificco en eel frigoríifico. Auunque no estooy segura de si era éel - Pusó una mueca de confusión, pero en seguida se recompuso y sonrió con felicidad. 

-Sara, se suponía que no ibas a beber 

-Erees una a-a-aburrida, venga vamos a bailaar - Me cogió del brazo y me arrastró hacia la pista de baile mientras soltaba un "'¡Yujú! " entrecortado. Dios, no me quería ni imaginar cuantas copas llevaba ya. Se empezó a mover por la pista al ritmo de la canción mientras lo chicos a su alrededor la miraban y le soltaban piropos. Uno de sus admiradores se le acercó y empezó a mover las caderas con lentitud contra su culo, en cuanto su cerebro procesó que era lo que el chico estaba haciendo, empezó a restregarse contra el cuerpo de él mientras bajaba con lentitud, moviendo las caderas al mismo tiempo que él. Una multitud empezó a rodearlos mientras gritaban obscenidades. Pronto otro chico se unió al baile porno que habían montado y este se puso delante de Sara. El chico de atras fue descendiendo las manos poco a poco sobre su cuerpo, y en cuanto vi a donde querían llegar me metí entre la multitud y saqué a Sara del brazo, asiandola fuertemente. Me abrí entre los cuerpos con dificultad mientras oía a los chicos protestar y a la multitud abucheandome. Salimos a la calle, donde por fin pudo respirar algo de aire limpio. 

-Liaaa, eres muuy mala amiga, estooy seguraa que hub-biera tenido una bbuena corrrrida con éel- Me dijo mientras me miraba con cara molesta

-Me importa una mierda lo que hubieras tenido o no, Sara. Creeme que si hubiera dejado que pasara lo que estaba a punto de pasar mañana por la mañana el video de ti montandotelo con dos tíos delante de un montón de personas estaría circulando por toda la red. Si evitar tu dolor es de ser una mala amiga, soy la peor amiga del mundo.

-Eeres una exager... -Se dobló por la mitad mientras vomitaba en el suelo, manchando sus zapatos. Me puse detrás suya mientras le sujetaba el pelo, y la llevé hacia una esquina, para que siguiera vomitando allí. Cerré fuertemente los ojos y aguenté la respiración en cuanto me empezaron a entrar arcadas.

Cuando acabó de vomitar la llevé hacia el bordillo de la acera y la senté allí mientras yo me sentaba a su lado. Sara se apoyó en mi. Saqué mi movil del bolsillo de la chaqueta y me disponía a llamar a un taxi cuando un coche paró delante nuestra.

- ¡Hey mirona! ¿Necesitas ayuda? - Genial, tenía que ser él

- No gracias, ya me las puedo apañar yo sola.

- Preciosa, si piensas llamar a un taxi para que os lleve a casa, déjame hacerte saber que todo el mundo está teniendo tu idea, por lo que no hay taxis ahora mismo. Y por no hablar del hecho de que sois menores, por lo que si os pilla la policía no quiero ni imaginarme de lo que pasará cuando vea que estais borrachas .

-Yo no estoy borracha - Dije mientras me levantaba. En cuanto lo hice, Sara cayó al suelo como saco de patatas.

-Me da que tu amiga si que lo está - Bajó del coche y abrió la puerta trasera- Anda subid, os llevo a vuestra casa.

- ¿Como nos vas a llevar? Eres un desconocido, y, mi madre dice que no hable ni me monte en el coche de desconocidos - Le dije, devolviendole las palabras que él me había dicho anteriormente.

-Creeme mirona, hay peor gente que yo, venga, subid - Le miré fijamente, evaluándole otra vez. No tenía alternativa, tenía que volver a casa y a esta hora no habían taxis, todos estaban llenos. Señor, espero que no equivocarme al confiar en este chico. Le asentí con la cabeza, cogió a Sara en brazos y la cargó en el asiento de atrás. Yo me puse detrás con ella y recosté su cabeza sobre mis piernas. Le di la dirección al desconocido, la introdujo en el GPS de su teléfono y arrancó el coche. Pasamos todo el trayecto hasta que llegamos a mi casa en silencio, salvo por lo gemidos de dolor de Sara, en cuanto llegamos la bajé del coche y se recargó sobre mi hombro. El desconocido bajó la ventanilla. En cuanto lo hizo me acerqué 

-Gracias. Por ayudarnos

-No hay de qué. Vete, tus padres tienen que estar preocupados

-Gracias, en serio... - Cuando estaba a punto de arrancar le grité- ¡Eh! Todaví no me has dicho tu nombre

Me guió un ojo mientras me sonreía pícaramente: -Dylan - Chilló mientras aceleraba y salía de mi calle con su coche.

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-Lia, me encuentro mal

-Shhhhh, calla que vas a desperar a mi madre - La desvestí y la tumbé en mi cama. Yo hice lo mismo, fui al cuarto de baño, me desmaqullé e hice lo mismo con Sara, aunque con ella fue mas dificil, tuve que sentarme a horcajadas encima de ella y hacerlo con toallitas desmaquillantes. Fui al baño, hice mis necesidades y en cuanto volví vi a Sara incorporada en la cama

-Lia, mis padres....

-Tranquila - dije interrumpiendola- Ya les he avisado. Les mandé un mensaje cuando estábamos en el coche.

Gracias Lia - Dijo mientras bostezaba y se tumbaba en mi cama- Eres una buena amiga.

Me tumbé a su lado y no tuve que esperar mucho cuando Morfeo me envolvió en sus cálidos brazos.

NOTA DE LA AUTORA:

Mil y una gracias por todos vuestros comentarios, vuestros votos y vuestras leídas. SUBEN COMO LA ESPUMA!!!

Subiré capítulo el Fin de semana ;)

Y.... Qué pensais de Dylan?? Es bueno? Es malo? Un posible sustituto de Colton?

Adiós chicas :)))))))))))))))))))