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Después de cuatro horas de sueño, una hora de estar tumbada en la cama y otra hora hablando por mensajes con Kate, que resulta acabó debajo de la barra del bar junto al chico aquel....me sentía mejor.

Claramente me iba a saltar el entrenamiento, por dos razones:

Teppei

Kagami

Todavía me cuesta asimilar que ayer los pillé in fraganti. Me pongo roja de solo pensarlo, no los juzgo, son sus cosas por decir así, pero nunca me lo esperé. Mi hermano siempre está con las revistas de chicas tetonas y Kagami... Ni idea lo que hace él.

Pero nunca noté en esos dos algo raro. De hecho mis sentidos no los ven como gays.

Suspiré y dejé el móvil sobre mi estómago.

Por su reacción supondría que nadie está enterado de esto. Que asco, tienen que vivir en secreto y fingir que se lleven muy mal...

Me siento de repente ignorando un pequeño mareo. ¿Y si discuten continuamente para no llamar la atención? Tengo que ir volver a casa de todos modos, Kate me esta esperando ahí para que nos matamos con helado y películas de miedo.

Me estiré y salté de la camilla antes de ponerme con la misión 1: Escape del colegio sin ser pillada por los chicos de Basket.

Abrí la puerta de la enfermería y saqué mi cabeza para inspeccionar la zona mientras en mi interior tartamudeaba la canción de James Bond. Adoro esa peli desde que la vi en mi cumple número 14 en el internado con las chicas.

Salí y pegada a la pared avancé por el pasillo ignorando las miradas que me hechaban los alumnos. Quería decirles un par de cosas bonitas pero estaba demasiado concentrada en mi misión.

Me paré en la esquina y heché un vistazo en todas direcciones. Vi el objetivo: la puerta de la salida principal.

Perfecto. Eran más o menos 8 metros y si seria lo suficientemente rápida nadie se daría cuenta de mi huida.

Idiota, te miran como a una loca, claro que se darían cuenta.

Cuando estaba a punto de hechar a correr una mano se posó en mi hombro.

-Hey ¿Que haces?

-Ahhhh!!!!! -chillé saltando casi saliendo de mi piel.

Cuando me di la vuelta vi al idiota de Kuroko con un batido todo tranquilo.

Jadeo con una mano en el pecho.

Misión fallida, repito misión fallida manden refuerzos, repito misión fallida.

-¿Que quieres Kuroko?-suspiro.

El me observa-El gimnasio esta en otra dirección, además Kagami te busca.

Fuck!!! El enemigo tiene refuerzos!!!!

Me rasque la nuca-Si bueno, no me encuentro muy bien todavía...-a lo lejos vi a Kagami corriendo hacia nosotros-Así que adiós! -dije a toda prisa y hecho a correr lo más rápido que pude.

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Cuando volví al piso me encontré con Daiki en el salón acostado en el sofá con pintas horribles.

Corrí hacia el-Oh por dios¿Estás bien?¿Tienes fiebre... ?-toqué su frente pero estaba normal.

Daiki cogió mi mano y la apartó-Creí que no me ibas a hablar y ni siquiera dirigirme la palabra -murmuró.

Lo miré sin entender, y cuando lo hice le di el mejor puño que pude en el hombro-Que Pendejo eres por dios. Daiki, soy tu hermana ¿Por qué no me lo dijiste antes?

El sube los hombros un poco antes de sentarse-Ya sabes, todo eso está mal visto lo de homosexualidad...

Pongo los ojos en blanco-¿Y qué más da?-parece sorprendido-Lo importante es ser tu mismo. -me pongo derecha otra vez-¿Y bien?¿Qué te apetece para comer? Así hablamos más sobre el tema.

SisterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora