Why I?

Dinero

NADINE P.O.V.

-Si ya no hay más cosas serias que contar, les serviré un poco de chocolate caliente, ya empiezan los días de otoño- dijo la señora Denton poniéndose de pie y dirigiéndose hacia una olla en la estufa

-Ves, no fue ta dificil- susurró Heiko hacía mi, yo sonreí y negué con la cabeza

...

-Hasta luego señora Denton- exclamé mientras saliamos de su casa

-Espero verlos pronto- dijo sonriendo, cerró la puerta; Heiko rodeó mi cintura con su brazo mientras comenzabamos a andar en silencio; antes de pasar frente a su casa una camioneta subió por la rampa y se estacionó frente a su cochera, de ella salió su padre, al percatarse de nosotros, nos miró serio, Heiko me apretó más a él mientras sentía como se tensaba su brazo alrededor de mí

El señor cerró la puerta de el coche y fulminando a Heiko con la mirada entró a su casa dando un portazo, Heiko seguía serio aún mirando la puerta, cuando se giró hacía mí notó mi expresión preocupada, me dió un tierno beso en la frente y después besó mis labios

Cuando nos separamos abrió los ojos y me brindó una hermosa sonrisa diciendo que todo estaba bien, sonreí de vuelta y acaricié su mejilla

-No se que haría yo sin tí- susurró contra mi cabello mientras me abrazaba

-Ni yo- dije en voz baja

-Vamos a la playa- susurró alejándose un poco para ver mi rostro, -vamos a olvidarnos de todo por un rato- añadió acariciando mi mejilla, asentí y el sonrió

HEIKO P.O.V.

...

Ibamos en autobus, sentados uno junto al otro con nuestras manos entrelazadas, ella estaba del lado de la ventanilla y yo junto al pasillo. Recordé la primera vez que la había traído, en ese entonces ni siquiera eramos amigos, apenas y me hablaba, y ahora, eramos novios

-¿En qué piensas?- pregunté al verla tan seria mientras notaba como mordía el interior de su mejilla

-En la primera vez que viajamos a la playa- contestó en voz baja, sonreí

-También pensaba en eso- confesé soltando su mano y abrazándola por lo hombros, besé su cabello, -ni siquiera querías hablarme- dije sonriendo contra su cabello

-Era raro que alguien como tu me dirigiera la palabra- susurró

Al ver que estabamos cerca de nuestro destino, toqué el botón para pedir bajar, cuando el bus estuvo parado, tomé la mano de Nadine y bajamos. Caminamos tomados de la mano por el pequeño camino de terracería, cuando estuvimos frente a el mar, tomanos asiento en un tronco acostado sobre la arena

-¿Quieres nadar?- pregunté sin pensar

-¿Qué?- exclamó sorprendida, -el agua debe estar helada-

-Vamos- dije poniéndome de pie, me quité la chaqueta, y continué con todo lo demás, Nadine me miró confundida, -yo voy a cuidar de ti gatita-

-Es que yo... en realidad yo no... no se nadar- dijo en voz baja

-Para eso voy a estar ahí- dije tendiéndole la mano, ella dudó y no la tomó, pero comenzó a quitarse las gafas, seguidas por su sueter y todo lo demás; cuando estuvo en ropa interior se rodeó con sus brazos, me acerqué y froté sus brazos con mis manos, -ven- tomé su manos y la jalé hasta la orilla de playa

Poco a poco fuimos entrando, ella ahogo un grito en cuanto el agua toco sus pies, -esto es una locura- murmurò con voz temblorosa por el frío

Cuando el agua estuvo a la altura de sus hombros ya no avancé más, la abracé por la cintura y la pegué a mi cuerpo, y nos mantuvimos así abrazados por un largo tiempo

-Jamás me imaginé haciendo esto algun día- mumuró

-Me alegro ser el dueño de muchas de tus primeras veces-

Suspiró, -nos enfermaremos sabes, no trajimos con qué secarnos- dijo alejándose para mirarme a la cara

-Si, debí pensar en eso antes de correr hasta acá- dije sonriendo y apartando algunos mechones de cabello de su rostro

-¿Extrañas tu antiguo hogar?- preguntò mirándome a los ojos

-A veces- contesté suspirando

-¿Y lo que hacías?-

-En realidad... quizá solo las sensaciones- me encogí de hombros

-Extrañas... los encuentros... sexuales- murmuró y bajó la vista

-No- aseguré, -no los extrañaré mientras no sean contigo- susurré haciendo que ella me mirara, -quiero esperarte Nadine, después de ti no habrá más chicas, sólo tú-

-Pero cabe la posibilidad de que me vaya- susurró

-Y yo estaré aquí para cuando vuelvas-

-¿Me lo prometes?- tomé el dedo donde llevaba el anillo que le había obsequiado y lo besé

-Con mi corazón bebé- ella sonrió timida y se acercó para besar mi mejilla

...

-¿Qué quieres hacer mañana?- pregunté recargado en el umbral de la puerta del baño mientras ella se trenzaba el cabello frente a el espejo

Cuando habiamos vuelto, mi padre se habia ido de nuevo, así que no hubo ningún problema al entrar a casa

-¿Cómo qué?- preguntó mirándome mediante el reflejo

-No lo sé, quieres que te lleve a comer, o solo a caminar- contesté encogiéndome de hombros

-¿Puedo preguntarte algo?- dijo recargándo sus manos sobre el lavabo cuando terminò con su cabello

-Por supuesto pequeña- me acerqué a ella y la abracé por la cintura recargándo mi barbilla en su hombro

-Si no llevas una buena relación con tu padre, quiere decir que no te da dinero- fruncí el ceño, pero no le interrumpí, -entonces, ¿con que haz pagado todo lo que hemos hecho los últimos días?- sonreí y ella me miró confundida, tomé su mano y la arrastré hasta la cama para que se sentara

-La primera persona que conocí en las peleas fue a Joe, el fué quien después me introdujo a las carreras, -empecé a relatarle, -él es de los pocos que supo sobre mis dibujos, un día fué a mi casa y encontró unas pinturas al óleo que hice de pequeño en unas clases de arte; unos días después me habló de un concurso por internet, así que postulé mis cuadros al concurso- sonreí, -ganaron el tercer lugar, el premio fue de 5 000- fruncí el ceño, -lo invertí en algunas apuestas, hasta que junte una buena cantidad- reí negando con la cabeza

-¿Qué tanto?- preguntó

-Poco más de un millòn- susurré un poco avergonzado...