-¡Zoey! -escucho mi nombre.
Volteo, rompiendo por fin el contacto visual con el. Miro que es Kendall y viene hacia mí. Miro de nuevo al chico, el cual mira a Kendall con mucha atención. Agacho mi cabeza, es imposible que un chico como él se fije en mi, cuando a su alrededor hay chicas como Kendall, con pelo largo, bonitas y sobre todo sanas. Ella llega hasta mi.
-¿cómo estas Zoey? -me pregunta y le sonríe al chico.
-bien... hoy... hoy fui al hospital y esperamos que todo salga bien.
-me da mucho gusto. -me dice y toma mis manos.
El chico se da la vuelta y se aleja de nosotras.
-¿estabas con él? -me pregunta.
-no, el llego solo.
-es muy lindo. -me dice.
-¿no lo conoces?
-no, nunca lo había visto... oye Zoey.
-¿si?
-emmm, quería pedirte disculpas por lo que paso ayer con Melissa, nunca pensé que aria eso.
-¿qué? ¿burlarse de mi cabello?
-si eso.
-no te preocupes, estoy acostumbrada que les de gracia mi deterioro.
-en verdad te admiro, eres una chica muy fuerte Zoey. Aveces quisiera tener la fortaleza que tu tienes.
-no se llama fortaleza, se llama resignación, tendré que vivir lo que me queda de vida con esas cosas, no gano nada con acomplejarme. -ella sonríe.
-¿tienes celular?
-si, pero casi no lo uso.
-bueno te daré mi número, para que estemos en comunicación, en verdad me gustaría que tu y yo fuéramos amigas, claro si tu quieres. -me dice.
¿Quiero tener una amiga? Esta ha sido la conversación mas larga que he tenido con ella y me acaba de ganar. Claro que quiero, no puedo morirme sin saber que dejare a una amiga llorando.
-claro que si. -le digo.
-bueno, al rato te busco y te lo doy, porque no tengo donde apuntarlo.
-okey.
-bueno me voy, porque hace como media hora tenia que estar con mis padres y no he llegado. -le sonrió.
-no te preocupes Kendall James. -le digo y ella me sonríe.
-nos vemos luego Zoey Grey.
Ella se va, vuelvo a mirar hacia el lago y recuerdo al chico. Decido buscar a mis padres. Comienzo a caminar, miro a todos en busca de mis padres, cuando lo veo nuevamente. Esta con unos chicos tomándose una bebida. Me mira y rápidamente aparto la vista, sigo caminando hasta que me encuentro con mis padres.
-¿donde estabas? -me pregunta mi madre.
-con Kendall. -ella sonríe.
-me da gusto que tengas amigas.
-tengo dos mamá, una mas enferma que yo y otra mas sana que yo. -le digo.
-tienes que comer.
-no quiero, sabes que las radioterapias me quitan el apetito.
-pero tienes que comer Zoey.
-emmm... bueno. -le digo
Mi madre me da un plato con un poco de comida. A lado de la comida veo mis pastillas, juntas se ven tan bonitas porque son de colores. Me siento en una silla. Trato de comer lo mas que puedo. Cuando veo que un hombre se acerca a mi padre, con una mujer que lleva a un niño en brazos de unos 5 años y mas ni menos que el chico de hace rato, que lleva de la mano a una niña de unos 8 años. Él me mira, bajo la mirada y meto otro bocado a mi boca. Suficiento no puedo mas. Tomo mis pastillas, me las meto a la boca y con un trago de agua me las paso. Miro de nuevo al chico, y noto que no ha dejado de verme.
