Empleada de un Playboy © (1)

CAPÍTULO 20

Esa misma tarde quedé con Niall para explicarle todo lo que pasó con James y Kyle.

Aun seguía enfadada con Kyle, me besó sin que yo pudiese hacer nada.

El muy imbécil me las pagará, ¿pero como?

¿Dándole celos?
No, él no está loco por mí.

¿Pegándole?
No, él es mas fuerte que yo.

Estaba tan sumida en mis pensamientos que no me percaté de que mi mejor amigo me estaba mirando con cara de confusión, como si yo estuviese loca.

Estábamos en una heladería, comiéndonos un helado y hablando de cosas.

-Entonces, ¿esta tarde quieres que vayamos al cine a ver una película?-preguntó Niall comiéndose una cucharada de helado de chocolate.

Asentí con la cabeza mientras dirigía mi mirada hacía la ventana y pensar en un plan de venganza contra Kyle.

-¿Cuál película vamos a ver?-volvió a preguntar.

Me encogí de hombros como respuesta.

-¿Estás bien?

Le miré y asentí...

-¡Mierda!-grité por lo bajo mientras me tapaba con la camisa.

-¿Qué pasa?

-Está Kyle.

-¿Dónde?

-Allí-dije y señalé hacía la puerta donde había entrado Kyle.

-¿Y?

-¿Como que "y"? Él y yo estamos...bueno estoy enfadada con él.

-¿Porqué?

-Porque me besó, y no me dejó hacer nada y ahora estoy pensando un plan para vengarme.

-¿Y eso era lo que te ocurría hacia unos minutos?

-Sí, oh mierda viene hacia aqui.

Exactamente como lo había dicho Kyle venía hacia aquí con una de sus sonrisas que le hacían sexy y a la vez un idiota.

-¿Qué tal?-preguntó sentándose en la silla enfrente mío.

-¿Alguien te ha dicho que te sientes?-le pregunté.

-Si ha sido la silla que me ha dicho "siéntate, siéntate".

-¿Crees que me vas a hacer gracia con tus tonterías?

-Eeh, ¿si?

Lo miré, y luego dirigí mi mirada a mi amigo pero este pareció no entender lo que decía mi mirada y se fue.

-Bueno, yo os dejaré solos, ya nos vemos Karen.

-Por fin solos-dijo con una sonrisa.

-Creo que ayer te dejé bien claro que no quiero hablar contigo-dije y me levanté para irme.

Iba a cojer mi bolso y el muy imbécil me estaba mirando de arriba a abajo.

Hasta que en mi cabeza se encendió una bombilla.

¡¡Ya está!! ¡Claro! Sabía la venganza perfecta para Kyle.

Me fui de allí con la cabeza bien alta.

(...)

Estaba sentada en el sofá, viendo una seria de dibujos animados.

Minutos antes había llegado a casa y mi hermano no estaba, se suponía que se había ido a jugar al fútbol o algo así.