Ese Chico Cruel [HIATUS]

17

Derissea

Me besó. Dios mío si lo hizo, creo que fue el mejor beso de mi vida, nunca nadie me había besado de esa manera, había sido increíble pero yo tenía novio...

<<-Vaya...-Dice Davis apartándose de mi.-La niñita buena no besa tan mal.

-¿Y qué esperabas?-Le digo orgullosa pero recuerdo a mi novio, pasó más tiempo al lado de Davis que con mi propio novio.

-No lo sé, pero yo quiero repetir...-Dice acercándose a mi. Lo apartó.

-Er... Tengo que irme a mi casa, hoy mi madre no me permitirá llegar tarde, así que...-Le mentí. Me miró a los ojos.

-Como quieras.-Me dice.

-Er... ¿Me acompañas?-Le preguntó mirándolo a los ojos con firmeza. Suspira.

-No, tengo cosas que hacer.-Me dice secamente. Un pinchazo fuerte siento en el corazón, la sangre me llega a las mejillas y me sonrojo, me muerdo el labio inferior con rabia.

No le digo nada. Me doy media vuelta y me voy. Eso es lo malo de Davis que sé que nunca me ha seguir o a decir lo que en realidad siente, al contrario Denis si, el me lo cuenta todo.

Me hubiera gustado que Davis, no fuera Davis, que su puto orgullo se lo pudiera comer y decirme lo que realmente siente o quiere por mi y si lo que realmente quiere es alejarse de mi pues...

No.

No estaría dispuesta a permitírmelo, eso no va conmigo, pero con él si y sé que si sigo con estos juegos saldré perjudicada.

Voy lentamente caminando a mi casa cuando escucho que una voz gruesa y espesa me llama por mi nombre, por un momento creí que es Davis yendo detrás de mí, pero al girarme veo a... Mi novio.

-Hey Derissea. Mi chica buena.-Me dice y me sonrojo. Se acerca a mí e intenta darme un beso pero lo aparto de mi lado. Me mira extrañado.-Hey, nena, ¿Tienes algo?

Me gustaría que fueras Davis. Me gustaría que fueras Davis. Me gustaría que fueras Davis. Me gustaría que fueras Davis. Me gustaría que fueras Davis. Me gustaría que fueras Davis. Me gustaría que fueras Davis. Me gustaría que fueras Davis. Me gustaría que fueras Davis. Me gustaría que fueras Davis. Me gustaría que fueras Davis. Me gustaría que fueras Davis. Me gustaría que fueras Davis. Me gustaría que fueras Davis. Me gustaría que fueras Davis. Me gustaría que fueras Davis. No paraba de pensar.

-Yo... Er... No, nada. Solo es que mi... Er... Hermano, ha vuelto a casa y puesto que mis padres no están en casa, yo... Er... Lo voy a recibir.-Le miento descaradamente. Hace un año que mi hermano mellizo nos abandonó por que odia a mi padre y no se llevan nada bien, hace dos semanas que no lo veo.

-¿Me estás mintiendo, nena?-Me pregunta incrédulo. Sabe perfectamente cuando miento. Pero no lo puedo negar más. Estoy enamorada de Davis. Quiero a Davis, ya no a mi novio, pero me da pena...

-N-No, bebe.-Le digo a regañadientes cogiendo su cara con mis manos pero él me aleja. Lo miro a los ojos. Me mira como nunca me había mirado a mi... Con rabia... No digo nada.

-Tu hermano... ¡¡Mentirosa!!-Me grita. La gente que va pasando por la calle se me queda mirando, pero se van rápido al ver a Denis cabreado.

No dije nada. Estaba acostumbrada a que él y Davis e incluso mi hermano reaccionara así conmigo. Creo que hasta mi hermano me odia, pero bueno...

-Mentirosa...-Dice Denis negando mirando al suelo, me mira, apartó la mira y se ríe amargamente. Pero no escucho más que unos pasos. Vuelvo la mirada y Denis ya no está. Frunzo el ceño.

