Empleada de un Playboy © (1)

CAPÍTULO 1

«Todo lo que bien empieza mal acaba»
Es una de las frases que solía decir mi padre cuando nos veía a mí o a mi hermano mal.

Todavía lo echo de menos, y ahora más ya que se acerca mi dieciséis cumpleaños.

Mañana será el mejor día de tu vida, dice mi hermano.

"Si estuvieran mamá y papá si que sería un buen día" pensé mientras derramaba unas pocas lágrimas que iban cayendo sobre mi mejilla.

Si fuera un día normal me despertaría a las 12:00, pero hoy era un día diferente ya que era mi cumpleaños, por eso me desperté a la 13:00.

De normal me solía despertar mi hermano, pero esta vez no.

-Buenos días - dije entrando en la cocina.

-Buenos días, preciosa - dijo Cody besándome en la frente - Ah y por cierto... ¡FELIZ CUMPLEAÑOS ENANA! - me gritó.

-¡Pero no grites imbécil que estoy a tu lado! - grité aún más fuerte.

-¿Hoy que vas a hacer para que tu cumpleaños sea inolvidable?

-Nada

-¿Que? Karen Hamilton, como yo me llamo Cody Hamilton te juro que hoy será el mejor día de tu vida.

-No creo, hoy hace 10 años desde que papá y mamá murieron, no quiero ninguna fiesta ni nada - dije y empecé a desayunar.

-Me da igual así que vístete que nos vamos a por tu regalo de cumpleaños.

-¡No quiero! - dije y me crucé de brazos.

-¡Si quieres! - dijo con el mismo tono haciendo lo mismo que yo.

Gruñí y me fui a mi habitación a vestirme.

Cogí un pantalón corto azul, un top blanco que me llegaba por la cintura y unas zapatillas andy Z turquesas.

Bajé y mi hermano ya estaba en la puerta con las llaves de su coche (que por cierto era un ford rojo).

-¿Estas lista? - preguntó abriendo la puerta como todo un caballero (me sorprende que aún no tenga novia).

-Sí.

Salí y fui hasta el coche.

En 20 minutos llegamos, en todo el trayecto estuve mirando por la ventana mientras que Cody conducía callado. Me bajé del coche y él hizo lo mismo.

-No hace falta que me compres nada, con lo que te pido cada día ya es suficiente - dije agachando la cabeza.

-De eso nada hermanita, hoy es tu día y te mereces el mejor regalo. Además estos días estuve trabajando mucho para comprarte lo que hace días me estuviste pidiendo constantemente.

Subimos al segundo piso y entramos en una tienda de móviles. Vi uno que me encantó, era de un dorado no muy grande pero tampoco muy pequeño, suficiente para mí. No quería pasarme comprando un móvil muy caro, ya que lo pagaba mi hermano.

-Me gusta ese - dije señalándolo.

-Perdone, ¿Cuánto cuesta? - preguntó mi hermano a una dependienta.

-Este es el último modelo que hemos recibido, es un iPhone dorado, cuesta 899€.

-¿Quieres este? - me preguntó mi hermano.

-Mm... sí - dije dubitativa. Esperando que no sea demasiado caro como para que mi hermano no lo pudiese pagar.

-Este - le dijo Cody a la dependienta.

La chica asintió, se acercó a la vitrina en donde estaba expuesto y cogió de la banda de abajo una caja donde se veía el dibujo del modelo del móvil. Cerró la vitrina y se dirigió al mostrador, nosotros la seguimos.