never stop believing.

III

Antes 3/?

Elsa

Me había colocado ya los guantes, y de hecho, justo cuando me los coloque, podía casi sentir la calidez de Anna en mis manos, como si pudiera tocarla. Mis padres se habían marchado ya desde hace unos minutos porque iban a recibir una visita muy importante de unas islas para arreglar unos asuntos oficiales entre las dos coronas.

Varios recuerdos llenaron mi mente, sobre Anna, pero fueron interrumpidos por unos susurros...

Probablemente alguien más estaba en el pasillo y estaban hablando.

O tal vez Anna, atrás de mi puerta.
Había algunas veces, cuando Anna era más pequeña, que planeaba cómo acercarse a mí con un muñeco suyo que le había llamado Olaf, probablemente no todos los recuerdos sobre mis poderes se borraron completamente, pero tenía que alejarla, por su bienestar.

No podía permitirme que pasara lo que pasó cuando éramos pequeñas.
No podía arriesgarme a eso.

Jack

¿En qué pensará?
Siempre se ve tan concentrada en todo lo que hace y piensa, con movimientos y gestos elegantes a su andar de un lado a otro en su habitación.

Ya intenté hablar con ella hace una hora, mientras estaba con su madre, con quien estaba discutiendo.

-Elsa, tranquila, no tienes porque alterarte.- decía, simulando como si me recordará y en verdad me viera.

Estaba empezando a desesperarme. Quería dejar de ser invisible para ella.

Yo conocía a Elsa desde antes, mucho antes, pero me ausente por algunas ocaciones, y la última vez me ausente por mucho tiempo.
Esto hizo que me olvidara, conllevando que no me pudiera ver. Y eso era un gran problema.

Agh.

Necesitaba que ella empezara a creer en mí, para así poder verme y jugar como antes.

Espero, al menos, que el collar sirva.

Flashback

Me hallaba en el cuarto de Elsa, cerca del techo, volando desde arriba, observándola.

Mi ser, apuntó de estallar de alegría, al ver el destello de sus ojos cuando vio el collar.
Cuando sus ojos destellaban, era de esos eventos que solo ves una o dos veces en la vida, increíble, indescriptible e inigualable. Y eso representaba Elsa.

De un momento a otro, tocaron la puerta de su habitación. Era su madre quien la llamaba, preocupada y preguntando si estaba bien, ya que había visto a Elsa romper un vidrio de su ventanal.

Elsa inmediatamente mintió.

Siguieron así mientras Elsa expresaba que no se preocupase por ella ya que ella creía que su madre tenía otros asuntos que atender al ser una reina. Indignada ésta, lo negó, e iba a mencionar a su hermana de Elsa cuando la última la interrumpió:

-¡Por favor, no la menciones!- gritó.

Todos en el cuarto, incluyéndome, nos quedamos paralizados. Elsa había hecho un semicírculo de hielo con picos, algo así como una barrera.

Oh no.

Entró el padre de Elsa, y en unos instantes, al ver la escena y el ventanal que antes Elsa. Vio por unos momentos y se salió de la habitación, preguntando antes que qué había pasado.

Yacía yo sorprendido e inmóvil ante todo lo que estaba viendo. Elsa había cambiado, y parecía que se limitaba a todo. Incluso de ella misma.

-Lo siento.- Dijo Elsa -Es sólo que la extraño.-

Bajé de donde estaba, en la esquina de su cuarto, dejando de ser un espectador de lo que estaba pasando, poniéndome ahora enfrente de ella. Tenía la cabeza gacha.

-Oh, Elsa. ¿Acaso ya no puedes jugar con Anna cómo antes?- pregunté, con la vaga esperanza de que me oyera.

Pude observar en su expresión que había percatado algo, volteando a ver a su madre.

La vaga esperanza se convirtió en una chispa de felicidad.

Acto seguido, fue a abrazarla, atravesándome, sintiendo nuevamente ese vacío repentino y recordándome que no podía verme, apagando esa chispa que antes mi esperanza había prendido.

Tal vez Elsa no podría verme de ahora en adelante.
Tal vez Elsa ya nunca más creería en mí.

Pensé que la solución que me había dado Tooth iba a funcionar.

Fin del flashback

Había acudido con Tooth días antes.
Le conté sobre mi situación, siendo ella una de las pocas personas con las que puedo entablar una conversación. Aparte de que es una de las muy limitadas personas que me pueden ver.

Según Tooth, tenía que darle algo muy significativo para mí de ella.
Algo que representará lo que Elsa significa para mí.

Eso era más que fácil, y fue así que creé un collar en forma de un copo de nieve.
Era algo muy especial, y que a Elsa le gustaría muchísimo.
Aunque, lamentablemente, era de hielo, no podía ser resistente, en cualquier momento podría caerse y romperse.

Entonces fue cuando acudí con Norte.

Le pedí que hiciera algo con este collar, que no podía entregárselo a Elsa en esas condiciones, enterándose así igualmente de mi situación.

Parecía alegre de lo que estaba ocurriendo. Sin negar mis peticiones, accedió al instante, diciéndome que era algo muy tierno de mí parte.

Me sonrojé sin decir alguna palabra.

Norte, al verme, soltó una carcajada seguida por una palmada dura en mi espalda como respuesta a mi reacción.

Posteriormente me dijo que regresará dos días después, lo cual hice, y cuando regresé, encontré un collar perfecto para Elsa y no podía esperar más a dárselo.

Me separé de mis pensamientos para voltear a ver donde estaba Elsa, y estaba donde la encontré, observando hacia afuera del ventanal.

Me pregunto en que pensara.

-Elsa, ¿nunca dejarás de ser una alma tan pensativa, querida?- preguntaba con una media sonrisa en mi cara.

Suspiré.

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Holi.
Éste capítulo intenté hacerlo lo más largo posible, o en una medida aceptable. Jajajaja.
Espero les esté gustando. ❤️
Gracias por leerlo. ❤️
De verdad. ❤️

-{C}