Corro a la casa de Davis. Toco la puerta bruscamente y él abre, frustrado. Al verme su cara se llena de extrañeza pero hago caso omiso a eso. Me abalanzo sobre él. Nos besamos. Nuestras respiraciones chocan en un largo y lujurio beso cargado de pasión, un beso que nunca tuve con Denis. Me levanta y colocó mis piernas a los lados de su cadera, sin parar de besarnos.

Me lleva hasta su habitación sin hacer ruido por qué sabe que Jepherson y Saik ya están en la casa y nos puede ver y ellos no saben ni qué nos conocemos. Cierra la puerta sin tan siquiera poner el pestillo puesto que nos seguimos besando.

Me recuesta en su cama y se posiciona encima de mi. Me empieza a sacar la camiseta azul marino sin mangas que llevaba, yo le saco su camiseta negra y empiezo a ver unos pocos tatuajes que ya se ha hecho con 16 años. Me quita mis pantalones cortos vaqueros y lo apartó por un momento.

Esto no es lo que yo quiero en mi vida...

-Ya sé que eres virgen nena... Seré prudente, lo más que pueda.-Me dice jadeando. Trago saliva y asiento. El se quita los pantalones rotos negros que llevaba y me quita el sujetador, seguido por mis bragas y, bueno...

Dejamos que la pasión nos lleve a su límite más fantasioso...

Al día siguiente...

-Hey, levanta. Derissea.-Me llama Davis. Abro los ojos poco a poco. Me duele todo el cuerpo.-Date prisa, me voy con Saik y Jepherson va a traer a su nueva novia. Vas a tener diez minutos para vestirte e irte.-Me dice duramente. Asiento.

Salgo de la cama adolorida y miro el despertador. Son las 17:35. Mi madre me va a matar por no dormir en casa, tendré que llamar a Alayna a ver si me cubre diciendo que me quede a dormir a su casa. Bufé. Me empecé a vestir con la ropa que estaba esparcida por toda la habitación de Davis. Me visto y me voy.

¿Qué es lo que esperaba? ¿Una despedida con un beso y un "te quiero" por parte de Davis?

Mieeeeeerda. Se me había olvidado que hoy Denis da una fiesta. Tengo que salir corriendo de aquí.

Voy corriendo a la casa de Denis y veo que ya hay varias personas por ahí. Entro en su casa por qué la puerta está abierta para que la gente entre.

-Creía que no vendrías.-Me dice Denis. Lo miro y me sonrojo.-¿Por qué estás con la misma ropa que ayer?-Me pregunta frunciendo el ceño.

-Yo...-Empiezo. Pero empieza a entrar más gente. Denis me coge de la muñeca y me lleva a su habitación.

-Ya hablaremos de esto luego.-Me dice y me pasa un vestido negro con piedrecitas, un vestido gótico; unos zapatos de tacón negros y un collar precioso y una pulsera. Abro mucho los ojos. Denis lo compró para mí y yo...

Me abalanzo hacia Denis y lo beso, nos besamos apasionadamente y lo tiro a la cama. Me duele aún, pero quiero quitarme a Davis de la cabeza, Denis es mi novio. Davis es un chico roto que no me merece.

Me subo a horcajadas encima de Denis sacándole su camiseta.

-¿Tú no eras virgen, nena?-Me pregunta. Por un momento me pongo nerviosa.

-Quiero ser tuya en todas las formas, llevo meses esperando este momento.-Le miento. A él se le iluminan los ojos.

Luego de unas horas...

Estaba ya sentada en las piernas de Denis. Me duele ahí... Mucho. Pero no digo nada, ya van a ser las mueve de la noche.

Saludo a todos los amigos de Denis. Estoy en las piernas de Denis que está sentado en un sofá individual con todos sus amigos en varios sofás, sillas o bailando y bebiendo o en habitaciones de la casa de Denis.

De pronto, Saik entra a la casa de Denis, pero no sólo... Con el Davis, quien me mira furioso.>>