Hayley
Mi nombre es Hayley Sparcks. En teoría soy una chica mala. Yo quiero ser una chica mala. Ser mala, ser cruel... Aun que creo que ya lo soy. Tengo 17 años. Hoy es el primer día de clases. Estoy en otro nuevo instituto. Me han expulsado ya de 3 institutos en 2 años.
Soy hija única. Mis padres se divorciaron cuando yo tenía apenas 5 años, desde entonces llevo viendo a mi madre con uno y con otro hombre. Desde que tengo 5 años no he vuelto a ver a mi padre.
Mi madre nunca se buscó a los mejores hombres, empezando por mi padre. Mi padre era un drogata del que se enamoró mi madre a los 13 años, él tenía 17. A los 14 mi madre se quedó embarazada de él. A punto de cumplir 15, me tuvo a mi. Mi abuelo materno, en paz descanse, obligó a mi padre a casarse con mi madre y así lo hizo.
Después de 3 años casados, ni se aguantaban. Mi madre odiaba que mi padre fumara en casa. Crecí viendo a mi padre meterse mas droga en el cuerpo que Bob Marley, creo que ahora él estará como Bob. Después de 2 años, se separaron. Y desde entonces he podido observar lo poco que se valora una mujer.
He conocido a 7 hombres con los que ha vivido mi madre en casa. Por que si no, hubiera conocido a muchos mas, puede que al doble. Pero por lo menos mi madre no me mostraba a todos sus líos. Me dejaba con mi tía Jannis, quien era igual que mi madre y se iba con cada engendro...
Encima de todo, vivimos en una casa alejada de la ciudad, lo que me ha ayudado a ir a diferentes institutos de otros pueblos, digamos que estamos en una casa entre pueblos, no es de uno ni de otro, pero la comparten. Mi madre se buscó una casa alejada del pueblo para que mi padre no comprara mierda. ¿Lo consiguió? No. Pero por lo menos le costaba conseguir más hombres al estar tan lejos.
Todos los novios de mamá, eran drogadictos, camellos, narcos, sicarios, incluso tuvo uno que otro que era mula. Gracias a ellos, pude conseguir las peores compañías de los 3 pueblos en los que han estado mis institutos.
Yo antes era una pequeña niña inocente.Era una chica normal. Al siempre ver a mi madre ocupada, me hice solitaria. No quería ni siquiera hablar con nadie, ya simplemente pasaba las clases, estudiaba, solo para volver a mi habitación a llorar. Mi madre nunca se preocupó por mi. Por esa razón no tenía amigos. Mi madre creía que cada vez que le hablaba era para decirle que quería algo.
Bueno, hace dos años, dejé de ser la niña buena a ser, como soy ahora. La persona que me ayudó a cambiar, no de esta manera, pero quiso que cambiara, fue West. West es el hijo de Angelo, un narco y cómo no, siguió los mismos pasos que su padre. Angelo fue el novio que mas le duró a Yanette, mi madre. Después de que se separasen West y yo seguimos en contacto.
Hace tres años empecé a relacionarme mas con West, él va al instituto al que hoy tengo que asistir. West convenció a Yanette de darme una última oportunidad y no llevarme a una escuela militar. Desde que tuve 12 años estuve enamorada de West. Pero él me dijo que si quería ser mala, no debía enamórame y me desilusioné.
West conoce a mucha gente y él me ha presentado a toda esa gente, ya solo quedan los malotes de mi nuevo instituto. Son las 7 de la mañana. Ya voy saliendo. Entro a las 7:30 pero he quedado para vernos con West en la entrada del instituto.
A lo lejos diviso a West con un montón de chicos y una que otra chica. Todos están envueltos en tatuajes. West es alto, es rubio, por supuesto tiene mi edad, tiene un tatuaje enorme que viaja desde su pecho entero incluyendo la barriga y un poco mas abajo hasta su brazo derecho entero. El brazo izquierdo no tiene nada, es fácil reconocerlo. Ese gran tatuaje se lo hizo hace un año, yo lo vi hacérselo. Solo el y yo sabemos el significado.
Hoy yo me he puesto un crop top negro cubierto por una camiseta algo transparente blanca, un short negro no muy corto y claro, como siempre mis converse negras. Me maquillado solo poniendo mis ojos enteros de negro y los labios algo rojos oscuro. Mi pelo es rubio, aun que ahora mismo me he puesto un color temporal pelirrojo.
Me acerqué al grupo con el que estaba West fumando. Le toqué el hombro izquierdo a West para que me viera. El se giró para ver que malnacido le había tocado el hombro por la cara que puso. Al verme se le iluminaron los ojos. Me abrazó y me dió un beso en la mejilla. Me rodeó con su brazo de hombro a hombro y me mostró ante sus amigos.
-Hey gente, esta es Hayley, es mi mejor amiga.-Dijo West para que las 10 o más personas que estaban aquí me mirasen. Todos me miraron. La mayoría de los chicos me miraron con mirada perversa. West me había enseñado a no sonrojarme tan fácilmente, así que sólo un leve rubor se pasó por mis mejillas.
-Hey.-Simplemente dije con firmeza y desinterés. A todos, al parecer a todos les gustó mi forma desinteresada de ser y según West y el codazo con sonrisa que me dio estoy aprobada.
-Hey, joder ahora reunís tan temprano, que mierda.-Dijo una voz masculina. Oh que rudo que tiene sueño, nótese mi sarcasmo. Soltó un bostezo. Al ver como todos se estremecieron y West me apretó, me dió curiosidad ver quien era.
Me giré completamente, soltándome de West quien no se giró ni siquiera para mirar y así quedé en frente de aquel chico. Un chico con un montón de tatuajes. Tenía los brazos llenos de tatuajes, algunos, que parece que pasaban por debajo de su camiseta y llegaban al cuello. Sus ojos eran completamente negros, tenía el pelo algo castaño oscuro. Su mirada era fría. Sus brazos eran musculosos y el era muy alto.
Tengo que reconocer que a primera vista me intimidó. Después de mirarlo de arriba abajo quedé en sus oscuros ojos que me miraban fijamente. Su boca formaba un perfecta línea recta. No le hizo ninguna gracia por lo que se ve que yo lo mirase.
-¿Por qué me miras?-Me preguntó. ¿Y este? ¿Que se cree? No eres tan especial , ¿sabes? Que a los otros le tiemblen las piernas al verte no significa que a mi también. Eso pensé decirle.

ESTÁS LEYENDO
Ese Chico Cruel [HIATUS]
RomanceHayley Sparcks, ella jugó a ser una chica mala. No fue mala. Fué inocente ante Davis Werap. Y así encontró todo lo cruel e injusta que puede ser la vida. Descubrió que el amor es uno de los pecados que ella siempre esquivaba. Ella tenía que amarlo p...