Todo a mi alrededor era pura oscuridad, mis ojos no podían ver nada por falta de luz, no se escuchaba nada, todo estaba en silencio, parecía que yo era la única que se encontraba en ese lugar.
Di una palmada y el eco de esta resonó por toda la estancia y así pude comprobar que mis oídos se encontraban en perfecto estado.
Caminé hacia ninguna parte, con pasos cortos pegados al suelo y con las manos al frente por si tropezaba. nada llenaba el lugar, ninguna presencia humana o sobrenatural, tampoco objetos inanimados, no había absolutamente nada salvo yo.
Me mantenía serena, con la mente abierta y buscando la lógica de mi encuentro.
Sin embargo, una luz que se encontraba al final del largo pasillo llamó mi atención, blanca como un resplandeciente vestido de novia.
Caminé hacia ella decidida, con la idea de traspasarla y pasar al segundo nivel de este juego de azar, estaba a punto de traspasar la puerta cuando esta se cerró en un golpe seco.
Estaba confusa, no sabia donde estaba ni que hacer, di media vuelta sobre mi misma y miré a mi alrededor. Oscuridad. Simplemente negro.
Otra puerta se abrió al lado contrario del que me encontraba, unos gritos eufóricos sonaban tras ella, gritos de ayuda, de una mujer.
Corrí hacia la puerta de color rojo que me llamaba a gritos, tropecé con algo y caí de rodillas al suelo, unos ruidos empezaron a salir del suelo y me di cuenta de que unas cadenas rodeaban mis muñecas, me arrastraban por el suelo evitando que llegara hacia la puerta roja, esa mujer necesitaba mi ayuda, los gritos continuaban y cada vez que luchaba y hacía fuerza contra el metal para poder llegar hacia mi destino, estás duplicaban su fuerza, me estaba acercando y las cadenas se hicieron más pesadas, y de repente los gritos de la mujer se reemplazaron por el de una niña.<<¡mamá! ¡mamá! ¡¿Qué te pasa mami?! ¡despierta! ¡mami!>>
Esa niña. Su voz. Sus suplicios. Esa niña era yo.
Caí de rodillas al suelo, las cadenas se partieron en pedazos dejando mis manos en libertad, los gritos continuaban, gritaban piedad, le suplicaban a ese maldito cerdo que la soltara.
Llevé mis dedos a mis oídos y empeze a cantar nuestra canción."I will not cry, I will not cry, even though evil is present our dry eyes will remain, your bloody knuckles will inform me of your pain. Fuck you my love."
"I will not cry, I will not cry, even though evil is present our dry eyes will remain, your bloody knuckles will inform me of your pain. Fuck you my love"
Canto la canción una y otra vez, hasta que los gritos dejan de sonar, no puedo, no puedo, no puedo.
<<¡Noo! ¡por favor, Sueltame! ¡Sueltame!
¡Mamá!>>Abrí mis ojos de sopetón, me senté sobre el colchón y llevé las manos a mi cabeza intentando frenar los recuerdos que bombardean mi mente.
Las lágrimas caen a cascadas de mis ojos y no lo puedo parar. Otra vez no. Otra vez no, por favor.El cerdo arrastra a la niña del brazo hacia la puerta, la niña llora y le súplica que la suelte, ella quiere estar con su madre.
No quiere dejarla sola.
"Por favor, quiero estar con mi mamá"- le pidió con lágrimas abordando de sus ojos.
El cerdo se dio la vuelta inmediatamente y una cachetada le soltó a la niña haciendo sonar por todo el rellano.
"Cállate, zorra."
La pobre infante siguió llorando, hasta cansarse, la obligó subirse a un coche en contra de su voluntad y desapareció calle abajo...Otra vez no, por favor.
Otra vez no...*******
Primer capítulo.
Corto, lo sé.
Prometo que el próximo será más largo.
No estoy muy convencida con el resultado, así que lo voy a dejar en vuestras opiniones.
Muchísimas gracias por leer y votar.
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Dominic [REESCRIBIENDO]
Romance❤️❤️GANADORA DEL PRIMER PUESTO EN NOVELA JUVENIL POR CONSTELLATIONS AWARDS 2017 ❤️❤️ -tranquila, todo va a salir bien. Me abrazaba con fuerza acariciando mi pelo suave y lentamente, pero no era eso lo que temía y él lo sabía, me daba miedo admitir q...