Dominic [REESCRIBIENDO]

3.1 El PUB

       Capítulo 3.1: EL PUB.

Un gorila me arrastró hacia los camerinos con fuerza, no me resistí.
Habían tres chicas esbeltas que me observaban con curiosidad y expectación.
Una de las chicas que aparentaba ser mayor que las demás, dio un paso adelante.

-soy Lili, ¿como te llamas linda?

La observé fijamente, sus ojos eran rasgados de un color violeta intenso y su cabello color azabache te dejaba en un estado de desconcierto que te permitía perderte en alguna galaxia solo por admirar esas capas de brillo natural que le daban las luces de las bombillas, su cara era redonda y sus mofletes eran de un tierno tamaño muy llamativo que le daban un Aura hogareño y maternal, así pude divisar que estaba siendo sincera y amable conmigo.
Y no dudé en devolverle el gesto, sonreír tristemente y esforzarme en lo que más me costaba superar.

-so... soy char.. charleen

Sus ojos se abrieron ligeramente y su boca se abrió en forma de una O gigante y no se lo pude negar, estaba hecha un asco y el simple hecho de no poder articular una jodida frase en condiciones, dejaba mucho que desear. Pero su reacción me conmovió, se acercó, tomó mis hombros y me abrazó tan fuerte que sentí mis huesos crujir bajo sus brazos.
Una mano comenzó a acariciar mi melena mientras que la otra bajaba a mi espalda y así estuvimos un buen rato, compadeciéndonos la una a la otra.
De repente, note como su pecho empezaba a hipar y en ese momento me di cuenta de que ambas estábamos sollozando y aunque nuestras razones no fueran las mismas nos apoyamos la una a la otra, sin conocernos de nada.
Para mi sorpresa dejó de llorar, se acomodó y secó sus lágrimas, entonces me observó, con sus pulgares secó las mías y en un susurro casi inaudible me prometió ayudarme a salir de este espantoso lugar, y yo le creí, le creí tanto como un niño cree en el ratoncito Pérez y en papá Noel.
Lili se giró miró a las otras dos chicas que nos miraban desoladas y se acercó a la rubia espléndida y le aventó un móvil.

- llama a Dom, dile que es urgente, que me debe una y que esté esta noche en la subasta de V, a las once y cuarto.

Volvió su cuerpo hacia mí y me abrazó de nuevo, consolándome, acariciando mi pelo, como hacía mamá en los días más tristes y devastadores, para tranquilizarme decirme que todo estaba bien y que pronto estaríamos solas apoyándonos la una a la otra.

-mi linda charleen, no volveremos a dejar que esto vuelva a pasar.

Estaba desconcertada, no sabía de que estaba hablando, ni de que me conocía pero lo cierto es que me iba a ayudar a salir de ese infierno, y con eso me bastaba para estar tranquila.
Cada vez iba recuperando más mi voz y a medida que me enfrentaba a la realidad mi garganta se esmeraba en soltar las palabras suficientes como para demostrar que había mejorado y eso, a decir verdad, me alegraba.
La última chica, una preciosa pelirroja se levantó de su asiento de manera precipitada y enérgica, dando a entender que quedaba una larga tarde por delante.

-pues, manos a la obra. Hay mucho que hacer.

                     ...........

Mi cara al enterarme que la subasta V era la venta de vírgenes era un poema aún no escrito, decir que era una mezcla entre horror, espanto, asombro, ganas de llorar, de vomitar y defecar al mismo tiempo... se quedaba corto.
Y no solo era eso, sino también la mayor posibilidad de que acabaras mal parada y por no llegar a decir muerta. El simple hecho de pensar en estar sola con un hombre me empezaba a faltar oxígeno y más si por obligación debiera mantener relaciones sexuales.

Estaba de pie, sobre una tarima, rodeada de esas tres hermosas y espléndidas chicas que entre ellas me querían dejar lo más impresionante posible.
La rubia atendía mi melena, la pelirroja mi maquillaje y finalmente la morena elegía el conjunto adecuado.
A decir verdad, las tres formaban un gran equipo, eran guapas, con talento y perfectas. Si no estuvieran aquí por obligación, todas tendrían un futuro digno y eso, me haría sentir orgullosa de lo valientes y guerreras que son.

Cerré los ojos y cuando noté que esas tres presencias se alejaban di por finalizado mi cambio de look, cuando me observé en el espejo casi lloro de alegría y de tristeza.
Estaba hermosa por el maquillaje y el hermoso peinado, pero el vestido, que dejaba ver más de lo que una persona pudiera imaginar me echaba para atrás, era obsceno, horrible y extremadamente inaceptable. Pero era una obligación y no podía rechistar.

Unas campanas comenzaron a sonar y un camarero se asomó por la puerta.

-chicas, ¿La señorita está lista?

Las tres asintieron rápidamente y me dirigieron una breve mirada antes de arrastrarme hacia la puerta.

-¿lista para salir ahí, frente a casi cincuenta hombres y seducir al único que te puede salvar?

Respiré muy hondo, ya podía sentir mi garganta cerrarse y mi mente empezar a nublarse.
Pero intenté relajarme, si ansiaba salir de aquí debía parar como sea estos ataques de ansiedad.

-eso.. cre-o.

                ✔️✔️✔️✔️✔️✔️
                     NOTA:

Hola chicas!
Bueno, este es el tercer capítulo.
Y estaréis pensando... "pero, ¿porque es tan corto? ¡Yo quiero más!"
Por esa misma razón eh dividido el capítulo en dos partes, esta, es claramente la primera parte pero el fin de semana subiré la segunda para que así mis lectoras amadas puedan disfrutar de un maravilloso fin de semana con Dominic.

¡¡¡Biennnnnnn!!!
¡Te queremos muchooooo!
(Gracias, gracias ♥️♥️)
😂😂 jajaja.

Bueno, como iba diciendo...
lo publicaré el fin de semana y será igual de largo que esté más o menos, a los dos días de subir la segunda parte los juntaré para que formen un capítulo sólo y así no liarme luego.

Si os gusta, siempre podéis votar y comentar. Me ayudaríais cinco galaxias y más.

Y si no os gusta, siempre podéis comentad vuestra opinión y vuestros consejos de mejora, siempre serán bien recibidos y al igual que los anteriores me ayudaríais un mundo.

BESOSSSSS ♥️♥️
Kiss kiss
Wildfield.